Por Javier Silvestre
2018 llega a su final y desde Popelera queremos analizar y destacar lo mejor que nos ha dado la música durante este año. En estos doce meses, hemos presenciado como el reguetón ha continuado dominando el mundo de la música y los ritmos latinos han sido una influencia tal que artistas como Clean Bandit y Marina han explorado terrenos más propios de Luis Fonsi, con el que colaboran en la destacable “Baby”.
A pesar del protagonismo de estos sonidos, la música más urbana también ha salido bastante bien parada, pues el movimiento trap ha conseguido nuevos adeptos. Dentro de esta vertiente, han destacado artistas como Bad Gyal, de querencia más dancehall (su tema “Yo sigo iual” me parece una fantasía), el polémico Yung Beef o C. Tangana, al que todo el mundo sitúa dentro de este panorama a pesar de que es difícil ponerle una etiqueta, pues ha pasado de un tema más puramente trap como “Llorando en la limo”, a otros más reguetón (“Bien duro”) o incluso influenciados por el bolero (“Un veneno”, camino que creo que sería muy interesante para Ana Guerra).
Otro género que está pasando por un muy buen momento en nuestro país es el flamenco. Artistas como El niño de Elche, Rosalía o Soleá Morente nos han mostrado una visión muy personal y, aunque a veces el resultado final está más cerca del pop, no se puede obviar que han insuflado un nuevo aliento a este estilo musical. Ojalá pase lo mismo con la copla, otro género que necesita un poco de vida y que sí que contó con una cierta revitalización cuando figuras como Diana Navarro irrumpieron en el mainstream nacional hace más de 10 años.
Pero si hay algo que no podemos pasar desapercibido en la música de este año ha sido la oleada de artistas que nos ha traído Operación Triunfo, con dos ediciones que prácticamente se han solapado. El resultado ha sido una sobredosis de pop millennial, a veces temazos, otras no tanto. La edición colapsaba cuando, tras la finalización de la última edición, se daban a conocer (polémica mediante) los temas que optan a representarnos en Eurovisión en 2019, entre los cuales destaca “Muérdeme”, de María (una de las concursantes más fascinantes).
No solo de OT vive el hombre y el mundo ha presenciado la dedacadencia de un formato como Factor X, que no ha sabido salir a flote del mismo modo que Operación Triunfo y que lo único destacable que nos ha dejado es a Glitch Gyals, un dúo fascinante y necesario (sobre todo este año que las Bistecs confirmaban que su proyecto había llegado a su fin). “Cómeme el donut” y “Muslona” son dos temas a encumbrar dentro de la música más kitsch.
En cuanto al panorama internacional, han seguido triunfado canciones con influencias latinas. De ahí que algunos de los temazos del año hayan sido “I like it” de Cardi B, “Taki taki” (en la que la rapera también colabora) o el reguetón de artistas como J Balvin, que pretende dar un giro lírico al género. La mencionada Cardi B ha tenido un despegue espectacular (al margen de sus polémicas personales con Nicki Minaj), al igual que la gran triunfadora de este 2018: Ariana Grande, que vive el que probablemente sea su mejor momento. Por otra parte, Dua Lipa ha vivido su consolidación como artista a lo largo de este año, tras haber tenido un 2017 también muy exitoso.
En 2018 ha dado la sorpresa Miley Cyrus, que tras una horrible reinvención hippy-country ha colaborado en el nuevo single de Mark Ronson, “Nothing Breaks Like a Heart”, una canción que devuelve a Miley a un estilo más pop, pero con una personalidad única que hace que me interese en ella como artista por primera vez en toda su carrera. Otras sorpresas han sido el disco conjunto de Beyoncé con su marido, que pone fin a una especie de trilogía junto a sus respectivos últimos discos en solitario, o el de Zayn, que ha decidido incluir en ‘Icaro Falls’ nada menos que 27 canciones (a pesar de su terrible entrada en listas es un disco más que notable).
Tras esta breve presentación general, en la que no he incluido mil y un detalles para que la lectura de este artículo no se prolongue hasta 2020, voy a detallar los que son los productos más destacables de este 2018:
MEJOR CANCION DE BANDA SONORA: LADY GAGA, “I’LL NEVER LOVE AGAIN” (HA NACIDO UNA ESTRELLA)
‘Ha nacido una estrella‘ ha sido una de las películas más comentadas de este año, en parte por la aparición de la carismática Lady Gaga, que también ha participado en la composición de la banda sonora. De entre todas las canciones, destaca “I’ll Never Love Again”, una balada desgarrada con una letra sencilla pero hermosa. La interpretación es sublime y gana aún más puntos dentro de la película, lo cual es importante teniendo en cuenta que estamos hablando de una banda sonora.
MEJOR COLABORACIÓN: ZAHARA Y SANTI BALMÉS, “GUERRA Y PAZ”
Zahara firma una canción muy marca de la casa con “Guerra y paz”, incluida en su último álbum, ‘Astronauta’. En esta canción se suma Santi Balmés, que ayuda a consolidar la atmósfera nostálgica del tema. Sus voces e interpretaciones encajan a la perfección, nos demuestran que son dos de los exponentes más claros del panorama indie español y nos hacen sentir como en casa en una canción bonita y mágica.
MEJOR CANCIÓN: MISS CAFFEINA, “MERLÍ”
A lo largo de un año se graban miles de canciones y muchas de ellas se ven compitiendo para alcanzar el puesto a canción del año. Me decantaba entre otras canciones como “Solo” (de Clean Bandit con Demi Lovato), “Nothing Breaks Like a Heart” (de Mark Ronson con Miley Cyrus), “Dónde estabas tú” (de Vega) o “Pienso en tu mirá” (de Rosalía), pero finalmente me quedé con “Merlí” por su potente mensaje de amor propio, de reivindicarse a uno mismo por encima de lo que digan los demás y dejarse de excusas. La producción de “Merlí” es brillante y el tema es un paso adelante en la carrera de Miss Caffeina, que arriesga y evoluciona sin perder su esencia ni resultar demasiado continuista. Además, el puente en catalán antes del estribillo es bastante curioso, una sorpresa que nadie se espera la primera vez que escucha la canción.
MEJOR PORTADA: LYKKE LI, ‘SO SAD SO SEXY’
Mi portada elegida ha sido la de la artista nórdica Lykke Li. No solo ha dado un paso en cuanto a sonido se refiere, acercándose a ritmos r&b y hip-hop (casi trap en ocasiones) sin perder su personalidad. Es de hecho una de las artistas a las que más fácil le resulta aunar su estilo propio con tendencias actuales y otros ritmos que aparentemente están fuera de su órbita. Además, su equipo ha sido capaz de recrear esta perfecta idiosincrasia en su portada, un collage de muy pocas imágenes que mezcla el blanco y negro con el rojo, un contraste un tanto recurrente pero que refleja a la perfección el contenido del disco.
MEJOR VIDEOCLIP: ARIANA GRANDE, “NO TEARS LEFT TO CRY”
Ariana Grande venía de acumular grandes éxitos en sus etapas previas; con cada disco se superaba y si alguien ha destacado este año sobremanera ha sido ella, gracias a su álbum ‘Sweetener,’ a sus singles y al tema “Thank you, next”, avance de su inminente próximo disco. Ariana cuenta con una gran colección de videoclips liderada por “No Tears Left to Cry”, que para mí también es uno de los mejores videoclips de la historia. No se puede obviar la cámara que va girando al inicio del vídeo, los juegos con la gravedad, los cambios de perspectiva, el maravilloso espacio o los edificios creados a ordenador. Un vídeo de 10.
MEJOR DISCO: CHRISTINA AGUILERA, ‘LIBERATION’
Puede que a nivel comercial Christina Aguilera no esté en su mejor momento, pero ‘Liberation’ le ha servido a la artista para volver a hacer gira después de más de 10 años y conseguir dos nominaciones a los Premios Grammy. No es para menos porque Christina Aguilera ha firmado uno de sus mejores trabajos hasta la fecha. Derrocha toda la personalidad que cabría esperar de ella, expone lo mejor de sí como vocalista (hay exceso cuando ha de haberlo, pero también hay contención). Con ‘Liberation’, Christina ha mantenido una de las cosas que más me gusta de ella y es que ha construido un disco conceptual, con intro e interludios que dan cohesión (“I don’t need it anymore” está perfecta en su sitio y además contiene un fragmento de los coros de otra de las canciones, “Sick of sitting”). “Accelerate” suena sucia y divertida, “Maria” suena épica y su interpretación es convincente, los ritmos de “Like I do” o “Pipe” son contagiosos y las baladas son las mejores que ha escrito en muchos años. De hecho, “Twice” está a la altura de “Beautiful” y “Hurt” gracias a ese comienzo a capela. A la artista se la ve cómoda y ha puesto toda la carne en el asador con temas de corte r&b y hip-hop que suenan actuales y en los que su voz encaja mejor que nunca.
MEJOR ARTISTA: ROSALÍA
Como mejor artista no se podía elegir a nadie que no fuera Rosalía. Su disco, sus videoclips y sus canciones bien podrían entrar en cualquiera de las categorías anteriores. Tiene una voz preciosa y personal que maneja a la perfección, resulta agradable y cercana en las entrevistas (y siempre entusiasmada por explicar y hablar de su proyecto), no tiene prejuicios con los géneros, ha conseguido crear un disco pop con miles de elementos del folclore flamenco, dándole un nuevo impulso al género.
Rosalía ha sabido dar una continuación lógica y adaptada a los tiempos actuales a su primer trabajo discográfico, ‘Los Ángeles’, y ha recurrido valientemente a samples en algunas de sus últimas canciones (“Bagdad” toma prestados algunos elementos de “Cry me a river”, de Justin Timberlake). Además, su proyecto viene acompañado de coreografías, puestas en escenas y videoclips dignos de una estrella internacional. No es de extrañar que el boca a boca hayan hecho de ella una de las artistas más relevantes de este 2018, gracias al éxito de ‘El mal querer’.
Y con esto, cerramos otro intenso año musical. ¿Qué nos deparará 2019?