LO MEJOR ESTÁ POR LLEGAR (Le meilleur reste à venir) (Francia, Bélgica; 2019) Melodrama, Comedia

Directore/as: Alexandre de La Patellière, Matthieu Delaporte --- Intérpretes Principales: Fabrice Luchini, Patrick Bruel, Martina García, Thierry Godard, Pascale Arbillot, Zineb Triki, Lilou Fogli, André Marcon, Jean-Marie Winling, Marie Narbonne, Sébastien Pierre, Philippe Résimont, Rajat Kapoor, Marie-Julie Baup, Yilin Yang, Adèle Simphal, Guillaume Clérice, Laurent Dassault, Maud Le Guenedal, Jocelyne Vignon --- Argumento: Después de un gran malentendido, dos amigos de la infancia, en el que uno cree que el otro tiene una enfermedad incurable cuando es él quien la tiene, deciden hacer todo lo posible para recuperar el tiempo perdido. --- Mi opinión: Buena co-producción entre Francia y Bélgica, dotada de una gran humanidad aunque no demasiada sensibilidad.
Me refiero a que trata de un tema bien serio: la enfermedad incurable, un cárcel terminal, que uno de los dos protagonistas tiene, aunque no lo sabe y cree que su mejor amigo quien la padece. Esto causa no pocos trastornos y muchos equívocos que sacan la sonrisa durante todo el metraje y algunas veces la abierta risa... aunque el fondo no pueda ser más serio. Comienza la película de forma que creo sinceramente que se tarda en entrar en materia. La comicidad expuesta durante su primer tercio está expuesta sin ritmo y las gracietas de lo dos amigos no son especialmente divertidos.

Pero poco a poco la cinta va subiendo de nivel, tanto humorístico como, sobre todo, emocional, llegado a acongojar de veras en su último tercio... sin abandonar las chanzas. Es por tanto, sobre todo, un melodrama, pero siempre bajo la pátina de un canto a la verdadera amistad, esa que se produce entre seres humanos que no pueden ser más diferentes entre sí, que se conocen bien y sin embargo se quieren.

El filme se sostiene gracias a la excelente labor de su pareja protagonista, con mi adorado Fabrice Luchini a la cabeza. Y es que este hombre siempre me emociona y me hace reír a partes iguales. Si fuera yanki ya tendría un par de Óscars, seguro. Creo que merece la pena por, sin abandonar el drama que supone la futura pérdida de un ser humano, resultar en el fondo positiva en su mensaje. Un mensaje expuesto de forma clara al final de la película, cerrando de forma maravillosa la historia.