Lo que aporta la Revolución Cubana es fundamental para nuestros pueblos…

Publicado el 04 agosto 2013 por Rosabaez @LaPolillaCubana

Gracias a nuestra hermana uruguaya Gunnel M Lindblom, les compartimos el emocionado relato de los padres de una recien graduada de la ELAM, con sus impresiones del viaje que realizaran a Cuba, con ese motivo:

“LO QUE APORTA LA REVOLUCIÓN CUBANA ES FUNDAMENTAL PARA NUESTROS PUEBLOS, PARA EL DESARROLLO DE LO QUE SE VIENE EN NUESTROS PUEBLOS”
Adriana D’Ambrosio y Hernán Salina contaron impresiones del reciente viaje a Cuba en ‘Mañanas de Radio’, el miércoles 31 de julio de 2013

“La Revolución Cubana se merece una profundidad en manejar un panorama. Nosotros no fuimos a hacer una cobertura periodística de datos, más bien impresiones de lo que vimos, de charlas al pasar, un poco de cada cosa”, explicó Hernán Salina que, junto a Adriana D’Ambrosio, compartieron sus impresiones en ‘Mañanas de Radio’ tras visitar Cuba a finales del mes de julio, donde participaron de una ceremonia de graduación de médicos en la provincia de Cienfuegos. Al respecto agregó que “los cubanos en dos niveles discuten: en instancias colectivas el rumbo de la Revolución con todo este proceso de los lineamientos económicos por un lado, pero en lo cotidiano, la pelea por tener los servicios, las cosas básicas que sean baratas y eficientes”. Transcribimos la entrevista:

 Diego Martínez: Bueno, estamos recibiendo a dos invitados, amigos, compañeros, son Hernán Salina y Adriana D’Ambrosio que están recién llegados, recién pisando tierra uruguaya después de una semanita que se tomaron de licencia y de disfrute, también por cuestiones familiares, y de todo eso nos vienen a contar. Adriana, Hernán, bienvenidos.

Adriana D’Ambrosio: Buenos días.

Hernán Salina: Buen día para todos.

 DM: ¿Cómo les fue? Cuéntenme un poco en rasgos generales cómo fueron estos ocho días que estuvieron en Cuba, que es algo obviamente envidiado sanamente por muchos.

AD: Bueno, para mí fue -además de volver a Cuba, que siempre es poco el tiempo para estar en Cuba- pero fue uno de los mayores orgullos de mi vida porque fui a la graduación de Valentina que se graduó de Médica -como la audiencia ya sabe pues me han saludado los compañeros- en Cienfuegos.

Fuimos expresamente a la ceremonia de graduación que fue realmente emotiva, fue un momento muy lindo, para ella, para mí y para los compañeros también. Sé que han escuchado acá lo que dijimos (1), porque nos tocó además hablar en nombre de los padres de todos los graduados extranjeros, una responsabilidad importante pero me parece que valía la pena.

Salimos muy contentos, hinchados de orgullo por ver a esos gurises, no sólo a mi hija, eran centenares de chiquilines, en esa fiesta participaron unos 60 pero se graduaron 500 este año. Se les abren las puertas para volver a sus países con herramientas importantísimas para desarrollarse, no sólo en su profesión sino como hombres y mujeres. Me parece que lo que aporta ahí la Revolución Cubana es fundamental para nuestros pueblos, para el desarrollo, para lo que se viene en nuestros pueblos.

 DM: Nosotros escuchamos el audio de lo que vos expusiste y nos imaginábamos el clima, porque nos emocionaba a nosotros, lo que sería en ese lugar. ¿Cuál fue el diálogo con el resto de los padres? ¿De qué nacionalidades había gente? Porque capaz que no había sólo uruguayos.

AD: Había uruguayos que eran la mayoría, pero había hondureños, sirios, costarricenses.

HS: De Namibia, de Guatemala.

AD: Salvadoreños, nicaragüenses, argentinos, chilenos, panameños.

DM: Bueno, casi toda Latinoamérica más algunos países.

AD: Hay que decir también que no todos los muchachos pudieron estar acompañados de familiares y amigos. Nos contaba incluso Carlos, el novio de Valentina, él se graduó el año pasado y su familia no había podido viajar, nos contaba que en su graduación estaba Valentina nada más. Porque claro, en general los que van son gente muy humilde hijos de trabajadores y no todos los padres pueden darse el lujo que nos dimos nosotros, con mucho sacrificio, hay que decirlo también. Juntamos durante un año y ahora seguimos pagando otro tanto.

HS: De hecho está el patrullero esperándonos en la puerta de la Radio…

AD: Pero, bueno, no todos tienen esas posibilidades y el apoyo, por supuesto, de los compañeros para podernos dar el lujo de acompañar a nuestra hija en esa instancia, y más alegría al estar acompañados de compañeros y familiares.


De izq. a der.: Christian, Vitalia (ambos chilenos), Joaquín, Mery, Adriana, Teresa, Federico y Hernán, acompañaron a Valentina en la ceremonia de graduación en Medicina, en Cienfuegos, Cuba.

DM: ¿Pero hubo un intercambio ahí con los padres, también hubo emoción?

AD: Sí, sí, porque la ceremonia se desarrolló, bueno, primero hubo una cena con todos los invitados y los egresados. Después pasamos a un salón donde también se distribuían por mesas, las familias, los distintos grupos de gente y comienza una ceremonia en un local precioso de verdad y con las banderas de todos los países presentes y globos, todo muy adornado por los propios muchachos, ellos se hicieron su fiesta.

Allí habló el Jefe de Carrera de Medicina en Cienfuegos de la ELAM (Escuela Latinoamericana de Medicina), que estaba en una mesa de los Docentes que fueron invitados por los muchachos, los más referentes para todos.

Luego, nos invitaron a hablar en representación de los padres a nosotros y luego comenzó la entrega de los títulos. Los iban nombrando uno por uno, los chicos iban bajando de un tercer piso al escenario y los profesores les iban entregando los títulos.

Al final se emitió un video, que prepararon ellos mismos, desde que llegaron a la ELAM hasta que se graduaron, donde había momentos lindos, emotivos, estudiando o en los laboratorios, en cirugía, cosas bien interesantes. Y después en una parte decía: “pero no todo fue estudio” y mostraron imágenes de ellos en distintas fiestas, haciendo playa, se ve que la pasaron bastante bien y se formó un grupo lindo de  gente. Valentina era lo que contaba, que se quedó con amigos de distintas partes y ojalá puedan reunirse en algún momento.

Al bajar del escenario, nos saludaron varios padres y los docentes. Los padres que se acercaron nos agradecían porque se sintieron identificados con nuestras palabras; los docentes también agradecían el reconocimiento al internacionalismo de la Revolución Cubana.

 DM: ¿Cuánta gente estudia en la ELAM habitualmente? ¿Esa generación de Valentina, por ejemplo?

HS: ¿Eran como 70, no?

AD: Si, pero en esta fiesta, en Cienfuegos se graduaron 500 este año y en toda Cuba, es decir en toda la ELAM que es nacional -porque los 2 primeros años los hacen en La Habana, eran 2.200 estudiantes y después los distribuyen, a partir de 3º, en todo el país. Allí en la ELAM son sólo extranjeros y cuando los distribuyen pasan a estudiar con los cubanos-. Entonces se graduaron miles este año.

 DM: ¿Cada generación, más o menos, son arriba de 2.000 estudiantes?

AD: Extranjeros, más otro tanto de cubanos.

 DM: Qué increíble ¿no? Un país con las necesidades que tiene desde el punto de vista general, económico, productivo.

AD: Sí, y además las dificultades. Un país que se abre y da lo mismo que tiene para sus jóvenes a nuestros hijos.

 DM: Y lo mejor que tiene, porque les da la Educación, la Salud a los pueblos latinoamericanos.

AD: Y comparte lo que tiene y lo que no tiene, eso me parece que es lo más grande, la esencia de la solidaridad, dar lo que no tenés. Ese tenderle la mano a los chiquilines, y no sólo en el estudio, me parece también, los vecinos, no sólo el profesor, el docente o ‘la seño’ –como le dicen ellos a los funcionarios que son como adscriptos- gente que los está rodeando siempre, conteniendo, apoyando en distintos momentos naturales de la vida. Sino también la gente común del pueblo que los recibe, los invita a sus casas en los días festivos, imaginate un extranjero un día de fiesta en otro país, quedás como sapo de otro pozo, y sin embargo los integran, los invitan, los reciben como propios.

Eso también es bien importante y ellos también maman de eso, aprenden a vivir y aprenden de la cotidiana de los cubanos.

Recordemos Diego que pagamos únicamente el pasaje, allá reciben desde el alojamiento y la alimentación, hasta el uniforme y los libros, los cuadernos, lápices, todo. No pagas nada de nada y encima les dan un sueldo mínimo para recreación. Son unos pesos, que les da para salir todos los fines de semana a bailar, a comer, a pasear, a divertirse y disfrutar como jóvenes que son.

 Diego: ¿Por dónde anduvieron? Porque en 8 días, pensando incluso en Uruguay que son más reducidas las posibilidades que hay, es difícil recorrer en 8 días. ¿En Cuba cómo anduvo el tema de la recorrida? ¿Pudieron ir a algún lugar más además de La Habana?

HS: Sí, como decía Adriana, este fue un viaje preparado con bastante tiempo, nos propuso ella tanto a nivel familiar -para ese momento tan particular que era que Valentina se recibiera de médico- y a compañeros, que con un gran esfuerzo que implica, es de esos esfuerzos que vale la pena realmente hacer con estas propuestas que hay de ir a Cuba que se promocionan en la Radio.

Y al final fuimos siete desde acá, entre familiares y compañeros, y allá se sumaron, el compañero de Valentina, Carlos -que es chileno, médico recibido en Cuba y ya está trabajando en Chile- y una pareja de chilenos amigos de ellos. O sea que éramos 11 con Valentina que nos movimos en 2 autos, andábamos juntos para todos lados.

Resumiendo, porque esto es poco tiempo para contar todo lo que implica un viaje. Llegamos el lunes pasado a La Habana, el martes de mañana arrancamos en un micro para Cienfuegos que queda más o menos en el centro de ese lagarto verde que es Cuba en el medio del Caribe. Cienfuegos está a unos 250 km. aproximadamente de La Habana y al sur de la isla, que es donde Valentina hizo la etapa final de su carrera.

Y en la capital provincial en Cienfuegos fue donde se hizo la ceremonia.

Anoche contaba también que fue muy emocionante, bueno, se ve a nivel personal pero para nosotros era cargado de simbolismo el momento en que el martes en la tarde, con muchísimo calor, hizo calor todos los días, llevamos ropa que no tocamos.

 DM: ¿Llevaron abrigo?

HS: No, algo leve porque salimos de acá con un frio polar ¿no? Pero, bueno, en la tarde de ese martes, con mucho calor en una esquina de Cienfuegos cuando llegamos, no estaba Valentina, estaba dando otras vueltas en el auto con su compañero, bajamos todos los bolsos y las mochilas, y el momento en que llega Valentina con su compañero en el auto y se baja en una esquina de Cienfuegos…

Imagínense ustedes, a miles de kilómetros de nuestro país y se abraza con Adriana, que no sé cuánto hacía que no se veían directamente.

AD: Un año prácticamente.

HS: Ya médica Valentina, ese abrazo largo que se dio con Adriana, la verdad que… Bueno, nosotros lo filmamos, eso sí no lo vamos a poner porque es algo personal, pero vamos a poner fotos en el Facebook y eso.

La verdad que nos pasaron muchas cosas por la cabeza y lo tenemos que decir hoy acá también.

Se reforzaba la identidad del colectivo al que pertenecemos, más allá de la Radio, a nivel político. Es decir, la grandeza, porque Adriana conoció Cuba siendo parte de este colectivo, con Héctor Vicente, se fueron cumpliendo tareas para nuestra organización a Cuba y allá nació Manuel que hoy es músico, es un hombre. Y ese momento de ese abrazo entre la hija y la mamá ya como médica, sentíamos la suerte, el privilegio de pertenecer a este colectivo que permitió tener la lucidez de reconocer a Cuba como tal y que esa Revolución permitiera que una hija nuestra, de nuestro colectivo, se recibiera de médico, cosa que es imposible, como Adriana decía en su intervención en la noche de la graduación. Y en la cabeza, las características con que forman a los gurises.
Fueron muchas cosas que nos pasaron por la cabeza en esos segundos y lo queríamos mencionar.

Después, ese mismo martes fuimos un poco a conocer una playa en las afueras de Cienfuegos, Rancho Luna se llama, impresionante. Los días de la semana, cada día hacíamos horas de carretera.

El miércoles fuimos a Santa Clara, al Memorial del Che que después comentaremos así te voy diciendo rápido el recorrido. Cada día hacíamos un poco de playa y varias horas de carretera. Al otro día fuimos a Trinidad, una ciudad colonial impresionante.

AD: Que el año que viene cumple 500 años.

 DM: Es increíble, toda de calles de allí son de adoquines.

HS: Sí, impresionante. ¿Trinidad en qué provincia es Adriana?

AD: Sancti Spíritus.

HS: Sancti Spíritus también más al sur. Y otro día cruzamos la isla de sur a norte para ir a Varadero que tiene mucha fama de internacional pero fuimos a la parte, no donde se concentran los hoteles grandes, de lo cual Cuba saca muchos recursos importantes, sino que fuimos a la parte donde –los cubanos pueden ir a cualquier lado- pero donde se concentra el pueblo cubano que fue un espectáculo impresionante: en los árboles, a la sombra, ver a todas las familias ahí comiendo, ver al pueblo disfrutando de una playa paradisíaca, impresionante, maravillosa, de esas que se ven en las fotos.

Bueno, Varadero fue el viernes y sábado y domingo volvimos a La habana. Ese fue el recorrido muy resumidamente.

 DM: Bien, por todo lo que han contado, que habrán disfrutado mucho. ¿Cuáles fueron esos lugares donde recomendarían, por cómo pasaron ustedes, por lo que es el lugar, para la gente que va a ir a la excursión que se está promoviendo en la Radio, que puedan ir? ¿Hay alguno en especial o son todos?

HS: Todos.

AD: Sí, no puedo elegir. A mí me parece que La Habana en sí, por ser la capital, por congregar todo lo que es el casco histórico de La Habana, es imperdible. Pero después todo lo que uno pueda recorrer…

Cienfuegos es una ciudad espectacular, es preciosa por las construcciones, es preciosa por la gente, por sus playas. Obviamente Cuba es una isla, a donde vas hay playa.

Después, cuando íbamos de La Habana a Cienfuegos pasamos por la Ciénaga de Zapata que es un lugar que ellos explotan también turísticamente pero que…

HS: Es donde crían cocodrilos y eso…

AD: Lo explotan turísticamente pero además son lugares naturales impresionantes, yo no había visto otros iguales.

Creo que a donde vayas en Cuba, es seguro que ahí la vas a pasar bien porque la gente es especial, te reciben como en casa, no sé cómo definirlo pero…

HS: Sí, es una sensación difícil de describir de la tranquilidad que te podés mover a toda hora, por cualquier lugar. Te cruzás con gente de condición humilde, porque acá a veces ya estamos mentalizados de que en ciertas zonas, o de noche, o si ves que viene una barra de gurises a los que les ves pinta rara, todas esas cosas con las que nos han contaminado.

Allá ves la educación de la gente, las calles limpias, las ciudades limpias, es muy raro encontrar un papel en el suelo y ese tipo de cosas, para un país pobre porque siempre se habla de Europa como modelo en eso. En un país de América Latina, la educación de la gente…

AD: Y las playas, acá vas a una playa de tardecita y es un asco, están llena de las cosas que la gente tira, los restos, basura. Y allá no ves eso, hay un tacho de basura como puede haber acá y en cualquier parte, la gente se levanta y cuando se va tira en ese lugar. No quedan los nylons, las latas, los restos, en la playa. Eso es impresionante, eso es cultura, eso es educación.

 DM: Es que por ahí radica la cosa ¿no? No tiene que ver ni con la riqueza, ni con la pobreza sino con los valores que uno haya podido…

AD: Y en las ciudades pasa lo mismo, no ves basura. Igual que lo de la seguridad que decía Hernán.

Porque nos pasó que la guía, cuando nos trasladaron desde el aeropuerto al hotel, íbamos con otros turistas y había una guía que nos iba hablando. Nos decía si teníamos alguna pregunta, nos contaba que estábamos en La Habana, que hay tantos grados, etc., y en una dijo: -Les recomiendo no salir después de no sé qué hora por la seguridad…

HS: Y no subir a un ómnibus…

AD: Nosotros le preguntamos: ¿Cuánto cuesta subir a los ómnibus, a las guaguas?
-Ah no, no, en las guaguas no, me dijo.

Nos pareció raro pero bueno, si lo decía sería por algo, pensamos.

Por supuesto que después lo hicimos, salimos a caminar solos, nosotros no fuimos de turistas, salíamos a caminar en grupo a conocer. Porque además como Hernán había estado y yo también… Yo no me acordaba de las calles pero él tiene memoria y recorríamos, mapa en mano…

 DM: Vos viviste allá…

AD: Claro. Después que estaba en algún lugar me daba cuenta de dónde era, pero después que estaba ahí, de verdad que no me acordaba.

Pero, bueno, salimos y no tuvimos ningún problema, ni nosotros ni vimos algo que le pasara a nadie…

DM: Es que se vive de otra manera.

AD: Incluso en la guagua (que es el ómnibus), subimos a la guagua y yo le decía a mis sobrinos que fueron con el nene que en Cuba los únicos privilegiados son los niños y tal cual: Subimos a la guagua y Joaquín –que tiene 10 años- iba parado con nosotros, se para una señora y le cede el asiento al niño, su papá dijo: -No, muchas gracias, porque era un recorrido corto. Pero la señora le responde: ‘Siéntalo, chico, pobrecito, como va a viajar parado, si frena se cae’. Eso es educación…

 DM: ¿A cuánto estaba el boleto?

HS: 40 centavos de peso cubano, el cambio es un peso uruguayo un peso cubano, son 40 centésimos de acá…

 DM: Y acá nos sale 20 pesos…

HS: Sí, bueno compramos como 15 libros con 5 pesos uruguayos también…

 Diego: Igualito que acá!

Queremos aprovechar que ustedes estén acá, que son compañeros y por lo tanto tenemos absoluta confianza, para que nos cuenten cuáles son los debates que hay hoy en Cuba, dónde está hoy la discusión en Cuba. Hubo un discurso muy encendido de Raúl unos días antes de que ustedes viajaran donde se llamó a poner un poco de pilas a la gente ¿Por dónde andan los debates hoy, por la producción, por la cuestión económica, por la apertura?

HS: Sí, yo quiero hacer una salvedad muy rápida, nosotros contamos impresiones de viaje, en este caso el centro era la graduación de Valentina, una rápida pasada.

La Revolución Cubana se merece una profundidad en manejar un panorama. Nosotros no fuimos a hacer una cobertura periodística de datos, más bien impresiones de lo que vimos, de charlas al pasar, un poco de cada cosa.

Pero en base a lo que vos decís Diego, los cubanos en dos niveles discuten en instancias colectivas el rumbo de la Revolución con todo este proceso de los lineamientos económicos por un lado, pero en lo cotidiano la pelea por tener los servicios, las cosas básicas que sean baratas y eficientes.

Uno de los temas grandes que nos llamaba la atención y que es todo un desafío, un esfuerzo grande para la Revolución, es el transporte, algo que acá nosotros vemos un poco más resuelto por las lógicas del sistema en el que estamos. La gran subvención que hace la Intendencia a las empresas transportistas, todo eso.

De todas maneras ha mejorado el transporte, nos decían, en La Habana. Está quizás más atrasado en el interior, en las otras provincias. Ese tipo de cosas, de debates de cuánto rinde el sueldo, de que lleguen determinados alimentos que cuesta producir. En el contexto de lo que es Cuba ¿no? un país del Caribe, una isla que tiene playas preciosas, que no tiene la tierra que tenemos nosotros para cultivar, para criar ganado, que han hecho un inmenso esfuerzo…

AD: Y que está bloqueado hace más de 50 años.

HS: Claro. Uno de los chilenos que iba con nosotros es ingeniero agrónomo, trabaja de eso en Chile y él se admiraba de cosas que veía, nos iba diciendo en los campos lo que veía. Vio algunos campos con un nivel de riego tecnificado de última generación también. Vio tractores de hace mucho tiempo que se usa sobre todo para la parte de cultivo de arroz y vio equipamiento moderno. “Eso es lo que tengo yo también”, nos iba diciendo él.

AD: Nosotros hace mucho tiempo que nos volvimos de allá, hace 20 años, nos volvimos cuando estaba Cuba saliendo del período especial, de la ‘economía de guerra en tiempos de paz’ aplicada tras la caída del bloque del este que eran los países con los que Cuba comercializaba. Entonces, yo vi un avance importante en cuanto a construcción, en cuanto a infraestructura, en cuanto a comercios…

Yo siempre recalco que es un país bloqueado porque no puede importar lo que necesita, reamente no lo puede importar por más que tenga los recursos para hacerlo porque no se lo venden las empresas.

HS: O lo que consigue lo hace con un gran esfuerzo económico o todo tipo de maniobras y por supuesto más caro.

DM: Porque además les cobran diferentes tarifas justamente porque el que le vende no le puede vender después a Estados Unidos, entonces le cobra más caro.

HS: Claro, o la distancia de donde tiene que traerlo. O cosas clandestinas, bueno, yo le tengo que resolver a un niño que tengo que operar del corazón y lo voy a hacer como sea…

AD: Claro, ahí forman triangulaciones con distintos países o empresas que lo traen por otros lados. Eso encarece también el costo de esas cosas.

En la Salud hay mucho avance, los hospitales están, pasamos por el hospital Calixto García, por ejemplo, que está renovado a pleno. Yo lo conocí antes cuando vivía allí y ahora está no sólo pintado afuera sino se veía mucho más moderno. Y Valentina nos decía que los equipos en todos los hospitales, por lo general está lo último, lo que se necesita para atender todas las necesidades de la gente.

Están trabajando muy bien también en la parte de investigación biológica y científica para el desarrollo de determinadas curas o mejoras de enfermedades bien complicadas. Me acuerdo lo del alacrán azul, ellos han desarrollado toda una línea de investigación con el veneno del alacrán azul, ya se está aplicando en pacientes porque minimiza los efectos de la quimioterapia, por ejemplo, e incluso en algunos casos lo sustituye. Son avances importantes que ellos vuelcan incluso a nivel internacional después.

HS: Ahora se hizo una nueva empresa -nosotros estuvimos con una vicedecana del Instituto de Farmacéutica y Alimentación que la conocemos de la otra vez, es una científica y académica cubana- y nos contaba que se ha hecho una unificación de estas empresas y ámbitos de investigación que se llama Labiofarma [LABIOFAM. N. del E.] Cuba o algo así. Creo que se lo mostraron a Mujica y a todos los presidentes que fueron en estos días. Dentro de los procesos de cambios institucionales han unificado todos esos centros de investigación y que significan también la posibilidad de ingresos importantes, de divisas a Cuba que tanto necesita, el hecho de vender productos de estas investigaciones también.

AD: Otra cosa que vi que antes no se veía, fueron los picaditos de fútbol en distintas plazas. Hay de baseball, pero se ha ido metiendo el fútbol también, vimos en 2 o 3 lugares a gurises, muchachos, y niños.

DM: Es que les está yendo mejor a nivel internacional y yo creo que mucho tiene que ver también el ALBA en esto. Es decir, todos los progresos que ha tenido Cuba, gracias también a Venezuela, a Ecuador y a Bolivia de comunicación con Latinoamérica y sobre todo con estos países, ha hecho que también el intercambio a nivel de deportes se haya dado más fuertemente.

Cuba  ha progresado mucho en fútbol, incluso en el mundial de juveniles que jugó Uruguay estuvo Cuba como representante de Centroamérica. Lo cual es un avance importante para un deporte que hasta hace 10 años era prácticamente desconocido, los niños no juagaban al fútbol…

AD: Sí, o lo veían pero no era para ellos.

Caminar por las calles de Cuba, nos pasó en Cienfuegos y también en La Habana por supuesto, eso de ver gente sentada, con unas tablas ya preparadas, con topes en los cuatro lados, para jugar Dominó. Los vecinos se juntan a jugar al dominó que es de 9 números, no es de 6 como tenemos acá, y juegan de a dos o de a 4. Como acá jugamos al truco, ellos juegan dominó o ajedrez pero en las veredas. Además de la música en todos lados.

HS: Hay una cosa, una de las cosas que se marca en Cuba, todo dicho muy rápido, es que no tiene la gente acceso a Internet masivo como acá que va creciendo, bueno, puede presentar alguna dificultad. Ellos tienen una práctica colectiva de Internet, de acceso en sus centros de estudio. Ahora se están poniendo más centros en barrios, en las ciudades para el manejo de Internet…

AD: Tratando de sortear ese paraguas que les puso EE.UU. para que no llegaran al satélite directamente. Ellos tienen un paraguas informático, no llegan, no pueden salir al satélite, lo bloquearon para que no pueda salir Cuba, no lo ve Cuba.

HS: Claro, por eso desde Venezuela se les ha tendido el cable ese de fibra óptica que están empezando a intentar utilizarlo.

Pero además eso tiene una contrapartida de que hay una práctica, la socialización, en vez de que cada gurí esté metido en su casa con internet y chateando, vos ves a la gente, a los jóvenes que ahora están de vacaciones además, conversando en las calles. Bueno, aprovechando que hay un buen tiempo, los jóvenes están charlando.

Yo qué sé, el sábado de noche vimos a algunos jóvenes, normalmente, con una botella de ron o algo, normal en la juventud, pero la mayoría no.

No vimos como acá que de cada 2 jóvenes hay 1 con una caja de vino. Y están charlando, conversando lo más tranquilos a todas las edades, todas las generaciones en la calle. O sea ejerciendo la socialización mano a mano, cara a cara, por miles vimos en las calles ¿no? Los niños jugando, los jóvenes charlando, cosa que acá vemos todavía un poco más en el interior de repente, pero que en Montevideo vemos que cada vez se pierde más quizás.

DM: Bueno, estamos pasadísimos de hora, les queremos agradecer la visita, que nos hayan contado parte de lo que fue el viaje.

HS: Sí, no hablamos de lo de Che, del Memorial. Estuvimos en la Comandancia de Fidel en Girón, donde estuvo, que no se puede entrar porque es un edificio muy antiguo y está con riesgo de derrumbe, lo están reparando.

Pero, bueno, habrá otros espacios para contar, vamos a poner fotos en el Facebook, trajimos música…

AD: Para los oyentes de la “Música de todos los tiempos” también trajimos novedades…

DM: Muy bueno…

HS: Y de noche seguiremos también con el resto de la gente que fue, vamos a arreglar para que vengan a contar.

DM: Nos vamos escuchando música, gracias a los dos.

Notas de Redacción

(1) Transcribimos la intervención de Adriana D’Ambrosio en la ceremonia de Graduación de Medicina, Cienfuegos 2013; que puede escuchar/descargar en el siguiente link:

http://soundcloud.com/nachov3/felicidad-y-orgullo-compartido

Presentadora: La familia es la escuela del hombre, la que nos enseña a caminar por senderos de luz.

Es por eso que es importante escuchar también las palabras de una madre conmovida y orgullosa del camino transitado por su hija. Invitamos entonces, a la madre Adriana D’Ambrosio quien expresará su sentir en nombre de todos los familiares:

Adriana D’Ambrosio: Buenas noches.

A las autoridades, los docentes, los padres, los familiares, los amigos de estas decenas de noveles Doctores que hoy tenemos aquí entre nosotros, muy buenas noches.

Nos toca hoy hacer uso de la palabra en nombre de los padres de los médicos graduados en la Escuela Latinoamericana de Medicina, en la ELAM, particularmente en la Facultad de Ciencias Médicas de Cienfuegos en este año 2013.

Considero que somos los padres de jóvenes privilegiados que pudieron acceder a estas Becas que otorga la Revolución Cubana para que decenas de miles de jóvenes de los más diversos países del planeta tengan acceso a su formación.

Jóvenes que vienen de países donde prima la desigualdad, la intolerancia, la exclusión, la violencia, han recibido aquí la solidaridad de Cuba que les ha devuelto la esperanza en un mundo justo y solidario.

Jóvenes humildes que con mucho esfuerzo dejaron sus países, sus culturas, sus familias, pero los recibió un pueblo inmensamente generoso que los abrazó, los cuidó y los ayudó a crecer. Y sobre todo los ayudó a formarse como hombres y mujeres compartiendo su modo de vida generoso y solidario. Eso redundará, sin dudas, en que el camino que cada uno de ellos emprende a partir de hoy sea no sólo para ser un médico sino un hombre o una mujer comprometidos con la lucha por la justicia y la igualdad para todos nuestros pueblos.

Ahora, como profesionales, sabemos que les será muy difícil reincorporarse a nuestras sociedades luego de esta experiencia en Cuba, porque allá se reencontrarán con la dura realidad en la que vivimos producto de los sistemas político-económicos que nos gobiernan y que mantienen a la Salud como un objeto más del mercado favoreciendo la atención privada y a las corporaciones médicas.

Pero confiamos en que también ustedes sabrán aportar en ese camino al cambio social donde la Salud no sea otro medio de acumulación del capital sino la satisfacción de las necesidades colectivas de nuestros pueblos.

“Comprendimos perfectamente que vale pero millones de veces más, la vida de un solo ser humano, que todas las propiedades del hombre más rico de la tierra”. Esto lo dijo el médico y revolucionario Comandante Ernesto “Che” Guevara un 20 de agosto del año 1960. Y pienso que hoy es tan válido como en aquel año.

Hoy, jóvenes médicos, ustedes saben que otro modo de vida es posible en base a lo que han recibido aquí.

Les toca ahora la entrega solidaria y el compromiso junto a quienes más lo necesitan, porque tienen las herramientas para ser útiles a los demás como médicos, pero también y sobre todo, como hombres y mujeres honestos moral y éticamente.

No nos queda más que reiterar nuestro profundo agradecimiento al pueblo y al gobierno de Cuba, a la Revolución Cubana, por tanta generosidad y destacar que, a pesar de las limitaciones económicas y materiales producto de más de 50 años del bloqueo imperialista, la Escuela Latinoamericana de Medicina es la manifestación objetiva de la solidaridad y el internacionalismo cubano en el que se han graduado ya cientos de miles de hijos de trabajadores del mundo entero en forma totalmente gratuita.

¡Muchísimas gracias pueblo y gobierno cubano!

Fuente Radio Centenario, Uruguay