Los Castillos de Diana - Artículos - Gamberrada literaria
Publicado el 26 enero 2011 por Eltiramilla
Muchos de los que me estáis leyendo seguramente tenéis esa manía de ordenar los libros por sagas: me parece lo más lógico, ya que suelen tener el mismo tamaño, y el hecho de ver esos tomos juntos resulta armónico y hasta produce un estado de éxtasis en mentes retorcidas como la mía. Pero, ¿y si los libros de esa serie fueran de diferente tamaño porque han sido publicados por distintas editoriales? ¿A que sería una gamberrada literaria en toda regla?
Os contaré una historia que se remonta al año 2006, cuando llegó a los cines una maravillosa película de Hayao Miyazaki (La princesa Mononoke, El viaje de Chihiro) titulada El Castillo Ambulante. El filme fue todo un éxito, además de la mejor manera de hacer llegar al público la novela en la que se había basado, la primera de la trilogía de corte fantástico The Castle Series, de Diana Wynne Jones: El Castillo Ambulante. Un año después del boom cinematográfico, el primer libro de la serie llegó a las librerías españolas de la mano de Berenice, que rápidamente se hizo también con su continuación, El castillo en el aire. Sin embargo, por alguna razón que se escapa a mis conocimientos, no compró los derechos de la última parte de la trilogía, La casa de los mil pasillos, y aprovechando la situación, la editorial Nocturna se hizo con la obra.
Aparentemente no hay ningún problema, ya que contamos con la trilogía al completo en español y además con unas ediciones bastante aceptables, salvando alguna que otra falta de ortografía. El Castillo Ambulante luce una tapa dura con sobrecubierta y un curioso formato de bolsillo, al igual que su segunda parte, siguiendo la línea editorial; pero es ahí cuando llega el verdadero problema, porque el último volumen es totalmente diferente al resto en cuanto a la edición (prefiere tapa blanda y dimensiones normales). Por supuesto, resulta totalmente comprensible al tratarse de una editorial diferente, pero compartiréis conmigo la opinión de que esto es lo peor que puede ocurrirle a cualquier saga.
Mis razones para afirmar que es una gamberrada literaria que los libros de una misma serie sean editados por diferentes editoriales son diversas. Primero que nada está la cuestión estética: es lamentable echar un vistazo a la estantería, fijar los ojos en la saga en cuestión y advertir que no desprende armonía física; nadie diría que los libros guardan relación. Y es ahí donde nace mi segundo punto: si nadie sabe de antemano que El Castillo Ambulante forma parte de una trilogía, menos pensará que La casa de los mil pasillos pertenece a un universo común, dado que posee un formato diferente a los dos primeros libros de la serie y un título que esta vez no contiene la palabra “castillo”. ¿Qué le pasará entonces al lector despistado? Que leerá los libros por separado y en desorden, sin disfrutar del conjunto de una historia magnífica.
Lo único que pediría a todas las editoriales en general es que si se embarcan en una saga, se comprometan a publicar todas sus partes para evitar confusiones y, por supuesto, evitarnos a nosotros, los maniáticos del orden, futuros dolores de cabeza con esas ediciones tan dispares en nuestras colecciones favoritas.