Y cómo todos sabéis eso conlleva unos días de hospital, revisiones, llegada a casa, acomodamiento familiar, reestructuración de la casa, horarios y demás... Así que no voy a tener mucho tiempo. Prometo seguir echando un vistazo los ratitos que pueda tanto al blog como a las RRSS, que no pienso abandonaros... Pero vosotr@s también tendréis que tener un poquito de paciencia conmigo si desaparezco durante unos días. Que la llegada del tercero...
¡Un gran, gran abrazo para tod@s! Estamos más felices que unas perdices. :)