¡Oh! Que ganas tenía de escribir eso. No es que haya pasado tanto tiempo fuera de combate, pero a mí me ha parecido eterno. Desde el verano he estado bastante desconectada, yendo a mi propio ritmo sin detenerme mucho en los pormenores, por lo que el fin de año me ha encontrado con la guardia baja, de golpe y sopetón.Me encantaría decir que tendré tiempo para grabar antes de que termine el año para traer un wrap-up, pero no quiero perder una mano por quemaduras graves porque no sé si en realidad podré con tanta cita y tanta cena. A pesar de todo, no poder publicar me ha dejado tiempo para leer, y al contrario de lo que esperaba he leído una cantidad considerable de libros y, lo más importante, los he disfrutado en la medida de lo posible. Tenía muchas ganas de leer algunos de los libros que llevan desde principios de año esperándome en la estantería, o más, y alguno tenía que caer antes de que cambiara el calendario sí o sí.Y los agraciados han sido escogidos de forma totalmente aleatoria y desconsiderada, me podría haber releído La selección, la trilogía entera, y creo que la habría disfrutado como la primera vez por lo menos (así de mal he estado).
Leyendo... La última lectura de 2015: Invierno asesino de Kate A. Boorman
Publicado el 28 diciembre 2015 por Litwatchers @litwatchers
¡Buenos días vigilantes!
¡Oh! Que ganas tenía de escribir eso. No es que haya pasado tanto tiempo fuera de combate, pero a mí me ha parecido eterno. Desde el verano he estado bastante desconectada, yendo a mi propio ritmo sin detenerme mucho en los pormenores, por lo que el fin de año me ha encontrado con la guardia baja, de golpe y sopetón.Me encantaría decir que tendré tiempo para grabar antes de que termine el año para traer un wrap-up, pero no quiero perder una mano por quemaduras graves porque no sé si en realidad podré con tanta cita y tanta cena. A pesar de todo, no poder publicar me ha dejado tiempo para leer, y al contrario de lo que esperaba he leído una cantidad considerable de libros y, lo más importante, los he disfrutado en la medida de lo posible. Tenía muchas ganas de leer algunos de los libros que llevan desde principios de año esperándome en la estantería, o más, y alguno tenía que caer antes de que cambiara el calendario sí o sí.Y los agraciados han sido escogidos de forma totalmente aleatoria y desconsiderada, me podría haber releído La selección, la trilogía entera, y creo que la habría disfrutado como la primera vez por lo menos (así de mal he estado).
¡Oh! Que ganas tenía de escribir eso. No es que haya pasado tanto tiempo fuera de combate, pero a mí me ha parecido eterno. Desde el verano he estado bastante desconectada, yendo a mi propio ritmo sin detenerme mucho en los pormenores, por lo que el fin de año me ha encontrado con la guardia baja, de golpe y sopetón.Me encantaría decir que tendré tiempo para grabar antes de que termine el año para traer un wrap-up, pero no quiero perder una mano por quemaduras graves porque no sé si en realidad podré con tanta cita y tanta cena. A pesar de todo, no poder publicar me ha dejado tiempo para leer, y al contrario de lo que esperaba he leído una cantidad considerable de libros y, lo más importante, los he disfrutado en la medida de lo posible. Tenía muchas ganas de leer algunos de los libros que llevan desde principios de año esperándome en la estantería, o más, y alguno tenía que caer antes de que cambiara el calendario sí o sí.Y los agraciados han sido escogidos de forma totalmente aleatoria y desconsiderada, me podría haber releído La selección, la trilogía entera, y creo que la habría disfrutado como la primera vez por lo menos (así de mal he estado).