La Fiscalía General del Estado ha pedido a la Ertzaintza, la Guardia Civil y la Policía Nacional que investiguen las candidaturas electorales de la coalición Bildu. Rodoldo Ares y Alfredo Pérez Rubalcaba se han puesto de acuerdo para elaborar y remitir a la justicia informes y documentación sobre Bildu, que tendrán, sin duda alguna, una clara intencionalidad política. No es descartable, en ningún caso, que Bildu corra la misma suerte que Acción Nacionalista Vasca en 2007 y haya candidaturas que pasen el filtro de los tribunales y candidaturas que queden en el camino. El Partido Popular no quiere a la izquierda abertzale en las instituciones para poder extender así su pacto con Patxi López a Diputaciones y Ayuntamientos, y el PSOE sabe que el lehendakari depende de los votos de Antonio Basagoiti. Por tanto, está todo abierto, aunque, en mi opinión, se equivocan quienes someten a Bildu al test de la justicia, que en este tema ha demostrado más arbitrariedad que independencia. Sus candidaturas son tan democráticas como legítimas y su apuesta por las vías exclusivamente pacíficas y políticas tan sincera como la de Sortu.