Literatura: 'The Raven Boys. El tercer durmiente', de Maggie Stiefvater [The Raven Cycle #3]

Publicado el 25 noviembre 2015 por Cristina @miss_xerinola

"-Son tres. Tres en particular -murmuró Persephone-. A los que hay que despertar... No, no. Dos. Hay uno que no debe despertar." 


Libro: El tercer durmiente (Blue Lily, Lily Blue, 2014)Autor: Maggie StiefvaterEditorial: Ediciones SMGénero: paranormal juvenil, romance, misterioAño de publicación: septiembre 2015Edición: Tapa blanda con solapasPáginas: 416Web: Maggie Stiefvater y The Raven Boys Extras: BooktrailerValoración: 8,5/10
¿De qué trata?Blue Sargent ha encontrado muchas cosas. Por primera vez en su vida, tiene amigos en los que puede confiar, un grupo del que siente que forma parte. Los chicos del cuervo la han aceptado sin reservas; los problemas de ellos se han convertido en los problemas de Blue, y al contrario. Pero hay algo malo en encontrar cosas: el daño que hace perderlas, y lo fácil que es que se desvanezcan. Así que Blue y los chicos siguen buscando. Mientras la idea de Glendower se cierne sobre ellos, cada vez más posible y cercana, los chicos del cuervo se enfrentan a la existencia de tres durmientes. A uno deben despertarlo. A otro deben no despertarlo. El tercero no importa. Entre viejas amistades que se deforman hasta convertirse en otras cosas y nuevas amistades de final profetizado; entre madres desaparecidas, cuevas malditas, doncellas delirantes, héroes asesinos y villanos de opereta, Blue continúa su búsqueda. Lo que no sabe es qué busca, exactamente. Pero eso no importa: aunque ella se equivoque, hay algo que la espera al final. Algo inevitable. Algo que podría destrozarla... o hacerla feliz
The Raven Cycle 3/4:  La profecía del cuervo  //  Los saqueadores de sueños  //  El tercer durmiente  //  The Raven King

No hay nada más placentero que el sabor de lo conocido, la seguridad que evoca una sensación que recuerda nuestra memoria y que lleva nuestro cuerpo hacia la seguridad de que lo que estás a punto de hacer, es una apuesta segura. Lo mismo pasa con los libros o, en este caso, con el reencuentro de un autor que apreciamos, como es mi caso con Maggie Stiefvater. La voz única y poética que tiene siempre tendrá cabida en mis estanterías y mi corazón, y la tercera parte de su saga paranormal era una de mis lecturas más deseadas del año, porque anhelaba sumergirme de nuevo en su prosa tan vívida y oscura. 
Maggie Stiefvater lo ha vuelto a hacer, me ha vuelto a enamorar, me ha vuelto a conquistar. Es lo que pensaba a medida que avanzaba entre las páginas de The Raven Boys. El tercer durmiente y me sumergía de nuevo en la increíble historia de cinco muchachos hipnotizados por una línea ley y el más allá. A estas alturas y al hablar de una tercera parte, no malgastaré palabras en alabar la trama, por lo que me limitaré a elogiar nuevamente la maestría de la autora para llevarnos siempre al límite y dejar nuestros mundos patas arriba esperando respuestas. The Raven Boys. El tercer durmiente es extraño y lúgubre, diferente de sus otros hermanos encuadernados que rozaban con elegancia lo espeluznante; éste desprende un aura mucho más diferente, más oscura y perturbadora, que acaba asfixiándonos mientras leemos, y todo porque Stiefvater se acerca al final de su propia historia y nos lanza hacia ella sin miramientos. Tras un primer libro sosegado y un segundo que suponía un paréntesis para conocer a sus personajes, The Raven Boys. El tercer durmiente es audaz en su naturaleza, pues conduce a todos sus personajes directamente hacia el peligro pero de manera genuina, lentamente, como quien se aleja de la luz para adentrarse en un túnel, para provocarnos esa conocida sensación hormigueante en el cuerpo sobre el peligro que no vemos. Todo lo que habíamos conocido o suponido en volúmenes anteriores ya está aquí, y podemos palparlo: Glendower, Cabeswater, la línea ley, la maldición de Blue, los tres durmientes. Con una narración igualmente genuina y poética donde Stiefvater se enzarza con la prosa para detallarnos cada escena, nos adentramos en la oscuridad más negra, lenta y enrarecida que existe, siempre pendientes para iniciar ese principio del fin que tanto anhelan los chicos del cuervo, por lo que nos aferramos a sus palabras, siempre con los sentimientos a flor de pie, esperando presenciar el auténtico terror. Todos los capítulos, todas las acciones, todos los personajes, se encaminan inexorablemente bajo tierra, donde la presencia de Glendower es más fuerte que nunca. Por ello, se respira siempre tensión e incertidumbre, y la acción que una vez llega tras esperarla, especialmente el desenlace con un frase final que trastocará a cualquier lector experimentado en el horror, provoca más pavor que frenesí.Nuevamente, no podría extenderme más en su trama, solo destacar lo obvio, que Stiefvater es una obra maestra andante como escritora, y que sabe cómo infundir miedo a través de su poesía oscura y macabra, a partir de una prosa meticulosa y envolvente, pero que nos prepara poco a poco para enfrentarnos al más allá, a lo más oscuro, sin que nos dé tiempo a prepararnos. 

No esperaba menos de Stiefvater con The Raven Boys. El tercer durmiente, y me ha ofrecido hasta más de lo que exigía. Esta tercera parte no ha bajado el ritmo de sus antecesores y ha imprimido más fuerza, más acción y más oscuridad a un concepto de por sí ya escabroso como es el más allá. Ha sido una entrega asfixiante pero deliciosa, con el ritmo único de la pluma vigorosa pero metódica de Stiefvater, y el infalible giro de dejarnos con la miel en los labios, con el miedo pegado a los talones y la férrea determinación de que el final dejará huella para siempre.
Con la colaboración de Ediciones SM