Argumento de la editorial
El robo de valiosos volúmenes en el Museo de Audenas, propiedad del Barón del mismo nombre, impulsa a Thierry Dumont, su criado y amante de los libros, a investigar el caso. Pronto descubrirá, gracias a las informaciones de un loco obsesionado con la obra de Nostradamus, que tal robo, al igual que otros ocurridos en la ciudad de Toulouse, está relacionado con la búsqueda del Liber Hespericus, un libro de antiquísimos orígenes, mediante el cual supuestamente Nostradamus habría hecho sus vaticinios. Al tiempo, la fría y distante Elizabeth McPherson, escritora de novelas de alta literatura, de visita en Toulouse, apuesta con otra escritora que es capaz de escribir un bestseller de aventuras en dos meses. Durante una cena con el Barón y su criado descubre la historia del Liber Hespericus, y decide inspirarse en eso, y en sus anfitriones. Thierry Dumont y Elizabeth McPherson se verán arrastrados a una investigación sobre el fabuloso libro mientras, en las sombras, una Orden milenaria prepara el camino para el surgimiento del Gran Monarca anunciado desde tiempo inmemorial? ¿Se cumplirá la profecía? Una novela de aventuras, misterio y romance, con un desenlace trepidante y lleno de fantasía y acción, en la que se revela la más inquietante de las profecías de Michel Nostradamus acerca del destino de Europa.
OPINIÓN
Hacía tiempo, mucho tiempo, que no leía un libro de aventuras en el más extricto sentido de la palabra...me he reído desde las primeras páginas con el humor sarcástico que desprenden sus personajes, me he sentido un ladrón de guante blanco, y también me he metido en la piel de una señoritinga pija, borde, rebelde e irritante hasta no poder más...o sea, que he acabado adorando a los personajes, muy a pesar mío (no me gusta esto pues luego no me los saco de la cabeza una vez terminada la novela).
Gracias a la editorial Ipunto ediciones por enviármela, y al esfuerzo de Covadonga para que llegara a mis manos.
Mendoza nos propone una aventura clásica: la búsqueda de un objeto muy valioso para la salvación del mundo (o para su destrucción, menuda paradoja). Es un tema manido, desarrollado hasta casi el límite, pero la autora se luce, ha logrado engancharme a su propuesta, a su mundo de alucinantes aventuras. Quiero un Liber Hespericus para mirar a los ojos a mis propias fantasías, quiero un Thierry Dumont que alegre mis días y mis noches, quiero un Jacques que me haga reir y "estirarme" un poco, quiero ser una señora madura a la que los hombres cortejen aunque sea solo por su dinero (cosa harto improbable que suceda, por cierto) y quiero vivir aventuras en museos, casas señoriales y campos abiertos, lagos y bosques.
Me gusta el conocimiento de la autora sobre la geografía francesa, buena documentación, aunque hay descripciones que me sobran para seguir la trama, (pero me gustan porque aprendo), al igual que me sobra la realidad política del país vecino, aunque también entiendo su influencia en la trama.
La autora tiene un particular sentido del humor que se refleja en todas sus páginas: le gusta a rabiar la denuncia político-social del mundo en que vivimos, muy sutilmente, pero denuncia al fin y al cabo. Es capaz de crear personajes muy bordes e irritantes, y aún así, acabas queriéndolos.
Al final, pese a la irritación que me producía el personaje femenino al principio, he terminado comprendiéndola: no es autosuficiencia lo que la mantiene viva, sino el miedo a sentir lo que acaba sintiendo.
La aventura de Liber Hespericus, bajo mi punto de vista, no es más que la búsqueda de la satisfacción personal, de intentar la confirmación de nuestras convicciones.
Todos tenemos un espíritu aventurero...Covadonga Mendoza no hace más que sacarlo a la luz.
Nota personal a la autora:
Gracias Cova. He disfrutado enormemente con la novela, y, personalmente creo que debo decir que hay mucho de tí en la novela.
Me encanta tu sentido del humor, que también se refleja en tus obras.
Besos, o besines, como te gusta a tí.