Este Libro de piedra es un ejemplo de cómo podemos adaptar la forma de la piedra a casi cualquier objoeto de uso cotidiano. En este caso es algo sencillo, pero si quisiéramos obtener una forma con muchos entrantes y salientes o partes delicadas, sería conveniente adaptar estas partes a las posibilidaes que nos ofrezca el tipo de piedra con el que estemos trabajando y no querer "forzar" el material, ya que esto nos conducirá a la rotura, fracaso y frustración por no poder realizar el trabajo adecuadamente.Para comenzar debemos partir de un sillar o sólido capaz con unas dimensiones adecuadas a la forma final a obtener. Realizaremos bocetos a escala real y vistas de alzado y perfil de la pieza con las que posteriormente realizaremos unas plantillas que nos ayuden a perfilar la forma. Trazaremos sobre la piedra lineas que nos delimiten por donde debemos retirar piedra, tallando tiradas alrededor de cada paramento y posteriormente abujardando la parte central. Una vez realizadas las partes rectas procederemos a tallar las curvas, ayudándonos de las plantillas y contraplantillas de manera que retiraremos la pieda hasta que esta se adapte al perfil curvo deseado. El remate lo daremos "matando los cantos" o aristas con el propio cincel o con una lima si la piedra es blanda. También podemos pulir la piedra de manera que resalten granos y fósiles, como el bivalvo que aparece en nuestra piedra, y anñadir algún abrillantador o potea para reforza el brillo.
Este Libro de piedra es un ejemplo de cómo podemos adaptar la forma de la piedra a casi cualquier objoeto de uso cotidiano. En este caso es algo sencillo, pero si quisiéramos obtener una forma con muchos entrantes y salientes o partes delicadas, sería conveniente adaptar estas partes a las posibilidaes que nos ofrezca el tipo de piedra con el que estemos trabajando y no querer "forzar" el material, ya que esto nos conducirá a la rotura, fracaso y frustración por no poder realizar el trabajo adecuadamente.Para comenzar debemos partir de un sillar o sólido capaz con unas dimensiones adecuadas a la forma final a obtener. Realizaremos bocetos a escala real y vistas de alzado y perfil de la pieza con las que posteriormente realizaremos unas plantillas que nos ayuden a perfilar la forma. Trazaremos sobre la piedra lineas que nos delimiten por donde debemos retirar piedra, tallando tiradas alrededor de cada paramento y posteriormente abujardando la parte central. Una vez realizadas las partes rectas procederemos a tallar las curvas, ayudándonos de las plantillas y contraplantillas de manera que retiraremos la pieda hasta que esta se adapte al perfil curvo deseado. El remate lo daremos "matando los cantos" o aristas con el propio cincel o con una lima si la piedra es blanda. También podemos pulir la piedra de manera que resalten granos y fósiles, como el bivalvo que aparece en nuestra piedra, y anñadir algún abrillantador o potea para reforza el brillo.