Siria sigue perpetuando su poder sobre la política libanesa mientras que el número de refugiados en la antigua Fenicia sigue aumentando.
En las calles de Beirut, a menudo se divisan todoterrenos circulando en hilera y a la misma velocidad. Los libaneses les señalan reconociéndoles como la policía secreta siria. Atrás queda la Revolución de los Cedros de 2005 para frenar el dominio sirio sobre el gobierno libanés, donde los manifestantes lograron la retirada del ejército sobre suelo fenicio.
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Desde el inicio de la Primavera Árabe, Bashar Al Assad, ha vuelto a hacer otro uso del Tratado de Hermandad, Cooperación y Coordinación establecido tras la Guerra Civil que implica la prohibición de cualquier actividad u organización libanesa que pueda amenazar a Siria.
Bajo la confección de un Estado basado en la división de prosirios y antisirios de los bloques políticos del gobierno en 8 de marzo y 14 de marzo, los libaneses a favor de las demandas de Siria están organizados bajo el liderazgo de Hassan Nasrallah, líder de Hezbollah, donde el régimen sirio opta por el control del Parlamento por una vía cuasi diplomática…. [Publicado en: ABC.es]