José Manzaneda.- El periodista Pascual Serrano ofrece un nuevo ejemplo de cómo funcionan de forma coordinada los distintos factores de poder en el escenario del consenso contra Cuba en el artículo “La coordinación perfecta”.
En el año 2010, el periodista César González-Calero ganó el Premio Eurostars Hotels de Narrativa de Viajes por su novela "Cuba a cámara lenta" (2). El premio está organizado por el grupo turístico español Hotusa, la editorial RBA y la Universidad de Barcelona.
El galardón está dotado con 18.000 euros y, además supone la distribución del libro de forma gratuita en todas las habitaciones de los 58 establecimientos de la citada cadena hotelera. Por otro lado, existe otra edición para su venta en librerías a cargo de la editorial RBA.
Hay que recordar quién es el autor de este libro sobre Cuba para entender el porqué de este premio. César González-Calero trabajó como correponsal en La Habana para el periódico mexicano El Universal (3). La tendenciosidad y el sesgo propagandístico de sus informaciones desembocaron en la no renovación de su visado de prensa por parte del Centro de Prensa Internacional de La Habana (4). Ahora trabaja para el diario derechista La Nación, de Argentina, y el blanco habitual de sus ataques es el presidente venezolano Hugo Chávez (5).
Increíblemente, el jurado del citado premio valoró el "equilibrio" de la novela que, según el propio autor, describe una Cuba que se acerca al final de una época, es decir, cuya tesis es la derrota inevitablemente de la Revolución cubana (6). Raro "equilibrio" que apuesta por un único escenario posible de futuro: el de una Cuba reconvertida en uno más de los países capitalistas de América Latina.
César González-Calero es uno más de los numerosos periodistas extranjeros acreditados en Cuba que han conseguido, tras su marcha de la Isla, el respaldo de la industria editorial (7). La condición imprescindible para ello: repetir los habituales tópicos mediáticos sobre el país, en torno a la exageración de sus problemas y al silencio de sus logros sociales, así como eludir cualquier análisis comparativo con la situación de los países de su entorno.
Otro caso reciente, muy similar, es el de Vicente Botín, excorresponsal de Televisión Española en La Habana, cuyos dos libros sobre Cuba son fuertemente promocionados por la industria editorial (8). La razón es la misma. Reproducen el mismo discurso sobre Cuba aceptado por editoriales y medios de comunicación, con su imprescindible revisión de la historia, demonización del gobierno cubano, negación del impacto del bloqueo de EEUU, y exaltación de la "disidencia" cubana, peón político cuyos probados nexos financieros con el gobierno de EEUU son silenciados intencionadamente por el autor.
En resumen; un nuevo libro de un periodista resentido con el gobierno cubano, que repite todos los tópicos acerca del inevitable fin de la Revolución, recibe fondos de una universidad pública, es editado y distribuido por una gran editorial, colocado en las habitaciones de hoteles de varios continentes, y promocionado por grandes medios. Para que después leamos, en los textos del mismo autor, que el "sistema" en Cuba dispone qué se publica, qué se edita o qué se difunde.
(1)http://www.pascualserrano.net/noticias/la-coordinacion-perfecta
(2)http://www.telecinco.es/informativos/cultura/noticia/1366196/1366196
(3)http://www.eluniversal.com.mx/notas/408477.html
(4)http://www.eluniversal.com.mx/notas/408395.html
(5)http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1099709
(6)http://www.ub.edu/web/ub/es/menu_eines/noticies/2010/entrevistes/Cesar_Gonzalez_Calero.html
(7)http://www.solodelibros.es/08/06/2009/la-casa-de-cristal-isabel-garcia-zarza/