Lo que nos sabes Comandante.

Publicado el 05 diciembre 2013 por Jmartoranoster

Zonia Linares.

Así como en un momento de regocijo con él mismo, el entonces candidato Nicolás Maduro tuvo la sensación de estar hablando con un Hugo Chávez materializado en un pajarito, antes de dar comienzo a su campaña electoral en abril de 2013, estoy convencida que muchos de nosotros nos hemos encontrado también hablando con él, no ha sido fácil digerir la realidad que nos tocó vivir aquel 5 de Marzo, cuando dieron la noticia que nuestro amado gigante nos había abandonado físicamente, el dolor, la impotencia, las preguntas sin respuestas hicieron presa de nosotros era imposible creer que aquel hombre que vimos fuerte como un roble y que al hablar su voz era un canto a la vida, hubiera perdido la batalla más importante que debió ganar que dejará su morral a mitad del camino, repleto de sueños, de luchas y de tantas cosas que le faltaron por hacer, Han pasado nueve meses desde entonces, y no ha pasado un solo día, que su nombre no esté en nuestros labios, que miles de venezolanos no lo nombremos con el mismo amor de siempre, como él siempre lo dijo amor con amor se paga, fue tanto su amor, que el mundo entero lo recuerda, lo homenajea, lo honra, rememora su obra, y aquí en su patria su legado se ha hecho ley. Pero hoy Gigante quisiéramos que supieras, lo que no sale en la prensa en la televisión, ni en ninguna red social, debes saber que todavía y hoy más que nunca en cada hogar de esta patria, en la mano temblorosa del anciano guardada entre sus cosas más queridas, existe una foto tuya manchada de muchas lágrimas y que cada noche en sus oraciones incluye tu nombre como si de un hijo se tratará, que los niños de preescolar entonan el himno nacional porque creen que esa era tu canción favorita, que los jóvenes te nombran y se tocan el pecho en señal de que vas ahí dentro en su corazón y que aquellos que escribimos sobre ti sobre tu obra, tu amor y tu memoria, escribimos sobre líneas húmedas, porque hasta a eso nos enseñaste a llorar sin ninguna restricción y el llanto se ha vuelto rebelde. Esa, comandante es la realidad que se esconde en la intimidad de los hogares de esta patria, patria que dejaste en manos de tu hijo Nicolás sabiendo que la dejabas en buenas manos porque, eso si lo sabes, que la tarea que le encomendaste hasta ahora la ha cumplido con fidelidad y lealtad sabemos de la gran responsabilidad y de las grandes intenciones que tiene para cumplir a plenitud tu mandato, pero Chávez seguirás escuchando de nosotros, te seguiremos pidiendo que tus ojos, esos que nos dejaste observándonos jamás se extingan para que esta revolución tenga la fuerza suficiente para soportar todos los embates que tiene que enfrentar día a día. Por ahora y para siempre sigues invicto eterno comandante.