Un enterramiento «extraordinario desde un punto de vista emocional». Así califica Eduardo Vijande Vila, director de la actividad arqueológica urgente de Campo de Hockey de San Fernando (Cádiz), el hallazgo en el interior del cementerio de un poblado neolítico. La rareza estriba en que los dos individuos que han aparecido en la fosa simple se encuentran frente a frente y con los miembros inferiores y superiores entrelazados. Éste es el motivo por el que se conoce popularmente como el de «los enamorados» y constituye uno de los pocos casos de «abrazo» conocidos, junto al de los «amantes de Valardo», descubierto en la localidad italiana de Mantua en 2007.
Las últimas investigaciones realizadas señalan que este enterramiento tiene una datación absoluta de unos seis mil años. El estudio antropológico preliminar, realizado in situ por la antropóloga Mila Macías, revela que el individuo depositado a la derecha corresponde a un adulto con una edad dental estimada entre 35-40 años, cuyo sexo está pendiente de confirmar a través del estudio antropomórfico y antropométrico, mientras que el de la izquierda corresponde a una niña de unos 12 años. «No hay duda acerca de la intencionalidad por parte de los que efectuaron el enterramiento de que hubiese contacto físico entre ambos individuos, debido a que debió existir entre ellos un fuerte vínculo afectivo», asevera Eduardo Vijande.
Las hipótesis acerca de cuál es el origen de ese vínculo son muchas. Podrían ser familia o ser efectivamente una pareja («en muchas tribus actuales con una edad similar —12, 14 años— ya se considera una mujer», aclara el director de la actividad arqueológica). El rastro de ADN podría aportar luz en este sentido. A pesar de que las analíticas son caras y complicadas con esta cronología, el hecho es que la datación que se acaba de realizar se ha efectuado sobre colágeno de uno de los individuos, precisamente de donde se extrae el ADN, por lo que «puede haber cantidad suficiente para realizar un estudio», indica este especialista.
«No hay duda acerca de la intencionalidad por parte de los que efectuaron el enterramiento de que hubiese contacto físico entre ambos individuos»
La extracción de este enterramiento fue realizada en bloque por restauradores con el fin de evitar su separación y contribuir a su conservación. Se prevé que su exposición en el Museo Histórico Municipal de San Fernando sea una realidad durante este año, aunque están pendientes de la última fase de restauración y de las obras en la sala de prehistoria que está llevando a cabo el recinto.
Futuras investigacionesEduardo Vijande afirma que se trata de un enterramiento excepcional desde el punto de vista emotivo, pero que lo realmente interesante desde la óptica científica es el hallazgo de la «espectacular» necrópolis. Tanto por sus dimensiones (pudo llegar a tener 300 enterramientos), como por el estado de conservación de los restos como por la diversidad de estructuras de enterramiento localizadas. En este sentido, los protagonistas de este abrazo forman parte de una estructura circular de unos dos metros de diámetro. «El espacio principal, caracterizado por una mayor monumentalidad, acoge a dos individuos. A su derecha se encuentran esta fosa junto a otras de adultos. A la izquierda 19 niños, cuyas edades oscilaban entre uno y siete años», aclara el director de la actividad arqueológica.
Despues de su datación, Eduardo Vijande señala que lo siguiente es el estudio antropológico, también la paleodieta, las enfermedades... Y las desigualdades sociales, ya presentes en el periodo neolítico. Las grandes tumbas acompañadas de ajuares coexisten con otras de estructura mucho más sencilla.