El blog que viste y calza, es este que cuenta las aventuras y desventuras de una familia atipica, que sublima la intolerancia; que a veces depara lo agrio; en el hogar dulce hogar.Se me otorga la palabra a mí ,la hermana mayor que jura por los siete tomos de crónicas vampiricas decir toda la verdad, nada mas que la verdad;si no fuese así, que mi mamá, mi hermano menor y el gato (todos componentes del grupo familiar) me lo demanden .Yo, la hermana mayor vengo a decirles: que hay cosas que no son justas, que el pequeño (dedo índice acusador señalando al hemanor menor) no tiene derecho a probar la resistencia de los materiales rompiendo los vasos de la casa, además de la paciencia de todo los miembros de la casa incluyendo al gato.
Acotación pertinente de la presidenta de este honorable tribunal: se llega a instancias en nombre de la convivencia y por el bien de la última docena de vasos que comprò la amiga de mi madre, cansada de brindar con tazas de plástico con el afán de vencer al hasta ahora invicto rompedor de vasos que cuenta en su ránking con más de dos docenas de destrozados vidrios. No hubo vaso en la vida que resistiera; a igual récord llegaron los platos hondos y los playos y las tazas… Es decir, toda la vajilla del hogar.
En mi carácter de hermana mayor, elevo al juzgado sin animocidad alguna contra mi hermano el acusado la lista de roturas totales para preservar la última donación de la amiga de mi madre a saber: VASOS-PLATOS-ENSALADERA. Está última de plástico, pero que igualmente corre los riesgos de actuar como casco protector sobre el cuero cabelludo de mi hermano en sus imaginarias y bestiales luchas intergalácticas. A continuación la ira de mamá no repara en democracias o culpables…
Concluyo: Mamá mira a mi hermano, me mira con sus grandes y desorbitados ojos inyectados en sangre y… Socorooooooooooooooooooooooo!!!!!!…
Tengo vajilla nueva en casa. Y ahora?, quien podrá ayudarme?.
Se levanta la sesión.