Lo que tu armario dice de ti (y de tus errores en las compras navideñas)

Por Anad

Tu armario refleja tu estilo personal y, en gran parte, te define. Pero también se puede volver en tu contra cuando se trata de escoger la ropa por las mañanas, cuando vas a comprar ropa nueva o cuando se trata de invertir bien tu dinero.

Vamos a analizar tres tipos diferentes de compradores y, si te sientes identificado con alguno de ellos, te damos consejos para que mejores tus hábitos de compra.

Armario: los adictos a las compras

Este es un caso más habitual de lo que puedas pensar. Las personas entran en un bucle y acaban por caer siempre en la misma trampa, comprando muchas veces la misma prenda de ropa igual, pero con pequeñas variaciones. Normalmente el objetivo de estas personas es renovar o actualizar su armario y tienen la intención de hacerlo, pero suelen caen en el error (de manera inconsciente) de comprar siempre lo mismo.

Entras en una tienda, das una vuelta por ella y tus ojos se van hacia la ropa que más se parece a lo que ya tienes. Y acabas por comprarlo porque sabes que te sienta bien. La consecuencia es que en el armario tenemos 10 pares de pantalones vaqueros y 8 tipos diferentes de camisas blancas.

La solución:

Ir con calma y no intentar innovar. Ir a tiendas que conozcas y en las que sepas que no vas a gastar demasiado. Si has salido con la idea definida de comprar algo que no encuentras, vuelve a intentarlo otro día o compra algo lo más similar posible. Prueba de nuevo la prenda en casa, si no te convence, estás a tiempo devolverla.

La próxima vez que quieras ir de compras, haz un análisis de lo que tienes y una lista sólo con lo que realmente necesitas. De esta manera irás a la tienda con el objetivo de encontrar lo que está en la lista y no caerás en la tentación de comprar algo que no necesites. Para ello, evita pasar por la sección donde están las camisas blancas y los vaqueros que ya tienes en casa…

Errores en las compras navideñas: los popstar

Este tipo de comprador se siente atraído por todo lo que tiene lentejuelas y brilla, prendas de ropa que pueden llegar a ser muy carismáticas de una en una, pero que todas juntas pueden arruinar el look de quien las viste. Mucha gente compra estas prendas fascinada por su encanto, pero cuando llega el momento de ponerlas, se dan cuenta de que no tienen nada que combine con ellas.

La solución:

Este tipo de comprador suele centrarse sólo en prendas de ropa llamativas y olvidarse de que es importante tener básicos en el armario para poder usarlos combinándolos con el resto de ropa . Por ejemplo, si tienes una sudadera con lentejuelas, tal vez no combine bien con los pantalones de estampado de leopardo, pero sí con una falta negra o unos pantalones negros. Los básicos no son la prenda de ropa preferida de los Popstars, pero son fundamentales en cualquier armario.

El rey de las promociones

La mayor parte de las personas entran en una tienda y ya saben qué van a comprar, pero los reyes y reinas de las promociones primero miran la etiqueta con el precio y después la prenda de ropa. Estas personas pueden llegar a gastar 50€ en ropa que antes costaba 200€ aunque no le quede del todo bien, con la esperanza de que algún día le servirá y la podrá aprovechar.

La solución:

No es bueno comprar únicamente cuando hay rebajas o cuando una pieza de ropa tiene un precio mucho más bajo que el que tenía originalmente. Estas personas acaban por tener prendas de ropa en el armario que aún tienen la etiqueta puesta y que nunca llegarán a ser estrenadas. No tiene sentido comprar prendas de ropa por muy baratas que sean si nunca van a llegar a ser utilizadas.

Conclusión, es necesario ir de compras con las ideas claras, para comprar sólo lo que es realmente importante. La mejor opción es hacer una lista en casa con las cosas que tenemos y las que hay que comprar. Y si cuando vayas a la tienda ese artículo está rebajado pues, ¡aprovecha la oportunidad! Sólo cuando se tienen las ideas claras evitamos cometer errores.

Si aún así no consigues organizar tus compras… ¡contrata la ayuda de un personal shopper!