Pues si, me hice Tinder. ¿Por qué? Bueno, toda la idea surgió hablando con un amigo sobre nuestras desventuras amorosas. Me hizo mucha gracia el asunto y decidí probar como seria usar esta App para ligar. Mi plan inicial era hacer un sondeo de cómo se comporta el chico promedio de 20-24 años. Todo muy experimental, no era nada serio y evidentemente no pensaba encontrar nada interesante en una aplicación así. Total que por aclamación popular me hice un Tinder falso.
Al principio rechace a casi todos. Los eliminaba al segundo, ya que ninguno me convencía mucho. Cuál fue mi sorpresa que a los que si seleccionaba siempre daban positivo. En tres días tuve 29 matches y 19 conversaciones.
Podéis considerarlo éxito, pero de esos 19, la mayoría intento sonsacarme mi número de teléfono o alguna red social. Una gran parte quiso quedar conmigo “para lo que surja” y ¿Qué pensáis que paso? Sí, me negué en rotundo.
Hubo uno que, bueno, mejor dejarle a parte. Os contare lo que paso, si bien la mayoría eran menos directos, este me lo dijo claramente: “mi novia esta fuera y quiero quedar contigo para desconectar de ella”
Cuando leí ese mensaje (os lo he suavizado un poco, pero imagináoslo de todas formas) me sentí mal, muy mal. Incomoda por lo que me propuso el susodicho, enfadada porque exista gente así y extremadamente triste por la novia de este cabronazo (porque no tiene otro nombre) así que directamente le dije capullo y le elimine.
También había gente con la que conversar de muchas cosas. Y por desgracia muchos machos con el ego herido. A los cuales trate de forma muy borde y dura. Si, dando el coñazo hasta en tinder con el acoso callejero, pero me siento orgullosa vaya.
Conversación real
Obviamente no creo que todo el mundo sea así. También había gente normal, lo que me molesto es que en dicha plataforma todos asumen tu opinión y no preguntan, pues de 19 conversaciones, solo 2 me preguntaron que buscaba.
A esos dos chavales les conteste que solo buscaba charlar y que nada serio. Evidentemente no mentí ni engañe a nadie (Solo en el nombre) y si los demás asumieron cosas que no son fue solo su culpa.
A lo que quiero llegar es que me parece muy fuerte como todo el mundo asume que estas dispuesta a hacer cosas que nunca has dicho, y me pareció tristísimo. A día de hoy he eliminado Tinder y no quiero saber nada más de dicha plataforma ni de ninguna similar. También he descubierto que hablar con tantos chicos es un estrés, y que me da ansiedad hablar con gente desconocida de esa forma. ¿Qué os parece mi experimento? ¿Os sorprenden las cifras? ¿Confiáis en estas plataformas? Decidme cualquier cosa en los comentarios.