Life Itself

Publicado el 05 enero 2019 por Patricia Bañuelos @PatyBanuelos24

Un fracaso más de las historias cruzadas

Dan Fogelman se ha ganado un lugar en el corazoncito de los amantes de las comedias románticas, tanto en series televisivas como en el cine, ya sea en su faceta de guionista o ahora como director. Life Itself trata sobre una historia de amor ambientada en las calles de Nueva York y en una provincia de España a lo largo de varios años, durante los cuales sus personajes se entrecruzan.    La verdad es que no tengo la certeza de quién fue el primero en hacer películas de este tipo, debo decir que a mí esta premisa me resulta dudosa, mientras mejor es el elenco, peor es la película. Claro que hay sus gloriosas excepciones, pero éste no es el caso. Copiando la fórmula de su serie This Is Us, Fogelman se hace acompañar de Oscar Isaac, Olivia Wilde, Mandy Patinkin, Olivia Cooke, Laia Costa, Annette Bening y Antonio Banderas, para abordar temas sobre el amor y las pérdidas, para hablar de la vida misma, vaya, pero ¿qué cree? Pues que no le salió.    De entrada promete, ese primer capítulo hasta me hizo brincar del asiento, demasiado brusco por momentos, pasa uno del amor a la locura, de la locura a la tragedia y sólo queremos saber más, nos despierta una curiosidad morbosa. Sensación que se va diluyendo más adelante, hasta el grado de perder el sentido y de ser totalmente predecible. La historia gira tantas veces, que la voz narrativa se queda sin rumbo, de tal manera que cuando llegamos a España ya estamos de pleito con el GPS.    No puedo hablar de buenas actuaciones, pero tampoco se puede culpar a los actores del fracaso de la cinta. Me gusta el papel de Isaac y de Bening, con todo y sus exageraciones, del resto no hay mucho que mencionar.   Life Itself tiene sus buenos ratos, tal vez no le resulte del todo desagradable si usted es rosa de corazón y puede soportar uno que otro susto, es más, cuando la película llega a la mitad, le concede la cortesía de poder levantarse al baño y no perderse de nada. Así que si la piensa con fines prácticos, hasta le puede parecer atractiva.