Como todos los años, hago una entrada quejándome del gasto, a mi juicio irresponsable, innecesario e indecente, para celebrar el Día de las Fuerzas Armadas. Aunque es el próximo domingo, los fastos, incluida la costosísima campaña del Ministerio de Defensa, ya han comenzado.
Entiendo que algunas asociaciones, como la Red Antimilitarista y Noviolenta de Andalucía haya sacado un comunicado manifestando su disconformidad con estos actos, máxime en momentos en que la sociedad está padeciendo los efectos de una gravísima crisis económica. En Andalucía, la tasa de paro roza el 30%. La segunda tasa de desempleo del país más alta, después de Canarias.
El gasto militar, según algunas fuentes, aunque es dato bastante oscuro, se cifra en 18.000 millones de euros para 2011.
En fin, estamos como siempre ante un ejercicio de propaganda de guerra con el que se pretende acreditar nuestras acciones militares, para mí injustificadas y rechazables, en países como Irak, Afganistán, ahora Libia...
Haremos el número completo con la típica demostración de fuerza de un Gobierno que, a pesar de su comienzo, saliendo de Irak, ha tomado un rumbo militarista importante. Con la OTAN participamos en guerras internacionales de dudosísima legitimidad, nos implicamos en vuelos secretos de la CIA y dedicamos una cantidad indecente para inversión en nuevas armas.
Com apunta la Red Antimilitarista sería bueno que se trabajase más en la cooperación internacional, en políticas de desarme colectivo y en la educación para la paz.
Desde aquí y como todos los años, manifiesto mi rechazo absoluto a estos eventos y a estos irresponsables gastos.
¡A quién corresponda!