Lo que he visto esta semana…por César del Campo de Acuña
País: Estados Unidos.
Año: 2012.
Duración: 95 minutos.
Género: Terror. Thriller.
Guion: Joss Whedon y Drew Goddard.
Interpretes: Kristen Connolly, Chris Hemsworth, Fran Kranz, Richard Jenkins, Bradley Whitford, Anna Hutchison, Jesse Williams, Amy Acker, Brian White, Tim De Zarn, Dan Shea, Tom Lenk, Jodelle Ferland, Sigourney Weaver y Heather Doerksen.
Música: David Julyan.
Fotografía: Peter Deming.
Montaje: Lisa Lassek.
Vestuario: Shawna Trpcic.
Diseño de producción: Martin Whist.
Estreno en Estados Unidos: 13 de abril de 2012.
Estreno en España: 8 de noviembre de 2013 (de manera limitada).
Country House
Los que me conocen saben que me encanta el cine de terror y que incluso podrían afirmar sin riesgo a equivocarse que se trata de mi género preferido. Sin embargo, invierto poco o muy poco dinero en adquirir entradas para este tipo de films. Los motivos que me llevan a esta contraproducente situación son la absoluta y total falta de compañía a la hora de ir a ver una de estas cintas y la poco agradable sensación que la inmensa mayoría de ellas me dejan y que no es otra que la que te atormenta diciéndote: “podrías haber visto esta película en casa”. Esta frase, que personalmente creo hace eco en la mente de todos los que nos pirramos por el cine más truculento, es probablemente la que me empuja más a no pasar por taquilla y así dejo escapar muchas que, las veas en compañía o no, están muy bien. Una de ellas es la recomendable La cabaña en el bosque, producción estrenada en 2012 y dirigida por Drew Goddard (y guión del propio Goddard y Joss Whedon) que propone al aficionado una celebración de los clichés del horror mas habituales desde principios de los 80 con un giro bastante original en su trama.
Resulta tremendamente complicado escribir sobre esta película sin destripar el argumento ya que, su principal valía se encuentra en la originalidad de su propuesta y aunque ni mucho menos se trate de uno de esos films a los que se puede definir con la frase: “verlo para creerlo” creo que, cualquier buen aficionado al cine de genero, especialmente al terror, debe al menos darle una oportunidad, ya que vera reflejado en sus 95 minutos de metraje todos esos extraños elementos que le llevaron a convertirse en un incondicional de los gritos, la sangre y el humor negro. Goddard y Whedon juegan desde un principio al despiste y van revelando poco a poco los suficientes datos para mantener al espectador intrigado gracias a una trama bien hilvanada, un ritmo fantástico (en el que la narración no entorpece en absoluto la acción) y un acto final tan remarcable como impactante. Personalmente creo que, esta es una de esas películas filmadas con el objetivo de dejar contento a los seguidores de este tipo de cintas, ya que abraza con aprecio lo mejor y lo peor del genero en una celebración tan original como bien ejecutada.
Personalmente, esta ha sido una de las cintas de terror del presente siglo que mejor sabor de boca me han dejado lo que me ha llevado a recomendarla efusivamente e incluso a dedicarle un articulillo. Creo que mi entusiasmo no viene motivado por la nostalgia ya que yo no crecí viendo películas de terror (gracias a la censura de mis padres) y por lo tanto todos los guiños, clichés y demás los he conocido siendo ya un adulto, por lo tanto no escriben mis recuerdos si no los elementos que, por torpes o repetitivos que sean, he aprendido a amar y apreciar en este tipo de producciones. Creo que en esta película lo importante no es el nivel interpretativo, ni si quiera el misterio (esto es un slasher), sino el ritmo, la acción y el montaje. Personajes predicables…si aquí los tienen, pero además tienen una subtrama protagonizada por otros personajes totalmente diferentes a prácticamente cualquier cosa vista en films similares. Localización manida…si, esta presente, pero además el original guión nos lleva a un lugar que parece salido de Apolo XIII. Monstruos parecidos a otros mil veces vistos…desde luego, pero además los responsables se guardan un as en la manga con un quien es quien demencial.
La cabaña en el bosque es una truculenta obra de 95 minutos de entretenimiento y puro amor hacia un género del que todo el mundo tiene derecho a burlarse y al que nadie puede mostrar aprecio en público a no ser que sea en grupos selectos. ¿Quieren pasar un buen rato una vez más con un slasher fresco y original? ¿Quieren ver cuanto saben sobre el terror en el cine? Pues no lo duden, la cinta auspiciada por Drew Goddard y Joss Whedon es lo que buscan y lo que un género tan vilipendiado y golpeado como el slasher necesitaba.
Que me ha gustado: ¿Todo? No, fuera de bromas. Creo que es un notable homenaje/parodia (sin caer en la astracanada y en la broma fácil) del cine de terror. Si les gusta el género pasaran un rato genial y realmente entretenido hacia el final de la película.
Que no me ha gustado: Pocas cosas, pero si tuviera que decir alguna, ciertas inconsistencias del guión (siendo justos, solo encontré una).
Curiosidades
- El termo de café/pipa de agua que Marty (Fran Kranz) lleva era completamente funcional y el prototipo costo 5.000$.
- La primera escena de la película fue un intento deliberado de Drew Goddard y Joss Whedon de confundir a los espectadores haciéndoles creer que se habían equivocado de sala.
- La película fue filmada en 2009, pero no fue estrenada hasta 2012 ya que el estudio quería darle el tratamiento 3D. Goddard y Whedon se opusieron. Finalmente la película, retraso incluido, solo fue estrenada en 2D.
- La primera vez que Maya Massar tuvo que ser maquillada como la madre de los Buckner, paso 8 horas en la sala de maquillaje. En posteriores sesiones, tardaban entre 4 y 6 horas en aplicarle el maquillaje.
- Gran parte de la inspiración de Drew Goddard para esta película vino de su propia educación en Los Alamos, Nuevo México, un lugar lleno de científicos y trabajadores que viven aparentemente una vida ordinaria a pesar de que estaban construyendo armas nucleares que podrían potencialmente destruir el mundo entero.
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