Ejercicio y embarazo.
Es obvio, que durante el embarazo, nos vendrá bien hacer una serie de ejercicios. Aunque durante estas fechas, no todos los deportes serán buenos para nosotras. Primero conoce tus limitaciones. Y si nunca has levantado pesas, no cojas las más grandes. Siempre que vayas a comenzar a hacer un deporte nuevo, deberás consultarlo con tu médico. Quien será el que esté en mejor posición para saber si te puede perjudicar. Tómatelo con calma y no te guies por las experiencias de otras madres. Tu eres única y tu situación, también lo es.
Los beneficios.
Una vida saludable por lo general, suele tener beneficios físicos para los que la practican. Pero el deporte, siempre se ha asociado a una serie de beneficios, que ya presenta aunque no se esté embarazada. Y que se amplían cuando es el caso. Veamos punto por punto los beneficios más destacados en la embarazada.
- A nivel mental: Una de las mayores virtudes que tiene el ejercicio físico, es la segregación de las endorfinas. Lo que nos permite ser más felices y estar más centrados. Aunque no es la única hormona que segregaremos. Todas estas hormonas, nos serán muy útiles. De hecho, el deporte está considerado, que puede hacer el efecto de un ansiolitico o tranquilizante. Es uno de los antidepresivos más fuertes de la naturaleza.
- Al mejorar nuestro estado general, tanto de estética, como de aguante. Nos sentiremos mejor con nosotras mismas. Además de sentir más vitalidad. Y para una época como es el embarazo. Esto es un alivio. Con lo que nosotras nos veremos más guapas y también nos subirá el ego.
- Es una eliminación de tensión. Después de hacer la actividad, nos sentiremos relajadas y aunque cansadas, satisfechas. Como si nos hubiéramos quitado un peso de encima.
- Es ideal para prevenir enfermedades, tales como los catarros…
- El aumento en la musculatura y la flexibilidad, hacen que el parto sea más fácil de llevar. Además de aguantar el día a día con más energía.
- Uno de los puntos que más sufren durante el embarazo. Es la espalda. Debemos ejercitar los músculos, para aliviar su carga y que no sufra más de lo que debe. Esto hará que no nos duela tanto y que podemos estar más tiempo de pie, si lo necesitamos.
- A las mujeres a la larga, siempre nos pasa factura las articulaciones. Y es durante el embarazo, cuando se produce un gran desgaste en las mismas. El ejercicio continuado, hace que las articulaciones se hagan más fuertes y aguanten más.
- El aumento del bombeo de sangre en el cuerpo. Además, afecta limpiando nuestro cuerpo y ayudando a evitar las molestias en los tobillos, varices, celulitis…
- Seguro que si hemos realizado ejercicio a lo largo del embarazo. Cuando haya nacido nuestro pequeñin. Volveremos a recuperar la figura que teníamos en un par de meses. Ya que no habremos perdido el hábito por el ejercicio físico y el deporte.