Ilustración Yuri Kuznetsov.-Renée Vivien-En el azur de abril, en el gris del otoño,los árboles poseen una gracia inquietante.El álamo en el viento se retuerce y se pliegacual cuerpos de mujer trémulos de deseo.Su gracia es un desmayo de carne abandonaday murmura su fronda, al soñar se estremece,se inclina, enamorada de las rosas del Este.Lleva el olmo en su frente una corona pálida.Revestido de claro de luna plateado,el abedul deshila su cambiante marfily plasma palideces en las sombras inciertas.El tilo huele a ásperas y oscuras cabelleras.Y desde las acacias de lejana verduadivinamente cae la nieve del perfume.