El agua es un espacio fantástico para que los niños se desarrollen al tiempo que fortalecen vínculos con sus padres. Iniciarse en la actividad acuática desde que son bebés les ayuda en su desarrollo psicomotriz y les proporciona momentos de impagable felicidad, pero también puede ponerles en peligro si no conocen bien sus límites. Los bebés, al nacer, tienen el reflejo de cerrar la glotis de manera instintiva, porque siempre han estado en un medio líquido. Aprovechando este reflejo, se les enseña a hacer inmersiones y a flotar, poco a poco, y a medida que van creciendo, a ser capaces de salir del agua por sus propios medios mucho antes de saber nadar.
Un niño no tiene la capacidad de aprender a nadar hasta los 3 o 4 años de edad, pero si sabe flotar y está familiarizado con el agua tendrá muchas posibilidades de salir airoso en caso de accidente al salir a flote con sus propios recursos. Los lectores del libro aprenderán a disfrutar desde el primer baño en la bañera hasta los veranos cerca del mar o la piscina, con seguridad y alegría para todos.
Se puede comprar en librerías (entre ellas la que Lenoarmi tiene en la calle Dr. Roux 19-21 de Barcelona) y en formato e-book a través de www.lenobooks.com.