Lo que he visto esta semana – Acero Puro

Publicado el 30 junio 2014 por César César Del Campo De Acuña @Cincodayscom

Lo que he visto esta semanaporCésar del Campo de Acuña

Dirección: Shawn Levy.
País: Estados Unidos.
Año: 2011.
Duración: 127 minutos.
Género: Acción. Ciencia ficción.
Guion: Leslie Bohem, John Gatins, Dan Gilroy y Jeremy Leven adaptando una historia corta de Richard Matheson.
Interpretes:   Hugh Jackman, Dakota Goyo, Evangeline Lilly, Anthony Mackie, Kevin Durand, Hope Davis, James Rebhorn, Marco Ruggeri, Karl Yune, Olga Fonda y John Gatins.
Música: Danny Elfman.
Fotografía: Mauro Fiore.
Montaje: Dean Zimmerman.
Diseño de producción: Tom Meyer.
Vestuario: Marlene Stewart.
Estreno en Estados Unidos: 7 de octubre de 2011.
Estreno en España: 2 de diciembre de 2011.

El valor es más fuerte que el acero

Mucho antes de los videojuegos y años antes de la llegada del wrestling/pressing catch a mi vida, si había algo que me gustaba hacer más allá de ver dibujos animados y jugar con mis figuras de acción era dibujar. Dibujar sin complejos, sin la barrera de las influencias, con trazo horrendo pero derramando imaginación y con esa dedicación que solo los niños pueden ponerle a una tarea. Pasaba las horas muertas con mis lápices de colores, rotuladores y ceras dibujando monstruos gigantes (como los Kaiju de Pacific Rim), tanques, armas, ninjas y sobre todo Robots. De todos los tamaños formas y colores aquellos colosos de metal se convirtieron en los principales protagonistas de los folios que me daban para dibujar y claro toda esa pasión pictórica por los androides se tradujo en una constante demanda de material audiovisual que incluyera a los protagonistas de mis “obras de arte”. Dejando a un lado Transformers (la serie que duro de 1984 a 1987) nada de lo que caía ante mis impresionables ojos satisfacía plenamente mi interés por los robots e inevitablemente el tiempo fue pasando.

Y vaya si paso…hasta que en 2011 estrenaron Acero Puro, película protagonizada por ese buen tipo en general que es Hugh Jackman y Dakota Goyo, un niño de que ir al colegio en España le habrían caído collejas hasta en su perfil de usuario de Facebook. El caso es que tras leer la sinopsis me convenció para comprar una entrada en una de esas tardes en las que no tienes nada que hacer. Cuando el film termino estaba emocionado, emocionado como solo un infante puede estar tras ver una cinta que le ha entusiasmado y que le impulsa a gritar “pues yo soy este o aquel personaje” mientras imita con poca coordinación y gracia (salvo para sus padres) movimientos de lo que recuerda haber visto. El caso es que me dejo una agradable sensación y pensé para mi mismo: “esta es la película de robots que me hubiera gustado ver siendo niño”.

La historia nos lleva a un futuro poco distante en el que los deportes de contactos con humanos han dejado paso a un campeonato de robots boxeadores donde el espectáculo esta siempre garantizado. Charlie Kenton (Hugh Jackman), un ex boxeador comido por las deudas, se dedica a pasearse por ferias de tercera fila haciendo exhibiciones con un robot de combate destartalado. El mismo día en el que pierde a su robot de combate se le notifica que la madre de su hijo Max (Dakota Goyo), al que no ve desde hace años, ha fallecido y que tiene que hacerse cargo de su custodia. Esto a Charlie no le sienta nada bien dado el plan de vida que lleva y decide cederle la custodia a la hermana de la fallecida. Finalmente, y tras aceptar una cuantiosa cantidad, Charlie decide hacerse cargo de Max durante el verano para así no estropear las vacaciones de los tíos del chico en Europa. La inexistente relación entre el chico y su padre comenzara a forjarse en el gimnasio en el que Charlie entrenaba para convertirse en campeón de los pesos pesados de boxeo antes de que el deporte desapareciera. Desde el modesto gimnasio de Bailey (la guapísima Evangeline Lilly), la hija de su antiguo preparador, padre e hijo tendrán que aprender a soportarse mutuamente mientras tratan de hacer carrera en el espectacular y brutal deporte de las peleas de Robots con un pequeño androide de segunda generación llamado Atom que es mucho más de lo que parece.

Vale, vale, vale…ya se que estarán pensando que esto es una película para niños/familiar, cargada de moralinas y ese tipo de historias pero… ¿y que importa? Digo yo que cuando una película es entretenida ¿Qué más dará de que genero sea? Si, Acero Puro es una de esas cintas a las que muchos no tardan en denominar como: solo apta para norteamericanos, pero es entretenida, esta bien realizada (sin personalidad alguna, pero bien realizada) y sus valores son universales, fácilmente identificables y comprensibles por la audiencia a la que la producción va destinada. Por otro lado visualmente es una delicia y el hecho de que replicas de los robots se construyeran a escala y no se utilizaran únicamente imágenes CGI dota a la producción de más empaque y calidad (especialmente por la reacción de los actores ante los animatronics y esa sensación de ser reales que transmiten gracias a la buena labor del equipo de titiriteros). La banda sonora es correcta, el diseño de producción es correcto, el nivel interpretativo por parte de los protagonistas es aceptable, visualmente es muy gratificante y aunque argumentalmente repita las premisas de historias mil veces vistas, oídas y leídas el metraje en sí es tan entretenido que no te da tiempo a acordarte de esas futesas, especialmente si ves el film con un niño.

No me avergüenza reconocer que esta película me gusto (tanto como para comprarla en Blu-Ray y verme todos sus extras) y que siempre que la veo disfruto de ella. Simple, sencilla, previsible…todo lo que ustedes quieran, pero pocas veces he salido del cine con la sana sensación de no haber sido estafado y una de esas ocasiones fue tras ver Acero Puro.

Que me ha gustado: pienso que es una película redonda. Tiene una historia para entretener a toda la familia (desde niños ha adultos), tiene la acción suficiente como para contentar a preadolescentes y tiene los justos elementos relativos a la ciencia ficción para llevar a todos aquellos que disfrutamos de comics, videojuegos y demás a verla. Por otro lado visualmente resulta estimulante gracias a la presencia de animatronics y a un diseño de producción muy cuidado. Personalmente sus valores son fácilmente identificables y comprensibles y creo que eso es algo muy importante en un mundo cada vez más cínico.

Que no me ha gustado: No hay ningún elemento de la película que no me gustara. Es cierto que es la historia de siempre pero eso no es algo necesariamente malo (al menos no en este caso). Quizás el único pero que le encuentro a la cinta es el tratamiento que le da el guión al personaje de Max. Para empezar no me gustan demasiado los niños actores y aun menos cuando le dan el típico papel de “enteradillo” que va por la vida con su actitud súper enrollada y aquí se dan esos dos factores. No es problema de Dakota Goyo sino de un guión que le da más sensatez a un chaval de 11 años que a muchos de los adultos que aparecen en la citan…aunque siendo una película infantil, no se podía esperar otra cosa.

Curiosidades

  • Muchas de las peleas de los robots fueron realizadas mediante captura de movimientos con boxeadores reales y estos fueron coordinados por el ex boxeador profesional Sugar Ray Leonard.
  • Además de sus imágenes en CGI se construyó un animatronic de cada robot. Estos eran controlados por más de 20 titiriteros.
  • Hay guiños a la saga Rocky. Zeus, el campeón de los pesos pesados, es llamado así por Apollo Creed y la cresta de Midas es un guiño a Clubber Lang, el boxeador interpretado por Mr.T en Rocky III.
  • El toro que vapulea a Ambush, Kujo, solo tenía un cuerno. El otro se le añadió por medio de los CGI.
  • El autor de la historia corta Steel (relato en el que se basa la película), Richard Matheson también escribió Soy leyenda.

contacto@cincodays.com

Síguenos en Facebook:

https://www.facebook.com/pages/Cincodayscom/455312474507289

Síguenos en Twitter:

@Cincodayscom


Archivado en: Cine, Lo que he visto esta semana