www.laregión.es
Tras abordar el octavo día de cuarentena, parece que fue hace un año cuando salíamos a la calle sin restricciones. A lo largo de toda la historia de la literatura universal hemos sido testigos de aquellas historias (reales o ficticias), con personajes (reales o no) que permanecieron largos tiempos encerrados o aislados; viviendo así alejados de la sociedad y sin más contacto que con ellos mismos.
Con esta introducción, me gustaría continuar con el reto que os propuse hace unos días. Pero, esta vez, se trata de nombrar aquellas novelas donde sus protagonistas permanezcan aislados del mundo; la razón, da igual.
El conde de Montecristo, de Alejandro Dumas.
¿Os animáis?