Llantén Veggie Bar, puedes fliparlo

Por Lapastanoengorda

Holi, este es otro de esos restaurantes de mi lista, estoy yendo a muchos sitios últimamente que tenía ganas, todos mis sueños se están haciendo realidad. El Llantén Veggie Bar va a ser uno de los primeros sitios que se me vengan a la cabeza cuando quiera llevar a alguien a algún sitio especialmente rico y barato.

He de decir que me ha sorprendido mucho mucho pero que mucho. Vamos, que me dejó flipado. Vale 10 pavos el menú y no podía estar más bueno, lo que no puedo decir es exactamente lo que llevaban los platos ni cómo estaban hechos ya que el camarero no quería soltar mucha prenda y me dio muy poca info. El hecho de comer algo que no soy capaz de averiguar qué lleva y cómo esta hecho me encanta, la verdad.

Fui con un amigo, yo estaba un poco alterado porque mientras lo esperaba me tomé un café en lugar de un vino, era el tercero de la mañana y así me puso. Se me olvidó que a partir de la 1 de la tarde cuando en teoría no tienes que trabajar más, en lugar de café hay que pasarse al vinito o a la cerveza, si es una artesana IPA mejor, pero se me olvidó y pedí café. De todo se aprende, para la próxima ya lo sé. Pedimos dos menuses, de primero un arroz con algo que parecía seitán y una salsa que te mueres del gusto, hubiera comido todo a base de eso, sin dudarlo. Bueno, eso y uno de los segundos, pero no hagamos spoiler. Este plato tan fuerte se llamaba arroz con pak choi, que viene a ser una verdura china. El otro primero era más simple, una pasta con tomate y albahaca pero tenía un toque especial, la salsa evidentemente era casera y la albahaca fresca.

El segundo muy flipante era algo que no sabré ni describir, según el camarero, unos filetes hechos con alubias, pero no de esos que vienen deshidratados, eran de alubias de verdad cocinas y que hacían un ¨proceso¨ que debe ser mágico porque también parecía seitán y tenía un sabor que buf. La salsa también era indescriptible, buenísima! Creo que sería capaz de estar una semana entera alimentándome de este plato y de el arroz mágico sin cansarme, además creo que tampoco sería capaz de averiguar cómo lo hacen y cómo puede estar tan tan tan bueno. Joder! Quiero volver ya!

El segundo segundo, que también estaba rico pero no era para morirse desde mi punto de vista, eran una especie de albóndigas pero estaba tan lleno que no me apetecía seguir comiendo, además tenían un sabor que me aburría un poco y la textura también, venían acompañadas de ensalada que siempre mola. Y quiero destacar que todos los platos vienen acompañados de mis queridos amigos los germinados. Puntazo.

De los postres no quiero hablar porque estaba muy lleno. Además, desgraciadamente, uno de ellos llevaba plátano. Gran error.

En fin, que seguro que vuelvo pronto a este restaurante a ponerme ciego y a probar toda la carta porque me ha sorprendido que flipas. Deberías ir.

Muak!