Los argentinos, ¿tenemos patria?

Publicado el 25 mayo 2015 por Cronicas De Riddick @RIDDICK_DARO


La puesta en escena de un espectáculo con luces coloridas, fuegos de artificio, canto y baile, solo cumple un propósito efímero: distraer al soberano por un momento, de los principales problemas acuciantes de su vida cotidiana. Aun así, el Kirchenerismo en su último festejo de semana de Mayo, pone toda la carne al asador, para demostrar que todavía ejerce el poder y que pretende seguir gobernando el país, más allá del 10 de diciembre de 2015.

Depende por donde se lo mire. Si observáramos lo que está ocurriendo hoy en nuestra amada Argentina, la frase impuesta por este gobierno –Tenemos Patria- hace agua por donde se la analice.  Según el diccionario de la real academia española, Patria significa “Tierra natal o adoptiva ordenada como nación, a la que se siente ligado el ser humano por vínculos jurídicos, históricos y afectivos”. Hasta allí podríamos decir que desde lo teórico, cumple con los requisitos convencionales que desde nuestra niñez, nos fuimos educando bajo esos preceptos. Ahora bien, en lo practico no sucede exactamente así, ya que dado a las graves falencias que padecemos en materia institucional, nos encontramos que el estado no existe donde debería estar. Y un estado ausente, vulnera la soberanía de un pueblo. En gobiernos como el actual, el significado Patria suele estar unido a connotaciones políticas o ideológicas, y por ello es objeto de diversas interpretaciones, así como de uso propagandístico que pretende mostrar la gran obra de un gobierno, como lo pretende hacer éste. Claro que si todo el esfuerzo y la dedicación que se dice que han puesto, estuviese volcado íntegramente al desarrollo y el bienestar de nuestra población, hoy estaríamos celebrando los doscientos cinco años de historia con orgullo y verdadero patriotismo.Pero las cosas no están bien para estar de festejos, y mucho menos, cuando se pretende distraer a la gente, con obras faraónicas totalmente innecesarias, como el centro cultural recientemente inaugurado. Y para peor no tuvieron mejor idea que ponerle Néstor Kirchner! A veces pienso que ser idiota en esa patria que ellos inventaron, ofrece muchas más ventajas que vivir en la real. Por ejemplo, en “su patria” todo funciona de maravillas como los trenes, los aviones, los colectivos, la electricidad, el mercado bursátil, la salud, la educación, y por sobre todas las cosas, la seguridad. Si señor!, en la patria K nadie se muere de hambre, ni es víctima de un asalto. La policía no necesita patrullar las calles ni tener presencia en los hospitales. Eso sí, tienen que cubrir los estadios de fútbol porque se trata de un evento social y cultural, para “acompañar” a las barras que se aprestan a disfrutar de un espectáculo único y civilizado. En cambio el que pretende ir a un estadio con su familia, lo tendrá que dejar para otro momento. Tendrá que verlo desde su casa. Para eso se inventó el Fútbol Para Todos. Pero deberá armarse de paciencia cuando le metan los banners de publicidad oficial en la pantalla, refregándole lo logros obtenidos en “la década ganada”.Pretender decir que “Tenemos Patria” porque tuvimos en estos doce años de Kirchnerato un viento de cola que ya no sopla, es un insulto a la memoria de nuestros próceres, que fueron los que le dieron origen a nuestra verdadera Patria.La palabra patria en nuestra historia reciente, ha sido utilizada tanto por gobiernos militares como civiles, con la mera intención de generar un sentimiento de profundo nacionalismo por los valores y costumbres de nuestra cultura rioplatense. El manipuleo de las palabras con medios hábiles, a veces arteros, en la política, con distorsión de la verdad o la justicia, y puestos al servicio de intereses sectarios, ha sido el común denominador de muchas administraciones  gubernamentales de corte populista. Así se recurre al fervor pasional de los argentinos, invocando los valores nacionales como son la familia, la casa, el trabajo, la escuela, la religión, la patria y porque no, el fútbol. Son en estos días donde la mayoría de los ciudadanos argentinos nos ponemos sentimentales, eufóricos, nostálgicos,  por miles de cuestiones que no necesariamente tienen que ver con el evento histórico en sí mismo. Porque todo lo que vemos a nuestro alrededor no es más que una puesta en escena, para distraer nuestra atención de las cosas que todavía faltan hacer, para que uno se sienta orgulloso de vivir en esta Patria Argentina. La deuda que han dejado estos gobiernos, en especial este que se va, es E-N-O-R-M-E. Solo se podrá apreciar su dimensión, cuando el próximo presidente que asuma, logre desovillar esta compleja madeja y desactivar las bombas plantadas en este campo minado llamado “modelo”, siempre y cuando pueda, o le permitan hacerlo.Primero Perón y Evita. Luego, los Kirchner: El matrimonio diabólico, que intento emular las acciones del gobierno peronista, procurando igualarlo o superarlo. El viento de cola de los primero años, hizo posible ese sueño. Solo que el despilfarro de los dineros públicos de la década ganada de este gobierno, fueron a parar a los bolsillos de sus funcionarios y amigos del poder.

Durante la mañana del 25 de mayo, una gran multitud comenzó a reunirse en la Plaza Mayor, actual Plaza de Mayo, liderados por los milicianos de Domingo French y Antonio Beruti. Se reclamaba la anulación de la resolución del día anterior, la renuncia definitiva del virrey Cisneros y la formación de otra Junta de gobierno. El historiador Bartolomé Mitre afirmó que French y Beruti repartían escarapelas celestes y blancas entre los concurrentes; historiadores posteriores ponen en duda dicha afirmación, pero sí consideran factible que se hayan repartido distintivos entre los revolucionarios. Ante las demoras en emitirse una resolución, la gente comenzó a agitarse, reclamando: "¡El pueblo quiere saber de qué se trata!"Tras la finalización del Cabildo abierto se colocaron avisos en diversos puntos de la ciudad que informaban de la creación de la Junta y la convocatoria a diputados de las provincias, y llamaba a abstenerse de intentar acciones contrarias al orden público.Pretender decir que “tenemos patria” porque tuvimos en estos doce años de Kirchnerato un viento de cola que ya no sopla, es un insulto a la memoria de nuestros próceres, que fueron los que le dieron origen a nuestra verdadera Patria, y que para lograrlo no tuvieron que robar, estafar, sobornar, corromper, mentir, humillar e incluso, entregar la soberanía de nuestros recursos naturales, como lo hicieron este y otros gobiernos que lo precedieron. “La Patria es el otro”, otra estafa moral que nos duele al ver como la pobreza e indigencia que “ellos” ocultan, crece día a día, desnudando otra mentira más del kirchnerismo. Tener Patria es primero tener saldada la deuda interna socio-económica; ordenadas las cuentas públicas; saber honrar a nuestros abuelos con jubilaciones DIGNAS, tener satisfecha la demanda salarial, de vivienda, de salud y de educación de los trabajadores; saber interpretar hacia dónde va el mundo y con él, marchar a la par para lograr el progreso y desarrollo de todos los argentinos, por igual. El día que algún gobierno interprete esto como el tema principal de su gestión y nosotros nos encarguemos de hacérselo cumplir a rajatabla, que demandemos a nuestros gobernantes acciones concretas que erradiquen la pobreza, la indigencia, la inseguridad, la falta de educación, que asuman el compromiso formal de llevar a cabo 5 o 6 puntos básicos sobre el desarrollo de políticas de estado, que trasciendan sus propias administraciones y sean continuadas por otros gobiernos, que ello nos coloque en el concierto de las naciones desarrolladas, que permitan convertirnos en una nación seria y respetuosa de sus leyes…, ese día tal vez, los argentinos nos merezcamos Tener Patria.