En este caso, un estudio demuestra que los bebés que toman pescado antes de los 9 meses de edad tendrán menos riesgo de tener sibilancias en la edad preescolar. Este estudio realizado en Suecia indica que los bebés que consumen pescado antes de esta edad presentan menos riesgos de padecer sibilancias en edad preescolar, cosa que puede ser distinta si se ha tratado con algún antibiótico genérico en su primera semana de vida o si la madre ha tomado paracetamol en la gestación.
El propósito del estudio era identificar los factores de riesgo para conseguir un tratamiento más eficaz para la sibilancia transitoria que se produce en niños en edad preescolar. Por ello estudiaron a niños que habían padecido sibilancia en el último año y los que no la habían padecido.
Los niños que han consumido pescado antes de los 9 meses de vida tenían un 50% de probabilidades de tener sibilancias transitorias a los 4,5 años. De manera que el consumo de pescado reduce las posibilidades de esta molestia en niños.
Los pescados más beneficiosos para ello son: el pescado blanco, el salmón y el pescado plano. Además, hay que tener en cuenta que el pescado forma parte de una dieta nutritiva, y a los bebés a los que se les de pescado se les dará algo bueno. Se le puede picar el pescado o hacer un preparado especial que les ayude a consumirlo.