Gloria Swanson era una vieja gloria del cine mudo. Hoy, una compañera del partido me enviaba un sketch de Sunset Boulevard, que en español se tradujo como "El crepúsculo de los dioses", inolvidable pelicula por cierto de Billy Wilder, donde se narra la historia de una antigua estrella del cine mudo, Norma Desmond (interpretada por la citada Gloria Swanson), quien, incapaz de aceptar que sus días de gloria pasaron, sueña con un retorno triunfante a la gran pantalla. Y curiosamente, en estos días que corren, el PSOE, no lo digo yo, lo dice Felipe González, anda con los brazos caídos a la espera de una derrota electoral. Porque parece, a mi modo de ver, que en muchos casos los actores del cine mudo (políticos que protagonizaron la transición) quieren protagonizar una de cinemascope (con las peores encuestas de todos los tiempos), quizás para quedarse con algo de la gloria perdida. Mi partido parece más preparado para encajar la pérdida de apoyos que para pelear en la cancha. Desde luego se ha hecho un final de partido peor imposible, con la guinda de la reforma de la Constitución que todavía nadie ha sabido explicarme para qué se ha hecho. Y, desde mi modesto punto de vista, la clave se encuentra en el mal endémico de la organización, la falta real de una articulación de voluntades entre lo que opina el militante de base y el aparato o los aparatos, que aquí en Andalucía los hay de diferentes niveles (pizarristas, griñanistas,...). Resulta que desde arriba te proponen una lista más o menos cerrada de los que se suponen van a salir, y luego las asambleas locales tienen que votar. Lo malo es que si las asambleas locales no votan a los que se proponen desde arriba, entran en contradicción las legitimidades de la asamblea y el órgano en el que la asamblea en su momento delegó, lo que prueba que hay una falta de dialogo entre militantes y dirigentes. En Cádiz es la cosa aún más grave si se piensa que en muchas agrupaciones de la provincia apenas votan al candidato que iría de número 3, que por ende, es el Secretario General Provincial. Y lo mismo ocurre con el candidato número 1 que es el mismísimo Manuel Chaves, una vieja gloria del partido que al final ha decidido no jubilarse y cambiar la dedicación a su nieta por la del hemiciclo. Salvo en la capital donde han salvado los muebles los candidatos oficiales, a costa de asistir un escaso veintitantos por ciento de la agrupación, los datos indican que la lista no es querida por los militantes. Sin embargo todos dan por supuesto que se va a imponer, y terminará siendo la que se presentará a la Junta electoral, la misma que desde un principio se cocinó entre mesas camillas. Por ello muchos periódicos dicen ahora, si los candidatos del PSOE no son votados por su propios militantes, cómo le vamos a pedir a los gaditanos que los voten. Mal nos va si en vez de poner los candidatos mejores nos repartimos el resto del naufragio entre los que más colocados están. Y esto quizás ocurre porque cuando el barco se hunde, (cuando el cine mudo desaparece, como pasaba con la película de Gloria Swanson), más de una vieja gloria termina convirtiéndose en una gloria ...muy vieja.