¿Cómo llegar a los cayos?
En coche. Es una única carretera con uno o dos carriles por sentido, dependiendo del tramo. Hay que tomárselo con paciencia, los límites de velocidad son inferiores a los de España y además es complicado adelantar. Vas pasando por los distintos cayos y puedes ir haciendo paraditas.
¿Cuánto tiempo dedicar a los cayos?
Recomendamos mínimo 2 días, mejor 3. El trayecto completo desde Miami hasta Key West puede durar entre 3 y 4 horas. Esto unido a la necesidad de ir parando por el camino, hace prácticamente inviable hacerlo solo en un día.
Nosotros lo dividimos en dos partes. Un día fuimos y volvimos desde Miami a Key Largo (1,5h de duración) para hacer buceo y luego otro fuimos hasta Key West, dormimos allí y volvimos al día siguiente. Este mismo recorrido podría hacerse del tirón, durmiendo un día por el camino en cualquiera de los cayos y otro más en Key West.
La carretera no es especialmente bonita hasta llegar al puente de las 7 millas. Hay casitas y negocios a los lados. Para ver la preciosidad de la zona hay que meterse en la zona de parques naturales (cobran para acceder), o en los resorts, espléndidos en general. Merece la pena tomar algo o hacer una parada a comer, y de ese modo, se disfrutan.
Al inicio hay un punto turístico: pide un mapa en el que te explique donde hay parques naturales, zonas de parada… te resultará útil!
¿Qué actividades hacer en los cayos?
– Bucear en Key Largo
– Ver el atardecer en Isla Morada
– Parar en Anne’s Beach en Isla Morada
– Parar en el puente de la siete millas de Marathon
– Ir a la playa en Bahia Honda State Park and Beach
– Key West
- Bucear en Key Largo. A lo largo de todos los cayos hay muchas empresas que ofrecen buceo. Nosotros lo hicimos en Key Largo porque era el día que volvíamos a dormir a Miami y era lo más cercano. Además también hay varias barreras de coral por la zona que merecen la pena. Existen varios trayectos de distinta duración dependiendo del número de bajadas, donde se ven las barreras de coral y multitud de peces de colores. Yo puedo deciros que he estado en Tailandia y no vi tanta variedad y tan claro como aquí. Nuestra elección fue John Pennekamp Coral Reef State Park con su trayecto largo. Hicimos dos paradas: una para ver una barrera de coral donde había zonas que la tenías a prácticamente un metro de profundidad, y otra para ver a una de las réplicas del Cristo del Abismo, representando a Jesús con los brazos extendidos. La original se encuentra sumergida cerca de la playa de San Fruttuoso, en la Riviera Italiana.
- Ver el atardecer en Isla Morada. Antes de volver a Miami hicimos una última parada en un barecito de Isla Morada. Hay varios seguidos con terracitas que dan al mar, a cual más bonita. Podéis cenar en hora americana ya que estáis por allí y tenéis sitios tan monos para hacerlo o simplemente tomaros una cervecita y disfrutar del paisaje. Es precioso, totalmente recomendable.
Pasado Isla Morada, se encuentra Islander Bysea, una de las urbanizaciones desde la que se puede acceder al mar . Muy mona, con casitas preciosas de colores.
- Parar en Anne’s Beach en Isla Morada. Esta parada ya la hicimos la segunda vez que emprendimos el camino hacia Key West. No es una playa espectacular pero tenía su encanto. Tiene muchas zonas para picnic en casitas de madera. Eso sí, al ser una de las pocas zonas gratuitas, tiene muy poco aparcamiento.
- Parar en el puente de la siete millas de Marathon. Antiguamente existía un tren que recorría toda la carretera de Miami a Key West, pero un huracán destrozó las vías en 1985, dejando a muchas localidades incomunicadas. Hoy aún pueden verse restos de estas vías. En Marathon puede observarse el puente de las siete millas, que era el tramo más largo que unía dos cayos distintos.
- Ir a la playa en Bahia Honda State Park and Beach. No hay muchas playas que visitar en los cayos. Son todas muy estrechitas y repletas de vegetación, por lo que no esperéis arenas blancas y amplias playas. Pero sí hay una que merece la pena. Se encuentra poco después de pasar las vías de Marathon viniendo de Miami o justo antes, si ya estáis volviendo de Key West. Desde esta playa pueden verse también restos de otras vías de tren. Es un parque protegido por lo que habrá que pagar para entrar dependiendo del número de ocupantes por vehículo. Creo recordar que eran $ 9 por dos personas. La arena es blanca y las aguas completamente turquesa. Merece la pena parar un buen rato a tomar el sol y pasear por las distintas playas del parque.
- Key West. Es el último de todos los cayos y también el más habitado y el más bonito en lo que a arquitectura se refiere. Son casas muy coloniales y rodeadas de flores. Se encuentra a tan solo 90 millas de la Habana, que se puede ver desde el punto más al sur de la parte continental de los EEUU. A nosotros nos coincidió con Springbreak y había mucho ambiente, sobre todo por la noche. Los bares se llenaron de universitarios con ganas de emborracharse! Merece la pena ver el atardecer desde el puerto, uno de los más bonitos que he visto (rojo, rojo) y sobre todo pasear. Se puede subir al faro y también entrar en la casa de Hemingway, aunque nosotros preferimos simplemente pasear.
De vuelta, todavía puedes parar en dos resorts bonitos: Cheeka Lodge (82 mile) y Caribean Lodge (pegado al anterior, se pasa directamente).
Hoteles recomendados: Courtney’s Place en Key West. El alojamiento es bastante caro, pero estas casitas de distintos tamaños eran de lo mejorcito que encontramos. Tenían una mini piscina y alrededor un desayuno muy agradable.