Algunos nacieron con un sencillo uso, como el martillo, mientras que otros desafiaron los límites que no creían posibles, como el avión. Pero sin importar el porcentaje de inspiración o transpiración por cada invento, nos han cambiado la vida para siempre.
Todo invento comienza con una idea, pero algunas crecen y logran cambiar al mundo. La necesidad es la madre de la invención.
Desde la oscuridad el hombre busca la luz y comienza usando una simple vela; de un lugar alguien quiere comunicarse a la distancia y nace la idea del teléfono. Pero algunos inventos transformaron la vida más allá de nuestros hogares: la máquina a vapor, el telescopio, y el internet todo cambia nuestra vida. En esta cuenta regresiva veremos como la inventiva llega de todas formas y maneras.