POEMO
Me asomé a la balcona
y contemplé la ciela
poblada por los estrellos.
Sentí fría en mi caro,
me froté los monos
y me puse la abriga
y pensé: qué ideo,
qué ideo tan negro.
Diosa mía, exclamé:
qué oscuro es el nocho
y que sólo mi almo
y perdido entre las vientas
y entre las fuegas,
entre los rejos.
El vido nos traiciona,
mi cabezo se pierde,
qué triste el aventuro
de vivir. Y estuvo a punto
de tirarme a la vacía...
Qué poemo.
Y con lágrimas en las ojas
me metí en el camo.
A ver, pensé, si las sueñas
o los fantasmos
me centran la pensamienta
y olvido que la munda
no es como la vemos
y que todo es un farso
y que el vido es el muerto,
un tragedio.
Tras toda, nado.
Vivir. Morir:
qué mierdo.
Jesús Lizano (Barcelona 1931-2015)
Va otro fragmento, de yapa.
Y no me gustan las personas rectas,el mundo recto,las ideas rectas;a mí me gustan las manos curvas,los poemas curvos,las horas curvas:¡contemplar es curvo!;(en las que puedes contemplar las curvasy conocer la tierra);los instrumentos curvos,no los cuchillos, no las leyes:no me gustan las leyes porque son rectas,no me gustan las cosas rectas;los suspiros: curvos;los besos: curvos;las caricias: curvas.Y la paciencia es curva.El pan es curvoy la metralla recta.
A mi el poemo, me recuerda a Tiriac.