Te ofrecemos una guía de las ciudades europeas más refrescantes para combatir la actual ola de calor que se vive en España. Para todos aquellos que ya estén hartos de las altas temperaturas que azotan nuestro país desde primera hora de la mañana hasta bien entrada la noche, hay buenas noticias: los expertos en turismo europeo de la agencia GowithOh han elaborado una lista de los cinco destinos más refrescantes dónde escaparse.
Vayan preparando la maleta:
1. Londres
La capital del Reino Unido, cuna británica y ciudad internacional por excelencia, es la opción favorita de los españoles para escapar de la actual ola de calor. Según datos de la agencia de apartamentos turísticos GowithOh, las búsquedas de información sobre alojamiento, comida y visitas recomendadas en la ciudad inglesa han aumentado un 114% a partir del pasado mes de mayo.
Con un clima templado e impredecible, la mayoría de los días de verano en Londres son agradables y soleados. La gente disfruta de los parques con un picnic y tomando Pimm’s y se organizan muchos festivales al aire libre. La temperatura media ronda los 20°C y durante los veranos especialmente calurosos la temperatura puede subir por encima de los 30°C. ¡Bye bye a la ola de calor!
2. París
La Ciudad del Amor, la Ciudad de la Luz… llámala como quieras: París es un clásico. La capital francesa es uno de los destinos más dese
ados para pasar unos días románticos y llenos de arte este verano. Así lo refleja la demanda para instalarse unos días en la ciudad, que a mediados de mayo de 2015 se ha disparado casi un 80%.
“Muy alejada de ciudades Mediterráneas como Niza y Marsella que atraen a muchos turistas por su clima, París también reco
mpensa a los millones de visitantes con temperaturas agradables y suaves durante todo el año”, señala el equipo de GowithOh. Con el clima característico de Europa occidental, los veranos de la romántica urbe no son muy calurosos. Bon voyage!
3. Ámsterdam
Su ambiente relajado y emocionante por la mezcla de historia y hedonismo hacen de Amsterdam una ciudad irresistible. Hablar del tiempo siempre es un tópico de conversación recurrente en Holanda, independientemente de la estación en la que estemos. Aunque los holandeses tienen derecho a quejarse porque el tiempo puede ser bastante impredecible, Ámsterdam tiene veranos suaves que albergan una gran variedad de festivales.
Bares y terrazas se llenan de sedientos turistas y habitantes locales y la gente pasea con sus barcos por los canales. Las temperaturas llegan a los 25°C, lo que para muchos holandeses ya es un calor abrasador. Los expertos recomiendan consultar siempre que se pueda el pronóstico del tiempo antes de dejar el paraguas en casa.
4. Berlín
Estrafalaria y creativa, Berlín está indudablemente de moda. Con la llegada del buen tiempo, las búsquedas en Internet para viajar a Berlín suben como la espuma. Concretamente, un 145% en mayo respecto a abril.
En un solo día en Berlín se pueden dar las cuatro estaciones del año. Aun así, generalmente, el comienzo de la primavera y los meses de verano en la capital alemana son muy agradables y, de pronto, la vida cotidiana parece desarrollarse casi por completo al aire libre. Las temperaturas normalmente son cálidas oscilando en torno a los 25 º C, con lo que se pueden disfrutar de tardes y noches sorprendentemente agradables con muchos eventos al aire libre, incluyendo “Fete de la Musique” y “Berlín CSD”.
5. Praga
Cervezas excelentes, arquitectura sorprendente y extravagantes hallazgos son algunas de las mejoras cosas que Praga guarda para todo aquél explorador nato.
Los meses de verano ─junio, julio y en especial, agosto─ son calurosos. Las temperaturas oscilan entre los 20° y los 35° C, pero pueden llegar hasta los 40° C. El sol puede brillar fuertemente y por eso es muy importante tener a mano la crema solar. Según explican desde GowithOh, el aire acondicionado no es un equipamiento muy usual en los restaurantes y espacios públicos de Praga. Por ello, el mejor lugar para pasar las horas de mucho calor es la terraza con sombra de la cervecería Letna o las escaleras mecánicas del metro, que crean un efecto de viento en los túneles de las estaciones. En los días más largos del verano no anochece hasta las 22:00 horas. ¡Largos e interesantes días en la capital checa!
(Fuente: GowithOh)