Yo encuentro divertido experimentar. Es verdad que a veces te llevas alguna decepción y hay pruebas no superadas, de esas que cuando llegas a casa estás deseando quitarte determinada prenda y no volverla a ver.
Otras veces eliges mal la ocasión para ser innovadora. Te vas encontrando fuera de lugar, la tendencia tan divina parece un disparate y te refugias en tu mesa de trabajo esperando que llegue la hora de salir.
También hay tendencias estupendas que resultan de lo más incómodo. A mí, el sábado, me saltó disparado un cinturón elástico que llevaba con un vestido camisero negro para darle algo de color. Era de esos cinturones que se ajustan a la altura del torso, sobre las costillas. Una respiración profunda y... el comensal de en frente vio volar una cosa verde que a todos les pareció una faja. Tuve que explicar, roja, que no, que era un complemento muy fashion... que no me he vuelto a poner. Al menos, hasta que le refuerce los botones.
Pero no probar cosas nuevas se convierte en un aburrimiento. La moda no es una religión ni nuestro armario debería ser un reflejo de normas y consignas. Podemos darnos el lujo de sentirnos libres aunque solo sea probando algo arriesgado y atreviéndonos a equivocarnos.
Eso sí, algunos consejos para estas ocasiones:
- Adapta el look a tu fisionomía: no todo nos queda igual a todas. Hay prendas que por muy inspiradoras que resulten no te favorecen, así que intenta escoger aquellas que realcen puntos fuertes de tu anatomía.
- No arriesgues al completo: si una propuesta es muy lanzada, intenta compensarlo con otras prendas más discretas.
- Adapta las tendencias a tu naturaleza emocional: si eres una persona tímida no te lances de golpe a llevar escotes profundos, o colores estridentes. Busca algo que te inspire sin dejar de ser tú misma.
- Prueba en casa diferentes combinaciones de prendas para acertar con la forma más adecuada de llevar esa tendencia que aún te parece demasiado nueva. No dejes nada al azar, en tal caso, bolso, calzado, abrigo... Una buena idea, dentro de una mala combinación, puede convertirse en un experimento desastroso.
- Échale decisión: no hay nada que convenza menos que ver a alguien tocándose continuamente una prenda; estirando una falda corta para taparse las piernas, tirando de la manga de un jersey con líneas arriesgadas... Si te decides a innovar y arriesgar con un look difícil, échale un poco de valor y trata de que no se noten tanto tus dudas. Si te convences a ti misma, verás cómo habrá más de un/a enamorado/a de tu idea.
- Si el experimento fracasa por algún detalle, corrígelo y, si aún te convence, vuelve a intentarlo de nuevo. Pero si resulta desastroso, elimínalo de tu lista para siempre.
Algunos looks difíciles que nos vamos a encontrar en esta temporada:
ZUECOS (de toda la vida, pero resucitados por Chanel y seguidos por otras marcas)
Aunque lo parezca, los zuecos no son un calzado cómodo. Suelen ser rígidos y si no se sujetan bien al pie por la zona de delante, corres el riesgo de quedarte con el zapato fuera. Si además le incorporan semejantes tacones, para mí el riesgo de este look es acabar en el suelo. Mi apuesta por los zuecos se orienta más a una adaptación del modelo clásico, que tenga alguna clave de "confort" (marcas como Clarks hacen frecuentemente algún modelo que merece la pena)
SANDALIAS ABOTINADAS (las heredamos del otoño-invierno)
El problema de los calzados tipo botín es que acortan la figura. Si no eres muy alta y los llevas con falda te puedes encontrar poco favorecida. Mi consejo: unifica el color del botín-sandalia con el de tus piernas apostando por tonos 'nudes' o por el color de las medias (si aún lo usas en temporada de fresquito).
SANDALIAS CON MEDIAS O CALCETINES (llevan varios años intentando quedarse)
Yo no sé si llamarlo "la atracción del horror" pero a mí sí me gusta. No sé si me atrevería a llevarlas con calcetines (mucho menos en el look 'Lolita' con calcetines por la rodilla) pero sí que me gustaría llevarlas con medias si son de algún color bonito, de canalé, etc. De momento solo me he atrevido a llevar con medias los zapatos 'peep-toe', y aún así, he visto gente mirándome raro. Pero eso me divierte, a veces.
FALDA-PANTALÓN (no termina de implantarse, pero lo hará)
FALDAS CORTAS CON VUELO o VOLUMEN (una vuelta a los 80)
Tal vez en un corto no tan exagerado, o apostando por ellas en un look totalmente casual, para salir y especialmente en verano.
Yo me he atrevido con faldas con vuelo, algo más cortas de lo habitual, en esta etapa de entretiempo: me la puse con medias de rejilla en color nude (favorecen mucho y disimulan defectos) y botas, por eso no se veía tan exagerado y me gustó el look.
PANTALONES BOMBACHOS (que no se van)
Y vosotras, ¿cuál es el look más arriesgado que habéis llevado? ¿Y vuestra apuesta innovadora para esta temporada?