Libros problemáticos 2° parte: ¿cómo debe reaccionar el autor de un libro juzgado?

Publicado el 22 enero 2018 por Pipervalca

Sí, has abierto las redes sociales y te encuentras con que tu novela, esa a la que dedicaste sudor, sangre y dinero, es tendencia (hasta en Snapchat). No porque sea un best seller ni porque la estén amando. Al contrario, llaman a tu libro racista, homófobo, misógino, etc, siendo estas palabras las más amables y suaves. En conclusión, te encuentras en la picota pública.

¿Cómo vas a reaccionar? (asumiendo que las acusaciones son serias)

Antes de entrar de lleno en el tema y aunque muchos opinen que designar a un libro como problemático es demasiado subjetivo, en la entrada anterior y en este hilo intento explicarlo mejor.

¿Un poco más claro? Empecemos.

Así que tu libro es más criticado que un vestido en la alfombra roja de los Premios Oscar. ¿Qué vas a hacer? ¿Llorar bajo la lluvia como nuestro amigo de la portada o algo más efectivo y convencional como el harakiri?

No importa, si sobrevives al shock inicial, te convendría seguir los siguientes pasos:

1. ¡Aléjate de internet!

Sí, aunque suene ilógico. El primer paso es cerrar la ventana del navegador y apagar el computador (o ponerte a escribir tu próxima novela sin cometer los mismos errores que en esta). No vale cambiar al móvil. Lo mejor en este momento de calentura es tomarte un tiempo antes de sentir el impulso de contestar.

Supongo que ya lo habrás vivido en alguna discusión con otra persona. Cuando nos sentimos ofendidos no controlamos nuestra lengua y llegamos a ofender. No te conviene, te lo aseguro.

2. No respondas a ninguno de los críticos

Aunque algunos sean demasiado agresivos y la turba se haga incontrolable, no respondas a nada. Tampoco le pidas a tu pareja, tu padre o a un amigo que lo haga. Déjalo así. Las personas tienen derecho a sentirse molestas si tu libro las ha ofendido e iniciar una discusión personal es contraproducente. Y por favor, ¡No bloquees a tus críticos! Si quieres bloquear a los
haters, que nunca faltan, es una decisión personal.

3. No busques excusas

Es duro, no lo puedo imaginar. Todos esos lectores escribiendo en sus blogs lo problemático que es tu libro porque no supiste representarlos de forma adecuada o lo que sea. ¿Recuerdas cómo te sientes cuando respondes en esos hilos calientes de Twitter o a esas publicaciones de Facebook?


Con seguridad dirás algo así como "no fue mi culpa", "no fue mi intención", o serás más agresivo con expresiones como "lo hice por esto y por aquello". Sea como sea, no inicies hilos con explicaciones porque, si tu libro en verdad es problemático, no llegarás a ninguna parte.

4. Habla con tus amigos

A lo mejor tienes amigos negros, con discapacidad, LGTBQI o de algún grupo que ha sufrido representación injusta en algún momento de sus vidas. Este es el mejor momento para acercarte a ellos y pedir consejo. Ellos no se enojarán, intentarán ayudarte porque son tus amigos y comprenderán que quieres hacer lo correcto.

5. Discúlpate

Si controlaste el deseo de responder a las criticas, es el momento de redactar una publicación o una carta disculpándote. Esta carta la puedes publicar en tus redes sociales o en tu página web. Muy profesional y a la altura.

¿Qué escribirás en esta magnánima carta?

Lo primero es pedir perdón (recuerda que tu novela ofende) y a continuación prometer que lo harás mejor en el futuro. No digas "lamento que la gente se haya sentido ofendida", porque significa que te estás librando de tu responsabilidad. Intenta decir: "lamento haber ofendido a alguien con esto". Eso es prácticamente todo.

Tampoco trates de "abordar" los problemas del libro, diciendo de dónde sacaste inspiración o dando alguna justificación innecesaria. Parecería que estás tratando de excluirte de la narrativa y no se ve bien. Discúlpate por el daño causado, pero no entres en detalles. Si alguien pregunta NO CONTESTES. Con tus disculpas es suficiente.

Aunque me alargaré en este punto, creo que es el más importante de la entrada y por eso compartiré un caso particular.

Chuck Klosterman es un escritor estadounidense. Hace varios años fue criticado por usar con frecuencia la palabra "retardado" y "jodidamente retardado". Asumámoslo, es una palabra ofensiva para las personas con dificultades cognitivas, sus familiares y aliados.

Para sorpresa de muchos, Chuck respondió publicando una carta dirigida a alguien que manifestó su malestar y que es madre de un niño con Síndrome de Down:

Estimada Sra. Wagner-Peck:
He pasado los últimos dos días tratando de encontrar una manera de abordar correctamente el problema que ha planteado en su sitio web. Poco a poco he llegado a la conclusión de que la mejor manera es siendo lo más directo posible: estaba equivocado. Tienes razón.
No debería haber usado "retardado" de forma peyorativa. Era inmaduro, hiriente e irreflexivo. No tengo justificación para mis acciones. Me doy cuenta de que los libros que contienen esos sentimientos fueron publicados hace más de 10 años, pero eso no es excusa; era un adulto cuando los escribí y supe lo que estaba haciendo. Me siento terrible por esto y profundamente avergonzado. Asumo la plena responsabilidad de mis acciones y entiendo por qué esto es tan importante para usted. Lo siento mucho.
Siéntase libre de volver a publicar este mensaje en su sitio web. Merezco las críticas que estoy recibiendo, y quiero que otras personas sepan que me doy cuenta de que estaba equivocado. También me gustaría donar $ 25,000 a cualquier organización benéfica que usted considere importante para mejorar las vidas de las personas con discapacidades cognitivas [...]. He hecho algo malo, así que ayúdame a hacer algo bueno.
Una vez más, me disculpo, y no solo contigo y tu hijo, sino con cualquier otra persona que haya sido herida por esto.
- Chuck Klosterman

Sin palabras. Estoy seguro de que si Chuck se hubiera enfrascado en discusiones virtuales no hubiera obtenido una reacción tan favorable en la comunidad. Podría haber escrito cosas como que no es tan malo y que la gente es muy sensible, pero bajó la cabeza y se disculpó. Admitió su falta, aceptó el impacto de sus acciones. Sin excusas. Algo muy genuino.

Aunque creo que ninguno de nosotros podrá superarlo en donar esa suma de dinero, una publicación de ese calibre nos otorgará puntos.

6. Hazlo mejor

Ya queda mejorar. ¿Qué significa hacerlo mejor? Buscar o contratar (sí, para los que me contactan. Unos euros por mi trabajo y tiempo pueden ayudar) lectores de sensibilidad para el futuro.

Hacer lo mejor es tratar de ser más inclusivo y más consciente de los problemas a nuestro alrededor y si nuestros lectores pueden verse afectados por la imagen que plasmamos de ellos.
Las personas que critican nuestros libros no son una "mafia" o similar, solo están tratando de hacer lo mejor para proteger a los adolescentes de situaciones difíciles. Debemos entender que no se trata de censura, ni policía, ni nada más. Es cuestión de aceptar que escribir, al igual que cualquier acción, tiene consecuencias, y un escritor debe pensar en todas ellas. Es su trabajo.
Si hay tiempo para arreglar tu libro, manos a la obra. Hazlo ahora mismo o busca a tus editores y, por el amor de Dios, obtén algunos lectores de sensibilidad.

Eso es todo por hoy. En nuestra próxima entrada hablaré de las excusas más comunes usadas por las personas para defender libros problemáticos (existen valientes que dan la cara por estas novelas).

PD: mi novela Héroes de cajón está por publicarse. ¡Yo veré!