Locke (2013)

Publicado el 24 agosto 2014 por Rugoleor @rugoleor

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Un orgulloso padre de familia y exitoso ingeniero de la construcción llamado Ivan Locke (Tom Hardy) recibe una misteriosa llamada de teléfono en la víspera del que puede ser el mejor día de su vida profesional. Esa llamada va a poner en jaque todo por lo que ha luchado durante tantos años. Para Locke, ha llegado la hora de afrontar la realidad, los errores pasados y los chantajes que vendrán. Para Locke… nada volverá a ser como hasta ahora.

Calificación: 7,046.

Tráiler de la Película

Ficha

Título Original: Locke.
Director: Steven Knight.
Guionista: Steven Knight.
Intérpretes: Tom Hardy, Ruth Wilson, Andrew Scott, Olivia Colman, Tom Holland, Ben Daniels, Bill Milner, Danny Webb, Lee Ross, Silas Carson, Alice Lowe, Kirsty Dillon. Quitando Tom Hardy, todos los demás son actores de doblaje (voces) en la versión original.
Productores: Guy Heeley, Paul Webster.
Fotografía: Haris Zambarloukos.
Música: Dickon Hinchliffe.
Montaje: Justine Wright.
Diseño de Producción: Gisela Evert.
Diseño de Vestuario: Nigel Egerton.
Países: Reino Unido, Estados Unidos.
Lugares de Rodaje:
Fechas de Rodaje: Febrero de 2013.
Año: 2013.
Duración: 85 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 12 años.
Género: Drama, Suspense.
Estreno: 22-08-2014.
DVD (Venta):
Distribuidora: Vértigo Films, S. L.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España, Sitio Oficial.
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.

Crítica

24-08-2014 – ANTÓN MERIKAETXEBARRIA

Trampa mortal

El desafío que supone filmar una película de principio a fin en el interior de un coche está resuelto con brío por el director británico Steven Knight (autor de “Redención”, 2013), en un dramático ‘thriller’ titulado “Locke”. Se trata de una intriga urbana protagonizada por un alto ejecutivo (interpretado con garra por Tom Hardy), cuya apacible vida familiar queda hecha trizas por culpa de una inesperada llamada telefónica. Un potente BMW, que se desplaza a toda pastilla por las afueras de la industriosa ciudad de Birmingham, es el único escenario donde se desarrolla la trama, que depara al fin más de una sorpresa.

Así pues, estamos ante una historia de perdición, sin abandonar siquiera por un instante ese claustrofóbico espacio cerrado, abierto únicamente a las distintas llamadas telefónicas, así como a toda una serie de luces, de vehículos que circulan raudos por la autopista, de inhóspitos exteriores, que el espectador apenas puede vislumbrar desde el interior del vehículo. Lo cual deriva en un cuento turbio, cruel, donde se asocian de forma sistemática sexo y violencia, ese perfume malsano de la flor corrompida, ese clima de pesadilla despierta, de atmósfera enrarecida, capaz de producir en el espectador un sentimiento de inseguridad.

El título hace referencia al nombre del protagonista, Ivan Locke, y no tiene nada que ver con el filósofo inglés John Locke, para quien el único conocimiento cierto era el de la propia existencia. Porque, en última instancia, “Locke” es un considerable viaje al interior de uno mismo, un estudio sobre la corrupción, la mezquindad y el abuso de poder. Un pequeño prodigio de perspicacia visual, urdido a base de una planificación en la que no sobra ni falta nada, que a menudo se transfigura en un mal sueño, en una aterradora alegoría del mundo actual, capaz de sumergir al espectador en la inquietud de una noche que no tiene mañana posible.