Almudena Grandes, escritora madrileña nacida en 1960 y muerta en el 2021, guionista, periodista y novelista, autora de “Las edades de Lulú”, “El corazón helado”, “Te llamaré Viernes” o “Malena es un nombre de tango”, entre otras obras, declaró en cierta ocasión en una entrevista: “Mis lectores son mi libertad. Mientras ellos estén ahí, seguiré escribiendo los libros que creo que tengo que escribir en lugar de los libros que otros creen que tengo que escribir. Sin embargo, cuando escribo, escribo para emocionarme a mí; para convencer a la lectora que yo soy (la más crítica de todas); para emocionarles a ellos; para devolverles, de alguna manera, todo lo que ellos me han dado, porque son mi piel de por vida”.
Ella fue, igualmente, autora de estas frase con la que me identifico: “Yo he aprendido muchas más cosas en los libros que en la vida, y he sido feliz, desgraciada, y me he reído, y he llorado, y me he asustado, y me he emocionado, y me he enamorado, y me he desenamorado muchas veces más, porque los libros viven, laten, palpitan con su propio corazón”.