Sin embargo, fuera de esa vida, sigue siendo un adolescente que vive en una casa que lleva años pareciendo un funeral continuo tras la muerte por sorpresa de su hermana mayor Sera. Su madre está sumida en una depresión de la que no logra salir y su padre se limita a vivir día a día sin que nada parezca importarle. El mismo Ethan, desde entonces, sufre de pesadillas regulares que giran alrededor de la muerte de Sera y un monstruo deforme.
Ese día, cuando sale de casa después de haber tenido otra de esas horribles pesadillas, su mentor en los guardianes, Arkarian, quien tiene siglos de edad a pesar de que su aspecto es el de un joven de 18 años, le da una buena noticia: le van a ascender. Sus alas están más cerca que nunca pero antes deberá tutelar a una aprendiza y que ésta supere su primera misión con éxito. Aunque al principio su nombre no le suena, acaba cayendo en que se trata de Isabel, la hermana de Matt, quien fue su mejor amigo hasta que se echó novia, Rochelle.
Isabel estuvo enamorada de Ethan cuando era niña. Siempre quería acompañarlos en sus excursiones y aventuras, pero la desdeñaban por ser una chica. Cuando Matt y él dejaron de ser amigos, le perdió la pista y sus sentimientos se acabaron desvaneciendo. Ahora es una joven a la que su deseo de aventura la ha llevado a practicar toda clase de deportes y actividades. Lo que para ella será una sorpresa es curarse a sí misma un feo corte en el dedo sólo con desearlo. Sin saberlo, eso será lo que le abra las puertas a un mundo maravilloso... y a reencontrarse con Ethan.ReseñaÉsta sería mi segunda lectura del libro después de aquella que le di hace años a la edición de Círculo de Lectores. Con todo el tiempo que ha pasado, lo cierto es que no recordaba NADA de la historia aparte de saber que trataba de viajes en el tiempo. Siendo así, esta lectura no está empañada por el halo de la nostalgia que probablemente tuviese con El círculo de fuego, así que supongo que aquí seré más objetiva.
Si habéis leído El círculo de fuego, encontraréis grandes paralelismo con esta historia. Para empezar en su formato, pues se divide en capítulos narrados por Ethan y capítulos narrados por Isabel, lo que permite tener los dos puntos de vista principales. Lo malo es que las voces no son distinguibles y no se percibe diferencias entre cuando habla uno o la otra.
Otro punto en que coinciden ambas historias es en el tema de los viajes en el tiempo, aquí con otro planteamiento diferente y mucho más complejo. Esta temática siempre es delicada y genera muchos problemas. La forma en que la autora les hace viajar es sacando sus almas de los cuerpos mientras duermen de modo que los cuerpos quedan en lo que parece un estado comatoso mientras sus esencias viajan. Además, para justificar que eso rara vez dé problemas, hace que la escala de tiempo varíe y apenas un minuto dormidos pueda equivaler a horas en el pasado. Luego se saca de la manga un par de reglas y trucos adicionales y más o menos tiene coherencia. Aún así, se le ven lagunas como que los guardianes sólo puedan viajar a un momento y lugar una vez. Sí que resulta positivo que los saltos temporales sean a momentos en que vemos a personajes históricos que no son de los más conocidos y da ganas de conocer un poco más de esas épocas que ven.
Quizás el punto más interesante que tiene es el de la componente romántica porque no tiene el desarrollo que cabría esperar. Por parte de Ethan, Isabel siempre fue "la hermanita de Matt" y aún guarda sentimientos por Rochelle, parte de la causa de la ruptura entre ambos chicos. Durante este libro, la valora cada vez más pero no llega a ver en ella más que una buena amiga. Y en cuanto a ella, el reencuentro con Ethan vuelve a despertar sentimientos dormidos, pero parece que ya no tienen esa intensidad de antes e incluso nacen en ella sentimientos por otra persona. Supongo que esto cambiará en los siguientes libros, no nos engañemos, es lo previsible, pero de momento me parece muy acertado que quiera plantear un desarrollo lento de la pareja.
Por desgracia, al margen de esta componente romántica, los personajes me han parecido un tanto planos y anodinos. No tienen lo que se podría decir un gran desarrollo y las relaciones con otros personajes secundarios dejan bastante que desear. Salvo algún momento puntual, me ha faltado sentir algo por ellos, sus problemas o dilemas.
Debo decir también que la escritura de la autora deja bastante que desear. El uso del tiempo presente y algunas expresiones o la forma en que hablan los personajes... No sé, no me convence. Y quizás sea por la nostalgia, pero no recuerdo este problema en su anterior obra. Aquí es como si le faltase el pulido de una buena editora.
En definitiva, una historia entretenida, con muy buenos elementos para funcionar pero que no me ha terminado de convencer todo lo que me habría gustado. Quizás es que es demasiado introductorio, pero se percibe un potencial enorme que no terminó de explotar. Habrá que ver cómo se desarrolla la trama en los siguientes. Espero que leyéndolos con las expectativas más bajas, me gusten algo más.