Autor: Martha Molina
Páginas: 371
Sinopsis: Luego de la muerte de su padre, y tras recibir una pequeña herencia, Allison Owens decide marcharse de la populosa Nueva York, hasta el apacible pueblo balneario de Isla Esmeralda, en Carolina del Norte. Al llegar, y desde la primera noche, experimenta extraños sucesos fantasmales que la atormentarán constantemente. Su vida cambiará con brusquedad por culpa de un juramento realizado en el pasado, sellando su destino para siempre.
El tiempo se encargará de ponerla en una encrucijada cuando conoce el amor de dos hombres que llegan a su vida sin previo aviso. El enigmático y seductor, David Colbert, y el romántico e impulsivo, Donovan Baldassari. Lo que ella no sabe, es que ambos jóvenes transitan por la senda entre el bien y el mal, sin contar que uno de ellos carga con una maldición que lo sentenció, a él y a los suyos, a una existencia sangrienta, tormentosa y de eterna oscuridad.
Este libro lo leí gracias a que su autora organizó una lectura conjunta en su blog (aquí) pudiendo participar quien quisiera (con o sin blog), y como soy una amante de los libros paranormales no dudé cuando decidí participar.
Mentiría si dijera que el libro no me ha gustado, pues si lo ha hecho y mucho sólo que no ha terminado de enganchar, aunque si quiero seguir leyendo la saga. Pero creo que la culpable de esto es la protagonista, Allison. Me ha recordado a Bella de Crepúsculo, pues se siente como una mierda (con perdón) si no está con su amado. Vamos que no se siente nadie si no está con David, y es lo que no me ha gustado.
La historia trata sobre una joven que perdió a su madre cuando era chica y ahora pierde a su padre, la madrastra le ha echado de casa pero se va a vivir a la casa que ha heredado de su padre con su tía Matilde, allí conocerá a Donovan y a David, pero las apariencias engañan. Ambos esconden algunos secretos.
En ese sentido la trama está bastante bien, obviando el tópico del triángulo amoroso. No es que me haya tenido en vilo con ganas de saber que es lo que acontecería, pero si que he disfrutado con el libro.
Lo veo más bien como un libro entretenido, que aunque me parece muy bonito porque pese a los impedimentos Allison sigue enamorada del ser que todos los de su alrededor odian o desprecian.
La verdad que decir que ningún personaje me han transmitido nada. Allison, como he dicho, es la típica chica que se siente miserable si no tiene a su amado y vive por y para él (algo que odio). Donovan sigo sin saber como me cae. Hay momentos que me saca de quicio porque no acepta las decisiones de ella, pero en otras me da algo de pena.De David poco que decir, no me ha terminado de convencer, al igual que Burn o Matilde, aunque esta última había momento que no la tragaba porque prefiere que su sobrina sufra (que no esté con su amado) que ser feliz con él. Sé que se preocupa por ella, pero es que de errores se aprende.
Y poco más que decir del libro.
Gracias por leerme.Besos ^^