Título: Bajo la misma estrella Original: The Fault in Our Stars Autor: John Green Editorial: Nube de Tinta Género: Oportunismo Literario, Voga Bloggera. Calificación: 3/5 Sinopsis: A Hazel y a Gus les gustaría tener vidas más corrientes. Algunos dirían que no han nacido con estrella, que su mundo es injusto. Hazel y Gus son solo adolescentes, pero si algo les ha enseñado el cáncer que ambos padecen es que no hay tiempo para lamentaciones, porque, nos guste o no, solo existe el hoy y el ahora.Y por ello, con la intención de hacer realidad el mayor deseo de Hazel -conocer a su escritor favorito-, cruzarán juntos el Atlántico para vivir una aventura contrarreloj, tan catártica como desgarradora. Destino: Amsterdam, el lugar donde reside el enigmático y malhumorado escritor, la única persona que tal vez pueda ayudarles a ordenar las piezas del enorme puzle del que forman parte...
RESEÑA
Por una parte, puedo entender que un sólo libro pueda gustar a un grupo de personas. Pero cuando ese grupo se amplía, siendo rara la reseña negativa del libro (habré visto dos o tres opiniones negativas) y, con el próximo estreno en España de la película hay una cosa que puedo hacer: unirme al enemigo y animarme a leer el libro. Algo debe tener para que haya enganchado a una mayoría muy generalizada.
Normalmente, soy muy reticente a leer estos libros, ya que tanta buena opinión puede acarrear en un hostiazo por mi parte. Y yo soy una persona bastante quisquillosa con los libros. Salvo casos excepcionales, siempre veo algún fallo a algún libro. Yo soy así. Bajo la misma estrella es uno de estos casos. Y el mérito viene a que John Green era un escritor, considerado mediocre en un principio, hasta que publicó este libro y alcanzó fama. Y una legión de admiradores a cada cual más entusiasta.
Pero una de las razones por las que este libro ha tenido esa fama y repercusión es la temática que trata: Adolescentes con cáncer. Reconozcamos que nos gusta muchas veces leer situaciones dramáticas y ver que la gente ficticia lo puede pasar peor que nosotros. Y este libro rebosa drama por doquier y exprime el drama cancerígeno mezclado con el romance adolescente con el único objetivo de hacernos llorar como magdalenas y provocar una inundación en nuestras casas.
Hazel Lancaster es una joven de 16 años que ha sobrevivido a un cáncer de tiroides en estadio IV con metástasis en los pulmones, con las secuelas de ir conectada a una bomba de oxígeno y a base de un medicamento experimental que mantiene a raya el posible crecimiento de los pulmones, dañados por el cáncer. El libro nos cuenta a través de su voz su día a día, que es el de una chica hastiada de todo lo que le rodea, ya que piensa que puede morir en cualquier momento y que sólo quiere conocer a su escritor favorito, con cuya obra maestra se siente identificada y que le resuelva algunas dudas.
Por otro lado, tenemos a Augustus Waters, un joven que ha sobrevivido a un osteosarcoma (cáncer de huesos), con la secuela de haber perdido una pierna. Es la antítesis de Hazel: también sabe que puede morir, pero lejos de meterse en una nube pesimista, decide dejar alguna huella en el mundo, para no ser olvidado. Y entre estos dos, pues florecerá una relación poco a poco. Tampoco hay que olvidar a algún secundario como Isaac, el amigo ciego de Augustus que sufrirá un desengaño amoroso y está deseoso de vengarse de su ex. Y las familias de Augustus y Hazel, que sacrifican sus vidas para mejorarles la suya. Y el escritor favorito de Hazel, que aparecerá y no será esa persona que ella piensa.
El libro tenía puntos para que me gustara... pero no ha sido así en gran medida. Y culpo a los personajes principales por esto. En el libro se mencionan algunos premios de consolación por tener cáncer, así como los premios de la Genie Foundation. Yo siempre pensé cuando estaba leyendo el libro que Hazel era una borde amargada porque el cáncer se lo permitía y era un premio de consolación que se había autodado. Una cosa es ser borde por naturaleza, pero que una persona actúe así sólo porque tenga una enfermedad grave no le encuento la justificación. Augustus podría haberme caído bien, pero tanto optimismo le convertía en una especie de borderline que siempre consigue lo que se propone y con una personalidad algo prepotente.
Si hay una cosa que el libro se salva en parte, es por la forma de plantear que ha tenido el autor. Bastante original dentro del género canceroso (o de hacer llorar) y tampoco tan lacrimógeno en mi opinión como son películas como La decisión de Anne. Aunque tened en cuenta que no suelo llorar con nada de esto. Con decir que nunca he llorado con Titanic. La trama en general era coherente, aunque el final quedaba un poco de más la forma planteada. Es lo que yo llamo un sube-baja. Era una historia bien llevada, pero elementos como el final y los personajes han entorpecido su calidad.
Para terminar, yo creo que a much@s de las que me leéis si no habéis léido el libro, igual os gusta, ya que es lo que yo veo que soléis leer. Bajo la misma estrella puede vender lo que escribe, pero en realidad es una obra sobrevalorada por un grupo pequeño que ha ido haciéndose más grande. Y yo ahora me voy y dejo que algunas de vuestras humildes opiniones dejen mi intelecto semejante al de un neandertal y pongan en duda mis conocimientos de literatura y apreciación de novelas.