Esta gente no vino sola, sino que también trajeron sus modos de vida, su música, danzas y demás tradiciones las cuales si bien eran vistas con cierto desprecio por los limeños de entonces, con el correr de los años se han impuesto como una parte esencial del espíritu de la capital y hoy toman las calles de la otrora ciudad señorial y le dan un toque multicolor y festivo que la alegran, la hacen distinta, más vivaz.
La recomendación es esta. Si estás de visita por Lima anda un domingo al centro histórico ya que el lugar está más tranquilo. Caminando por esas calles con un poco de suerte encontrarás alguna procesión o festividad en donde participarán los inmigrantes de provincias o sus hijos (los nuevo limeños, entre los que estoy yo) danzando con sus ropas coloridas y al son de los ritmos andinos o selváticos y te sentirás como si estuvieras en las orillas del lago Titicaca viendo el desfile de la Mamacha Candelaria o quién sabe en una mini celebración que rememora a la fastuosa fiesta del Corpus Christi de Cuzco. Estas fotos te mostrarán que es así y que como ya te dije antes, las provincias peruanas están en Lima, esta ciudad es el caleidoscopio perfecto desde podrás tener una mirada general de este país llamado Perú.