Los bizcochos y las mujeres

Por Siempreenmedio @Siempreblog

Respiro profundamente, cojo aire, no quiero dejarme llevar por la impotencia y la ira, y poner las cuatro burradas de turno que me desprestigiarían por demagogo, falto de argumentos. Pero es que desde el domingo, vivo sin vivir en mí.

Y vivo sin vivir en mí porque, aunque hoy en día es difícil sorprenderse, aún hay quien lo consigue. Según la revista cómica que ya le hace la competencia a El Jueves, los autónomos podemos dedicarnos al cine, tener tablets, ordenadores portátiles, y construir cosas, no sabemos el qué, pero construir. Aunque ojo, las autónomas, pueden hacer bizcochos. ¡Bizcochos! Bueno, digo bizcocho para no decir queques y que el subnormal de Artur Mas diga que no nos entiende. ¡Ah! pero si te montas un negociete de repostería, el señor Rajoy te hace un descuento de 3000 euros si contratas a una chica (mujeres, siempre mujeres en la cocina) que te ayude con el negocio. Que con lo que te va a quedar, le vas a dar una nómina de 150 euros.

Considero que este tipo de afirmaciones extraplanetarias son propias del maravilloso partido PPSOE, del que somos literalmente rehenes, pero la verdad es que esta portada casposa sólo es obra del PP. Y de La Razón, ese panfleto que indignamente llaman periódico. Y siento mucho respeto por los que trabajan en él, que nos digan a los periodistas que los ideales y la moral pagan facturas, pero la morralla que dirige el cotarro debería estar en una celda de 3×3. Porque hoy en día, más que nunca, hay que respetar unos principios básicos en esta profesión: dignidad.

Sí, necesitamos una revisión y una autocrítica en los medios. Me jode darle la razón a más de uno que yo me se, pero en este caso la tienen.