Los masones a la hoguera: La corona, la sotana y el resucitado martillo de las brujas bajo la capa de los Lores. 2ª y última parte

Por Mauriciojaviercampos @mauriciojcampos
Los masones a la hoguera: La corona, la sotana y el resucitado martillo de las brujas bajo la capa de los Lores. La historia completa del Gran Oriente Federal Argentino - G.´. O.´. F.´. A.´. 2ª y última parte
Los masones a la hoguera: La corona, la sotana y el resucitado martillo de las brujas bajo la capa de los Lores. 2ª y última parte


La Masonería de las mil caras y la demolición del mito. Índice general de la obra: Palabras previas; 1ª parte: Aspectos de una crisis; 2ª parte: El Gran Oriente Argentino del Rito Azul; 3ª parte: Los masones a la hoguera: La corona, la sotana y el resucitado martillo de las brujas bajo la capa de los Lores. La historia completa del Gran Oriente Federal Argentino - G.´. O.´. F.´. A.´., en dos capítulos.
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"¿Historia? No me da ni el destello de una idea". Donald en una biblioteca, frente a la estantería de los libros de historia, Disneylandia Nº 455. Del volumen Para leer al Pato Donald, capítulo VI: El tiempo de las estatuas muertas, de Dorfman y Mattelart.
"Si el universalismo ha de consistir en la simple sincronización de prácticas rituálicas o en el ejercicio de una ilimitada y ostentosa filantropía con olvido de la misión activa y progresista que nuestros principios nos señalan, nuestra Orden no podría evitar la pérdida de su prestigio entre la humanidad progresista, y su paulatina disgregación sería la consecuencia de su ineficacia e inocuidad".
Gran Oriente Federal Argentino - G.´. O.´. F.´. A.´.
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Palabras previas
Estos textos, notas y apuntes pertenecen a la serie Documentos para el revisionismo histórico crítico de la Masonería Argentina de la primera mitad del siglo XX, 1902-1957. Este período abarca la etapa más convulsionada de la historia masónica nacional, con numerosas crisis y rupturas.
Luego de un período de gestación, en el transcurso del siglo XIX, y a partir del nacimiento del primer Gran Oriente y Supremo Consejo en el período 1857-1858 (no exento de problemas tampoco), el quehacer masónico gozó de notable influencia social, contando entre sus filas con personajes de relevancia y obteniendo notables triunfos en diversas áreas, como la secularización de los cementerios, la creación de los Registros Civiles, la ley de educación laica, obligatoria y gratuita y, a principios del siglo XX, con la casi aprobación de la ley de divorcio que patrocinaban los masones en su conjunto. Integraron los primeros partidos políticos y hasta llegaron a suplirlos en el interior de las provincias donde estos no existían. El sillón presidencial tampoco le fue esquivo a la Orden, y sus miembros lo ocuparon en forma muy asidua, en sus primeros 80 años de historia.
Un proceso de gestación, una etapa de apogeo en la segunda mitad del siglo XIX; luego una aparente declinación -o un accionar masónico opacado por las sucesivas pugnas por el poder y los conflictos ideológicos internos-, que culminó con el nacimiento del Gran Oriente Federal Argentino - G.O.F.A., en 1935, y la incorporación a sus filas de la mayoría de los destacados intelectuales masones de la Segunda República Española en el exilio. El G.O.F.A., en palabras de la Gran Logia Unida de Inglaterra, llegó a ser junto al Gran Oriente de Francia, la Obediencia adogmática y liberal más importante del mundo, y, sin duda, de Latinoamérica, en el período en que extendió sus actividades y hasta que desapareció, en 1957.
Otro punto culminante y que no puedo dejar de mencionar, se alcanzó con la creación, en 1916, de la Federación Argentina de la Masonería Mixta El Derecho Humano de Francia. Prueba de ello lo constituye la publicación de su Constitución y Reglamentos en 1917. Un documento, cuya edición original tuve la fortuna de recuperar, que revela la evolución de los valores humanos, laicos, de igualdad de género y progresismo social que la sustentan y que aún cuentan con plena vigencia, plasmados en los principios de esta Orden que fue la primera en instaurar la mixticidad en sus Logias.
Finalmente, el ocaso. A partir de la segunda mitad del siglo XX, el imperio contraataca y la Gran Logia Unida de Inglaterra destruye los avances obtenidos en la Conferencia de Montevideo de 1947, un acuerdo de 51 Potencias Latinoamericanas para conformar un bloque continental, pero que no convenía a los intereses ingleses. Le quita el reconocimiento a la Gran Logia del Uruguay, coacciona a la Gran Logia de Chile y socava al G.O.F.A. La Gran Logia inglesa remodela el panorama a su voluntad y al celebrarse la segunda conferencia, a principios de 1950, el G.O.F.A. ya queda excluido y, a la muerte de Fabián Onsari, el líder que extendió su influencia por más de dos décadas en la Gran Logia de la Masonería Argentina del R.E.A.A., quedan las puertas abiertas para la fusión de las dos Obediencias, de la cual nacerá, en 1957, la actual Gran Logia de la Argentina de Libres y Aceptados Masones, que sigue los parámetros de regularidad impuestos por la G.L.U.I.
Una última etapa abarca desde 1957 hasta la actualidad y se caracteriza mayormente por la quietud, el anquilosamiento y un deísmo acentuado. Lejos habían quedado, por décadas, aquellos tiempos de principios de siglo en que los masones escribían panfletos y series del tipo folletín con títulos como Los crímenes de Dios, aunque en la última docena de años el panorama se renueva.


Los masones a la hoguera: La corona, la sotana y el resucitado martillo de las brujas bajo la capa de los Lores. La historia completa del Gran Oriente Federal Argentino - G.´. O.´. F.´. A.´. 2ª y última parte
Un oscuro prefacio. La Masonería y la cáscara vacía: Del pastor Anderson a Spike Lee, de Hiram Abif a Malcolm X
"La bisagra que rechina es la que consigue el aceite".
"Si no tienes críticas, probablemente no tendrás éxito".
"No hay algo mejor que la adversidad. Cada derrota, cada angustia, cada pérdida, contiene su semilla, su propia lección en la forma de cómo mejorar el proceder la próxima vez".
Malcolm X
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Cuenta Osvaldo Bayer que en cierta oportunidad viajó para dar una conferencia en la ciudad de Rauch, provincia de Buenos Aires. El coronel prusiano Federico Rauch había sido contratado por el gobierno argentino para combatir el avance de los indios en el interior de la provincia. Relatan algunos informes oficiales que el militar pasaba a degüello a los salvajes para ahorrar balas. Un día, al frente de su tropa y un poco alejado de esta, el coronel es sorprendido por su enemigo el cacique Arbolito que de inmediato toma venganza degollándolo. Para Bayer, este hecho constituye un acto de justicia y sugiere, en plena conferencia, cambiar el nombre del pueblo, pasándolo a llamar Arbolito. Buena parte de la concurrencia se levantó y se fue. Al volver a Buenos Aires, Bayer fue encarcelado por orden de algún oscuro funcionario del ministerio del interior.
Un hermano sostiene que la Masonería debiera actualizarse y propone suplantar al siempre difuso personaje de Hiram Abif por Malcolm X, al fin y al cabo, me dice, Obama es presidente de Estados Unidos y los anglosajones ahora reconocen a la Masonería de Prince Hall. La leyenda tampoco cambia en esencia porque el pastor Malcolm X (1925-1965) fue traicionado y asesinado por sus propios hermanos de la Nación del Islam y persiste el cóctel de religión, política y poder, con Templos de trasfondo. Solo cambia el guionista: del pastor Anderson (seleccionado por Desaguliers para crear una crónica adaptada a la nueva entidad creada en 1717) a Spike Lee. Algunas de las célebres frases de Malcolm X le son aplicables hoy al pastor Anderson como si fueran landmarks: "Los medios de comunicación son la entidad más poderosa sobre la tierra (...) Porque controlan las mentes de las masas (...) Esa es la prensa que transforma las apariencias (...)". Dijo Sábato en una entrevista, citando al Eclesiastés: "Nada hay de nuevo bajo el sol". Se refería a los celos y la envidia y, aunque la Masonería no es una religión y supuestamente no adhiere a dogmatismos, siempre la ronda ese otro oscuro personaje llamado Dios, metiendo su dedo en la llaga, a lo cual responde nuevamente Malcolm X: "Yo creo en una religión que cree en la libertad. Cada vez que tengo que aceptar una religión que no me deja libertad para luchar por mi pueblo, yo digo al diablo con esa religión". "Estoy a favor de la verdad, no importa quién la dice. Estoy a favor de la justicia, no importa para quién es a favor o en contra". O, "Nadie puede darle la libertad. Nadie puede darle la igualdad o la justicia, ni nada. Si usted es un hombre, las toma".
Recuerdo el prólogo que Harlan Ellison escribió en 1967 sobre el texto de Samuel Delany (1942), titulado Por siempre y Gomorra. Lo recuerdo porque se olvidó de decir que Delany es negro y homosexual. La historia es excelente, y se refiere al cambio y/o la uniformidad y la adaptación. La narración cuenta las andanzas de una elite de astronautas (mujeres y hombres indistintamente, ya no importa) que han sido modificados genéticamente y se les ha privado de su sexo y de toda sensación inherente al mismo. En pocas páginas quedan plasmados el mesianismo del grupo y la conciencia del estatus que les pertenece como clase y su contracara, la soledad y angustia que trae aparejada la situación y, por otro lado, la pasión, la ironía y la crueldad de aquellos simples mortales que los desean y los usan, pero con desprecio. Dijo Delaney al ser entrevistado sobre este cuento: "(...) ¿Qué pueden hacer entre ellos? A riesgo de traicionarme, déjenme decirles que esta es básicamente una historia de horror. No hay nada que puedan hacer".
El doctor de Ojos bien cerrados de Kubrick no puede hacer nada, y el protagonista de El castillo de Kafka tampoco puede hacer nada. Malcolm X lo pagó con su vida, de acuerdo con sus convicciones, y Robert Duval, en su interpretación de El apostol, encontró el justo desequilibrio.
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LIBRO BLANCO DEL GRAN ORIENTE FEDERAL ARGENTINO. Continuación.
Ver 1ª parte, ítems I, II, III:
http://mauriciocamposmasoneria.blogspot.com/2011/09/los-masones-la-hoguera-la-corona-la.html
IV
Fundamentos para el reconocimiento del G.´. O.´. Fed.´. Argentino

"El 6 de noviembre de 1940, la Gran Logia de Chile emite un documento, el primero que reconoce al G.´. O.´. F.´. A.´. como potencia masónica soberana.
En la Revista Masónica de Chile, Nº 8, correspondiente al mes de octubre de 1941, se transcribe el texto de la información suministrada por la Gran Logia de Chile al reconocer al Gran Oriente Federal Argentino. Lo reproducimos a continuación:"
EL GRAN ORIENTE FEDERAL ARGENTINO
Información expositiva sobre su reconocimiento

"Como es sabido por los hermanos de la Obediencia, no hace mucho el Consejo de la Orden acordó reconocer oficialmente a la entidad masónica denominada Gran Oriente Federal Argentino, e intercambiar con él Garante de Amistad.
Para tomar esta determinación, solicitada con interés por el mencionado Poder trasandino, tuvo en vista diversas consideraciones que en su oportunidad se hicieron valer y que pesaron suficientemente en el ánimo de los miembros del Consejo, moviéndolos a establecer el mencionado acuerdo de reconocimiento.
Naturalmente que esta determinación contrariaba a otra entidad masónica argentina, la "Gran Logia de la Masonería Argentina del Rito Escocés Antiguo y Aceptado", de cuyo seno habían salido los elementos que luego compusieran el Gran Oriente Federal Argentino.
El primero de estos cuerpos ha creído del caso formular observaciones y redactar una protesta a los demás Poderes del Continente, declarando improcedente la actitud observada por la Masonería Chilena, alegando que el Organismo compuesto por miembros retirados de su Obediencia, es una entidad masónica irregular y que por tanto no puede ser reconocida por Poderes regulares como lo es la Gran Logia de Chile.
Hasta el momento no tenemos informaciones respecto a lo que sobre el asunto hayan contestado los Altos Cuerpos Americanos a la Gran Logia Argentina; no obstante en nuestra Gran Secretaría se han recibido dos comunicaciones relacionadas con este particular: una de la Gran Logia Cosmos, de Chihuahua, México, y otra, muy sencilla y fraternal, de la Gran Logia de Bolivia, en la cual se pedían antecedentes sobre el asunto.
Debiendo dar respuesta nuestra Gran Maestría al oficio de la Gran Logia Cosmos, fue redactada una extensa exposición que contiene en forma clara y sincera los antecedentes del caso y el desarrollo de las consideraciones que movieron al Consejo de nuestra Gran Logia para proceder en la forma que le objeta la Gran Logia Cosmos.
Este documento, bien meditado y sereno, contempla el caso con un criterio que, si bien no encarna absolutamente en algunas rutinarias e inseguras antiguas prácticas masónicas, mira el problema desde el punto de las realidades positivas y de una amplia ideología espiritual.
Como su texto contiene muchos períodos de grande importancia por la doctrina sustentada, y variadas consideraciones que es interesante conocer, damos a continuación algunos de los párrafos mencionados, lamentando no ser muy extensos, pues se trata de un documento demasiado amplio y sobradamente técnico. Las que reproducimos, no obstante constituir un extracto de la exposición de nuestra referencia, dan suficientes elementos para formar criterio acerca del punto de vista de nuestra Gran Logia y de su doctrina al respecto.
Van a continuación:
Se veía venir una franca separación de la Familia Masónica Hermana y los hechos comenzaban a demostrar claramente que era ilusoria toda posibilidad de unión de los Masones Argentinos.
Recibimos, al respecto, por el insospechable conducto de hermanos nuestros que viajaban o estaban radicados en el Oriente de Buenos Aires, definidas e incontrovertibles informaciones que tendían a demostrar la decadencia de la Gran Logia Argentina, el adormecimiento de su primitivo espíritu de lucha, su relativa indiferencia para adoptar las posiciones que los últimos acontecimientos iban imperiosamente indicando.
Producida la división en 1935, nos visitó una Comisión -que recibimos extraoficialmente- con el objeto de obtener una entente que permitiera a los Queridos Hermanos, separados de la Gran Logia Argentina, visitar nuestros Talleres, para lo cual se nos ofrecía reciprocidad de procedimientos. Rechazamos terminantemente esta gestión y se señaló a sus personeros que el único camino a seguir consistía en resolver estos asuntos dentro de la Potencia Hermana, en forma de que, por los medios constitucionales y corrientes, pudieran producirse los cambios necesarios en su Dirección Superior que permitiera enmendar los males que fundamentaban el movimiento cismático.
Posteriormente, en agosto de 1939, acentuada ya la separación y organizado el Gran Oriente Federal Argentino, una nueva comisión se acercó hasta nuestro Oriente para reiterar la gestión comenzada y, como entonces, nos negamos a recibirla en carácter oficial.
Nuevas informaciones llegadas, en el intertanto, por conducto de diferentes Hermanos de nuestra Obediencia, expresaban con rara unanimidad los hechos que derivan siempre de un cisma provocado por una crisis ideológica, en el que llegan a mezclarse hasta predominar, en una de las partes, los intereses materiales. Nuestros Hermanos tenían verdaderas dificultades para ponerse en contacto con la Obediencia Oficial y sus trabajos, encontrando siempre, en cambio, la invitación cariñosa y la completa comprensión de los Masones Argentinos, colocados por la fuerza de los acontecimientos, en situación irregular. Por nuestra parte, solo recibíamos como manifestaciones de vitalidad, espíritu de superación, masonismo en fin, la literatura proveniente del Gran Oriente Federal ya que -como ha quedado establecido más arriba- la Gran Logia Argentina no volvió a corresponder con nosotros desde mayo de 1939. Y hubimos de reconocer que la Masonería Argentina estaba realmente dividida, desde el momento en que una vieja, y para nosotros Muy Respetable Gran Logia, había dejado extinguirse la llama de la antorcha que siempre empuñó antes con mano firme, y de que una nueva nacida al fragor de la irregularidad, estaba dando claras manifestaciones de vida, espiritualidad y labor efectiva.
Establecida una entente cordial entre los miembros del Gran Oriente Federal Argentino y nosotros, con las informaciones precisas a través de ella obtenidas en cuanto a posición ideológica, aspiraciones, inquietudes, número de Logias y hermanos, publicaciones, etc., los Miembros del Consejo de la Orden en Chile desearon estudiar la posibilidad de un reconocimiento oficial, pesando el pro y el contra, discutiendo el tema hasta agotarlo, oyendo la opinión de cada uno de sus componentes, pensando serenamente en las consecuencias futuras y analizando, desde lo alto, un problema que no tenía un interés puramente local, sino que constituía una severa interrogante en el terreno de la más pura doctrina masónica. Y fue después de este debate que el Consejo de la Gran Logia de Chile, en su calidad de Potencia Masónica independiente, soberana y responsale, tomó el acuerdo de reconocer como Potencia Hermana al Gran Oriente Federal Argentino.
No es que hayamos desconocido por ello los múltiples standars o normas que la costumbre y la tradición han ido creando para el reconocimiento de un nuevo Poder masónico basado en general en los principios de regularidad de origen, inviolabilidad de los Antiguos Límites, soberanía absoluta, territorialidad, etc; pero para el caso tan especial que estamos analizando hemos querido ampliarlo con ese criterio independiente que deriva del sereno balance histórico a la luz de nuestras doctrinas y principios. Porque no se puede dejar de reconocer que las normas masónicas internacionales se han hecho cargo de una serie de vacíos que el pasado le alargaba como un molde, bueno para épocas pretéritas, pero que no se avienen con los momentos de incertidumbre que vive la humanidad y en cuyo nombre no han dejado de cometerse flagrantes injusticias para las que ha habido que buscar, más tarde o más temprano, soluciones de armonía al margen de lo que son sus reglas fijas e inmutables. Mientras que por un lado se esgrime el rígido Código Internacional, en su aspecto empírico, por el otro los hechos hablan el lenguaje tangible de lo que han sido sus realizaciones prácticas. Son muchos los Ritos, hoy reconocidos, que nacieron de una situación cismática y por lo tanto de irregularidad; son numerosos los casos de desmembramientos nacionales o regionales que engendraron Altos Poderes Simbólicos que hubieron de perdurar durante una larga etapa de NO reconocimiento; no son escasas las Grandes Logias que aún no poseen su derecho de territorialidad integral. El concepto de Gobierno Superior para una región determinada no ha sido completado por aquel otro que señala una órbita de acción en el importantísimo aspecto de TERRITORIALIDAD ESPIRITUAL para esa ideología especial que nosotros denominamos MASONISMO y que fluye, sin violencia, de cada una de nuestras enseñanzas, pero que flota, carente de una definición precisa, y por lo tanto, tangible, en el vasto campo del reconocimiento internacional.
Y aún cuando en lo que respecta a la doctrina de territorialidad, nuestra primera Constitución se apresura a sustentarla, adelantándose a su época, fueron numerosas las violaciones de Antiguas Grandes Logias que autorizaron la fundación en Chile de Logias no dependientes de nuestra Obediencia, que significaban verdaderos actos de incomprensión en contra de nuestra naciente Masonería Nacional. La Gran Logia de Chile hizo y hace figurar todavía estos Talleres, como de la "correspondencia", ya que no de la "Obediencia" y ha renunciado a sus particulares convicciones con un elevado espíritu en aras de la armonía internacional.
Y ya que de esto hablamos, ¿no disputa sus territorialidad la Gran Logia Valle de México con la Gran Logia del Rito de York? Conviene recordar a este respecto, que el primero de estos Poderes, el más joven, no ha sido reconocido aún por numeroas Grandes Logias de Norteamérica, y que el segundo, el más antiguo, ha sido acusado de invadir la jurisdicción territorial de varias Grandes Logias Regulares Mexicanas. Jamás se le ocurrió a la Gran Logia de Chile criticar por esto el noble gesto de la Gran Logia de Texas de reconocer a la Gran Logia Valle de México y suscribe las expresiones de su Gran Maestro, cuando dice que "el pueblo de México tiene derecho, ciertamente, a disponer de una Masonería propia, y su llamada para obtener la ayuda y cooperación de los masones de habla inglesa no debe encontrar oídos sordos".
Y al hacer suyos estos conceptos lo hace, no en el simple carácter de una declaración romántica, sino que, después de haber dirigido las Logias de la República de Bolivia, haciendo entrega de esta jurisdicción apenas estuvo formada y pudo hacerse cargo de su responsabilidad la Gran Logia de Bolivia, cuya indpendencia auspició y cuyo reconocimiento prohijó.
Por otra parte, la Gran Logia Valle de México acaba de reconocer a la Gran Logia de Paraiba, basada y consecuente con los principios de descentralización federal que ha venido sosteniendo para su propio gobierno, pero pasando un tanto por encima del principio de territorialidad, defendido para su jurisdicción por el Gran Oriente del Brasil, que no ha deseado compartir con esta y otras Grandes Logias Regionales, para las que también se gestiona el reconocimiento oficial.
Finalmente, la Gran Logia de Chile jamás aceptó la persecución ni siquiera el prejuicio racial en sus filas, que muchas Grandes Logias han mantenido, a pesar de que, la Masonería, es una Institución que amparada bajo la tríada de Libertad, Igualdad y Fraternidad, más que ninguna otra, debería pasar por encima de tales restricciones de la conciencia y aún de la nobleza humanas. ¿No existen todavía Grandes Logias que no admiten en su seno a individuos de una raza determinada y que hasta les niegan su derecho a formar una Obediencia aparte, desconociéndoles la facultad de solicitar su reconocimiento a otras Potencias o prestarlo a estas, so pena de una suspensión de relaciones diplomáticas? No hay duda de que también este es un vacío que las reglas internacionales de reconocimiento no han tomado en consideración, aún cuando ellas estén taxativamente contenidas en cada una de nuestras enseñanzas y constituyan un atentado en contra de los principios de Igualdad y Fraternidad, sin dejar de rozar seriamente aquel otro que se refiere al de Libertad, cuando menos, de asociación fraternal...
La Gran Logia de Chile y su Consejo, al estudiar el problema que planteaba el reconocimiento oficial del Gran Oriente Federal Argentino, por tratarse de un complejo profundamente humano e ideológico, no quiso medirlo con el cartabón de un sistema de normas que han quedado incompletas y hasta sancionando ciertas injusticias masónicas. Quiso juzgar los antecedentes en conciencia, más que en derecho, considerando que la Francmasonería no puede contentarse exclusivamente con este último, sin equilibrarlo armónicamente en la balanza de su elevada Justicia con los conceptos de Deber y Acción que emanan de nuestras enseñanzas, principios y Simbolismo.
Un Alto Poder Masónico permitió en un determinado momento de su trayectoria que el desaliento y la inacción se infiltraran en sus filas y sin el deseo de renovarse dentro de sí misma, puso al margen a Hermanos, consumando un hecho que los dejaba sin alero espiritual donde acogerse. El descontento cundió progresivamente y estos Hermanos separados, edificaron su propio abrigo con nuevo sistema de construcción que les permitió alcanzarlo con mayor rapidez por su mejor cohesión, idealismo y espiritualidad.
Se consumaba así un segundo hecho: la fundación de un Poder irregular, pero con intensa vitalidad y acción convencida y constante de defensa de los principios masónicos. Y este segundo hecho, con las características ya anotadas, permitió de antemano pensar que la armonía y el arreglo se hacían desde ese mismo momento imposibles, porque el recién nacido había alcanzado el derecho a seguir viviendo. Nació a la vida con una irregularidad de la que no era, justo es reconocerlo, el único responsable, y urgido por circunstancias adversas, que no fueron un obstáculo para su normal desarrollo, se hizo acreedor a un estímulo, porque si bien es cierto que hay disposiciones internacionales que exigen diez años de actividad ininterrumpida y sin protesta, no es menos cierto que vivimos una época en que es culpable toda espera inútil e injustificada, y en la que los acontecimientos indican y son imperativo de sinceridad, decisión y, sobre todo, amor al principio donde sea que él se encuentre.
La Gran Logia de Chile no ha creído con su resolución, aumentar una división preexistente, sino que ha tenido muy presente la posibilidad de provocar un avenimiento y este se hace imposible de propiciar cuando se deja a una de las partes en minoridad de resistencia. Para unir dos Poderes Masónicos es indispensable que exista un factor común sobre el cual operar tan feliz circunstancia: la regularidad de ambos. Y sobre esta base de igualdad ha querido colocar a ambos litigantes, convencida de que llegará el día en que, pasada la tempestad, la Familia ponga a un lado resquemores antiguos, para darse, purificada por el dolor, el triple abrazo fraternal que les permita seguir buscando juntos la palabra del Maestro.
Deseamos recalcar, finalmente, en forma muy especial, que la resolución tomada por la Gran Logia de Chile no significa, en manera alguna, la eliminación de la Gran Logia Argentina como Potencia hermana, y en lo que a nosotros respecta, sea cual fuere su actitud, seguiremos manteniendo con ella las relaciones más fraternales y sinceras, aún cuando esto se transformara en un sentimiento unilateral. Pero la acepción que damos al concepto de Fraternidad y el sentido con que usamos el vocatibo de Hermano, es para nosotros de tal amplitud y desisnterés que no sería justo -por el hecho de dispensarlo tan sin limitaciones- exigir una reciprocidad casi egoísta".
V
Diez años de relaciones fraternales
"Las relaciones mantenidas entre ambas Obediencias se caracterizaron por sus elevadas miras y una indudable cordialidad y nobleza.
Al agradecer el reconocimiento chileno, ofrecímosle nuestra colaboración para trabajos de orden continental. Proponemos el intercambio de acuerdos, para estrechar vínculos y coordinar la acción. A su vez nos solicitan documentación, reseñas e informes que constituyan una historia de nuestra Obediencia y de la Masonería Argentina, a fin de utilizarlas en una labor de acercamiento. En 1941, contestan a un comunicado nuestro, felicitándonos por la iniciativa de hacer pública declaración de repudio a los regímenes de fuerza y violencia y a las persecuciones políticas y sociales, repudio que comparte y consigna haber hecho en aquella República manifestaciones análogas. Los aniversarios patrios de ambos países, motivan mensajes y felicitaciones augurales.
Se intensifica el intercambio de publicaciones y a su pedido ampliamos el envío de "Verbum". Sucédese las visitas de hermanos de ambos Valles. Consignamos la de nuestro H.´. Luis Jiménez de Asúa, quien dicta conferencias en la Universidad Santiaguina. Atienden extraordinariamente a nuestro Gran Maestre. Correspondemos en igual forma con los IIL.´. HH.´. Raúl Julliet Gómez, Humberto Alvarez Suárez, Gabriel González Videla y otros. Enrique Arriaga Saldías es designado miembro de honor del G.´. O.´. F.´. A.´. y al aceptar y agradecer la distinción, elogia conceptos de HH.´. de nuestra Obediencia, que califica de orientadores para toda la Masonería de América. El V.´. H.´. don Manuel Blasco Garzón, a la sazón miembro de nuestro Gran Consejo Federal, es recibido en tenida solemne de la Log.´. Iberia que preside el Ser.´. Gran Maestre René García Valenzuela y calificados HH.´. chilenos asisten a la conferencia que pronuncia en la Universidad Nacional. En 1948 el Ven.´. H.´. Virgilio A. Lasca asiste a la elección del Ser.´. Gran Maestre Orestes Frödden Lorenzen y transmite sus gratos sentimientos para nuestra Obediencia. En septiembre de 1949, agradecen oficialmente la visita a Logias chilenas de nuestro Consejero de Relaciones Exteriores, V.´. H.´. Justo Prieto, cuyas conferencias profanas son también un éxito.
Las penas nos son comunes. El pase a Oriente Eterno del IL.´. H.´. Pedro Aguirre Cerda y más tarde el del I.´. H.´. José Antonio Ríos, ambos elevados a la Primer Magistratura de su país, motiva solemnes tenidas fúnebres y manifestaciones de duelo en todos nuestros talleres. Al fallecimiento del Presidente argentino, Dr. Roberto Ortiz, recibimos un sentido mensaje de pésame.
En 1943 nos visita el V.´. H.´. Enrique Arriaga Saldías y en reunión del Gran Consejo informa de la conversación con delegados uruguayos, con motivo de la proyectada celebración de una reunión americana de Potencias Masónicas. En septiembre de 1944 recibimos el proyecto de temario para dicha Conferencia y nos avocamos a su estudio.
Contestan las consultas que les formulamos. Hermanos que visitan Chile nos traen informaciones al respecto, directamente proporcionadas por la Gran Maestría. Nos dan a conocer sus esfuerzos para la inmediata reunión de la Conferencia. Consideran nuestros puntos de vista sobre el temario. Nos comunican pormenores y nos envían los textos de los acuerdos aprobados. Celebrada la Conferencia de Montevideo agasajamos a los HH.´. chilenos y estos agradecen en conceptuosa plancha las atenciones recibidas.
Complementando los acuerdos de Montevideo que establecen la obligatoriedad de colocar en el ara el Libro de la Ley Moral, aprobamos su texto y presentación, acordando la colocación del Código de Moral Masónica y la Constitución del G.´. O.´. F.´. A.´.
En 1948 nuestra 26ª Asamblea Nacional acuerda el envío de una delegación argentina a Chile para cumplir los siguientes objetivos: Conferir una condecoración al IL.´. y Pod.´. H.´. Hermógenes del Canto Aguirre, quien como Serenísimo Gran Maestre de la Gran Logia de Chile, firmó el primer documento que establecía relaciones interpotenciales con el G.´. O.´. F.´. A.´. y al mismo tiempo provocar el estudio de la necesidad de concitar a un movimiento internacional en favor del laicismo, defendido siempre por nuestra Orden y que tiene su base en el convento de Lausana de 1875. Este movimiento se convirtió en una realidad en abril de 1951 en Montevideo.
Los actos masónicos y profanos resultaron brillantes.
En la carta del capítulo VII transcribimos párrafos de algunos discursos pronunciados en oportunidad de esta visita, que puso de manifiesto la recíproca penetración fraterna, tan franca como cordial y afectuosa. Teníamos más fe que nunca en las infinitas posibilidades que se nos ofrecía para una acción decidida y firme en el campo americano. Nos cabía cifrar fundadas esperanzas en el acrecentamiento de renovados vínculos interpotenciales, para las tareas del objetivo común que nos unía.
En 1950 recibimos la visita de delegados chilenos para coordinar la realización del Congreso Internacional del Laicismo que propiciábamos. Poco después nos visita el IL.´. H.´. Sócrates Aguirre, nuestro Garante de Amistad ante la Gran Logia de Chile. Y ya habíamos recibido la pl.´. que transcribimos en el capítulo que sigue".
VI
La Gran Logia de Chile revé el régimen de sus relaciones interpotenciales

Fechada el 13 de Octubre de 1950 (e.´. v.´.), emanada del Departamento de Relaciones Exteriores, en el G.´. O.´. F.´. A.´. se recibió la pl.´. Nº 408, del siguiente tenor:
"Gran Logia de Chile - Departamento de Relaciones Exteriores.
Oriente de Santiago, a 13 de octubre de 1950 (E.´. V.´.).
Ilustre y Querido Hermano:
La Gran Logia de Chile en Asamblea celebrada el 25 de mayo de 1947, procedió a ratificar los acuerdos adoptados en la Primera Conferencia Interamericana de la Francmasonería Simbólica realizada en Montevideo, y ha considerado, por lo tanto, de su deber dar cumplimiento integral a las distintas ponencias aceptadas. Entre ellas figura como segundo tema, los fundamentos para un Derecho Masónico Interpotencial, esto es, los riquisitos mínimos que deben cumplir y respetar las Potencias que aspiren a mantenerse dentro de un régimen jurídico de relación. Estos principios tienen para nosotros un doble aspecto: en primer término, cada Potencia signataria debe encuadrarse dentro de su marco y, enseguida, solo mantener relaciones con aquellas Potencias que, a su vez, se ajusten a ellos.
La Gran Logia de Chile considera que por haber ratificado estos acuerdos, no puede seguir manteniendo relaciones con Poderes que no encuadran dentro de estos riquisitos mínimos, pues de otra manera la Confederación resultaría inoperante y caería fatalmente en el desprestigio. Por otra parte, las Autoridades de esta Gran Logia están obligadas a cumplir y respetar los acuerdos que adopte su Asamblea.
Ante esta situación, el Consejo de la Gran Logia ha estado revisando el cuadro de las Potencias de la Amistad y, en especial, la situación de ese Gran Oriente, pues se han suscitado dudas sobre la regularidad de vuestra organización.
Del estudio realizado aparece que ese Gran Oriente no se ajusta a los siguientes principios aprobados en la Conferencia de Montevideo:
1º Regularidad de origen: esto es, cada Potencia deberá haber sido legalmente establecida por una Potencia debidamente reconocida o por tres o más Logias regularmente constituídas en territorio no ocupado.
2º Reconocimiento de un Principio Superior e Ideal, generalmente designado bajo la denominación de Grande Arquitecto del Universo.
3º Jurisdicción exclusiva sobre los tres grados simbólicos, sin compartir su gobierno con ningún organismo de grado filosófico.
4º Uso de los trabajos de las tres grandes luces de la Francmasonería: Volumen de la Ley Sagrada o Moral, Escuadra y Compás.
5º Reconocimiento de los antiguos Usos y Costumbres de la fórmula de tolerancia exteriorizada en la Constitución de 1723.
Queremos recordaros que esta Gran Logia al reconocer el Gran Oriente Federal Argentino, lo hizo aún en conocimiento de que ese Poder no se ajustaba a las normas de regularidad aceptadas tradicionalmente en nuestra Institución, por dos razones primordiales: colocar a las dos Obediencias Argentinas en disputa en situación de paridad, para que pudieran así buscar una fórmula de solución a la división de la familia masónica argentina; y porque consideró que ese Poder podría reavivar la actividad masónica en ese país que atravesaba por un período de estancamiento. Pero en todo caso, al acordar dicho reconocimiento manifestó en todo momento su deseo de que la situación debía solucionarse, y que vuestra Obediencia debía ajustarse a los principios universalmente aceptados. Están en vuestro conocimiento las múltiples gestiones de arreglo que patrocinamos, pero que lamentablemente fracasaron.
Pero ya una vez formada la Confederación Masónica Interamericana, y aprobadas diversas normas tendientes a crear un régimen jurídico de convivencia universal, esperábamos que el Gran Oriente Federal Argentino, teniendo en cuenta el interés general de la Orden, haría un sacrificio y se ajustaría a esas normas. Desgraciadamente vuestra posición que resulta un tanto intransigente -aunque no quisiéramos emplear ese término- se mantiene inalterable, y constituye fatalmente un serio escollo en el desarrollo del universalismo francmasónico.
Debemos también recordar que la Gran Logia de Chile ha mantenido las mejores relaciones fraternales con el Gran Oriente Federal Argentino, y ha colaborado en todas aquellas iniciativas que habéis emprendido, como por ejmplo el Congreso de Laicismo; pero frente a la labor en que estamos empeñados de trabajar por el universalismo francmasónico, creemos que una razón superior nos obliga a estudiar vuestra situación de regularidad.
Antes de adoptar una resolución definitiva que podría tener el carácter de suspensión de relaciones, deseamos saber si ese Gran Oriente estaría dispuesto a ajustarse a las normas y principios aprobados en la Conferencia de Montevideo y os rogamos que vuestra respuesta sobre estos puntos, corresponda al espíritu con que hacemos esta consulta.
Recibid, Ilustre y Querido Hermano, la expresión más sincera de nuestro afecto fraternal".
Fdo: Orestes Frödden Lorenzen (Serenísimo Gran Maestro); J. Eduardo Pastene (Gran Secretario); Mauricio Flisfich E. (Jefe del Dep. de Relaciones Exteriores).

Dirigida: Al Ilt.´. y Q.´. H.´. Miguel Servera, Gran Maestre del Gran Oriente Federal Argentino.
"Ante los riesgos y amenazas que se cernían para las posibilidades de una acción mancomunada y para la difusión de principios purificadores y luminosos, afrontamos el inusitado planteamiento con amplia serenidad. Una comisión especial designada por el Gran Consejo Federal se contrajo al estudio cabal del requerimiento que se nos formulaba y de una digna respuesta. No lográbamos entender lo acaecido. ¿Qué había pasado? ¿Qué problemas se le habían creado a la Gran Logia de Chile, capaces de obligarla a dirigirnos semejante comunicación? ¿Cuáles eran las verdaderas causas que motivaron la nota? ¿Qué podíamos hacer como Potencia amiga, para ayudarle a resolver sus problemas? Todo ello determinó al Gran Consejo Federal a destacar primero un enviado especial ante las autoridades de la Gran Logia de Chile y a esa visita sucedió la de nuestro Gran Maestre. No pudo abordarse fórmula alguna para lograr un entendimiento".
VII
La respuesta argentina

"El 19 de mayo de 1951 (e.´. v.´.) el G.´. O.´. F.´. A.´. remitió al Ser.´. Gr.´. Maes.´. de la Gran Logia de Chile, la plancha del siguiente tenor:
Vall.´. de Buenos Aires, mayo 19 de 1951,
Al Ser.´. G.´. M.´. de la
Muy Resp.´Gran Logia de Chile.
Santiago - Chile.
IL.´. y quer.´. her.´.:
Por vuestro digno conducto nos dirigimos a esa G.´. L.´. de Chile, contestando vuestra plancha de octubre 13 de 1950, con involuntario retardo".
Vuestro reconocimiento
"Más de diez años hace, cuando en 1940 esa G.´. L.´. de Chile acordó reconocer a este G.´. O.´. F.´. A.´. como potencia masónica regularmente constituída -la primer obediencia regular que lo hacía- valoró vitales fundamentos que gravitaron en la decisión del Consejo de la Gran Orden, regido por la venerable figura de su Ser.´. G.´. M.´. IL.´. y Pod.´. H.´. Hermógenes del Canto Aguirre, con la eficaz colaboración del entonces jefe del Departamento de RR.´. EE.´. IL.´. H.´. René García Valenzuela.
Al ser requerida esa G.´. L.´. de Chile por algunas potencias sobre las razones que tuviera para hacer dicho reconocimiento, produjo un extenso y meduloso informe sobre la situación en que se hallaba el importante núcleo de IL.´. HH.´. que salidos del seno de la G.´. L.´. de la M.´. Argentina, constituyeron el G.´. O.´. Federal Argentino.
Por ser fiel reflejo de palpitante realidad no se borrarán de nuestras mentes aquellos fundamentos vuestros, expresados a los cinco años de vida de nuestra naciente potencia, según los cuales esa G.´. L.´. de Chile "solo recibía -entonces- como manifestaciones de vitalidad, espíritu de superación, masonismo, en fin, la literatura procedente del G.´. O.´. Federal Argentino y que la G.´. L.´. no volvió a corresponder desde mayo de 1993, y hubimos de reconocer -decía esa G.´. L.´. de Chile- que la Mas.´. Argentina estaba realmente dividida, desde el momento que una vieja, y para nosotros Muy Respetable Gran Logia, había dejado extinguirse la llama de la antorcha que siempre empuñó antes con mano firme".
Ese documento, justamente calificado como histórico, afirmó algo más importante aún al expresar que: "Establecida una entente cordial entre los miembros del G.´. O.´. Federal Argentino y nosotros -decía esa Gran Logia- con las informaciones precisas a través de ellas, obtenidas en cuanto a la posición ideológica, aspiraciones, inquietudes, número de logias y hermanos, publicaciones, etc., los miembros del Consejo de la Orden de Chile desearon estudiar las posibilidades de un reconocimiento oficial, pesando el pro y el contra, discutiendo el tema hasta agotarlo, oyendo la opinión de cada uno de sus componentes, pensando serenamente en las consecuencias futuras y analizando, desde lo alto, un problema que no tenía un interés puramente local, sino que constituía una severa interrogante en el terreno de la más pura doctrina masónica. Y fue después de ese debate que el Consejo de la G.´. L.´. de Chile, en su calidad de Potencia Masónica independiente, soberana y responsable, tomó el acuerdo de reconocer como Potencia Hermana al G.´. O.´. Federal Argentino"".
Principios ideológicos innovadores de derecho
"No fue un acto cumplido al generoso impulso del fraterno corazón chileno, con olvido de prácticas internacionales. No. Esa G.´. L.´. de Chile, dijo, en el referido informe: "No es que hayamos desconocido los múltiples standars o normas que la costumbre y la tradición han ido creando, para el reconocimiento de un nuevo Poder Masónico, basado en general en los principios de regularidad de origen, de inviolabilidad de los antiguos límites, soberanía absoluta, territotialidad, etc. Pero para el caso tan especial que estamos analizando, hemos querido ampliarlo con ese criterio independiente que deriva del sereno balance histórico a la luz de nuestras doctrinas y principios. Porque no se puede dejar de reconocer que las normas masónicas internacionales se han hecho cargo de una serie de vacíos que el pasado le alargaba como un molde, bueno para épocas pretéritas, pero que no se avienen con los momentos de incertidumbre que vive la humanidad y en cuyo nombre no han dejado de cometerse flagrantes injusticias para las que ha habido que buscar más tarde o más temprano soluciones de armonía al margen de lo que son sus reglas fijas e inmutables. Mientras por un lado se esgrime el rígido Código Internacional en su aspecto empírico, por el otro los hechos hablan el lenguaje tangible de lo que han sido sus realizaciones prácticas... El concepto de gobierno superior para una región determinada no ha sido complementado por aquel otro que señale la órbita de acción en el importantísimo aspecto de territorialidad espiritual, para que esa ideología especial que nosotros denominamos masonismo, y que fluye, sin violencia, de cada una de nuestras enseñanzas, pero que flota carente de una denominación precisa, y por lo tanto tangible, en el vasto campo del reconocimiento internacional..."
Este documento innovador pletórico de penetración masónica, espíritu fraterno, expresaba a las potencias del orbe que la "G.´. L.´. de Chile y su Consejo al estudiar el problema que plantea el reconocimiento oficial del G.´. O.´. Federal Argentino, por tratarse de un complejo profundamente humano e ideológico, no quiso medirlo con el cartabón de un sistema de normas que han quedado incompletas y hasta sancionando ciertas injusticias masónicas. Quiso juzgar los antecedentes en conciencia, más que en derecho, considerando que la Francmasonería no puede contentarse exclusivamente con este último, sin equilibrarlo armónicamente en la balanza de su elevada justicia con los conceptos de deber y acción que emana de nuestras enseñanzas, principios y simbolismos..." "
Conferencia de Montevideo
"Más tarde, en 1947, compartimos con esa G.´. L.´. de Chile y aún con la delegación de la G.´. L.´. de la Mas.´. Argentina, la común labor de la Conferencia Internacional de Montevideo, impelidos por el ideal de la igualdad, justicia y amor, y tampoco podemos olvidar la distinción de que entonces fuera objeto el G.´. O.´. Federal Argentino, en el seno de las comisiones, por su natural dinamismo. Hicimos efectiva nuestra adhesión a la Confederación Masónica Interamericana, cumpliendo con todos los deberes estatutarios y morales de este nuevo organismo internacional. La conducta limpia y recta del G.´. O.´. Federal Argentino hizo que se ensancharan sus relaciones oficiales hasta con 20 Potencias universalmente reconocidas".
Recepción a nuestra delegación
"Está fresco el recuerdo entre los integrantes de nuestra delegación destacada ante esa G.´. L.´. de Chile de 1949, cuando por motivos de gratitud hacia la obediencia hermana y en pos del perfeccionamiento de las instituciones libres que deben regir el suelo americano, vuestro Ser.´. G.´. M.´. IL.´. y Pod.´. H.´. Orestes Frödden Lorenzen, en solemne tenida les daba la bienvenida expresándoles: "La Francmasonería Chilena comprende perfectamente la situación por la cual atraviesa la Institución en vuestro país... que hoy necesita como nunca la orientación de mentes sanas y bien intencionadas. Vosotros en general, sois todos elementos magníficos y además, estáis poseídos de los atributos necesarios para hacer que se manifiesten los principios que la Orden nos recomienda y la preocupan... Es que el hombre fue creado para ser libre y para ello se la ha confiado además el don inestimable de la completa libertad de conciencia. Y por lo tanto tiene el derecho y hasta la voluntad propia para poder aceptar y rechazar, asentir o disentir, creer o dudar según lo decida por sí mismo, aún cuando pudiera ocurrir que no esté en pleno goce de la libertad material..." "
Conceptos del IL.´. H.´. Del Canto Aguirre
"El siempre noble, IL.´. y Pod.´. H.´. Hermógenes Del Canto Aguirre, con la emoción del recuerdo de horas transcurridas, rememoraba entonces episodios de la familia masónica rioplatense, al decir en esa misma oportunidad: "En 1933, en la R. O. del Uruguay, y en 1935 en la R. Argentina, numerosos y distinguidos hermanos de cierto número de Logias, hasta entonces regulares, se separaron de los Poderes Masónicos existentes para formar otros nuevos que quedaron en calidad de organismos irregulares. Ambas escisiones no eran motivadas por diferendos personales o de organización interna, o por ambiciones de poder o de mando. Respondían a una concepción distinta de la función y activismo en la consecusión de las finalidades de la Institución Francmasónica; en el mantenimiento de los principios e ideales de la Orden... En el Mensaje Anual de 1939 expuse a la Asamblea de la G.´. L.´. de Chile, al referirme a las relaciones exteriores, que "debido a escisión originada por tendencias divergentes se habían constituído en Argentina y en Uruguay organismos masónicos que trataban de alcanzar reconocimiento oficial, y que en esa fecha ese asunto era digno de atenta consideración por la Dirección de la Orden en Chile". En mensaje de 1940 expuse, además, que: "a mi paso por Buenos Aires no tuve la suerte de tomar contacto con los dirigentes de la G.´. L.´. Argentina, Poder regular, por encontrarse ausente de dicha ciudad el G.´. M.´. y demás GG.´. OO.´. y que, en cambio, había tenido la oportunidad de ser atendido con toda fraternidad por el G.´. M.´. Dr. Virgilio A. Lasca, aquí presente, y otros altos dirigentes del G.´. O.´. Federal Argentino, todos los cuales, decía, anhelaban vivamente el reconocimiento de ese Poder masónico de la Francmasonería chilena". Agregué que en esos momentos se encontraba planteado ante el Consejo de nuestra Gran Logia ese reconocimiento, sobre el cual había dado opinión en un sentido favorable, habiéndose solo aceptado hasta esa fecha una entente fraternal que permitiría recibir en condiciones de reciprocidad a los HH.´. que visitaban las LL.´. de uno y otro Poder Masónico. Ahora bien, ¿a quién habíamos acordado ese reconocimiento? A HH.´. de alto valor intelectual y moral que tenían el alma encendida de ideales de cultura y de progreso, perseverantes en el respeto al fondo doctrinario de la institución; hombres libres que no se amoldaban a una quietud y estaticismo que solo conduce a la inacción y a la muerte... No ignoramos que hay disposiciones formalistas, a mi modesto juicio, de validez temporal, que impiden desde el primer momento un reconocimiento de cuerpos Masónicos considerados irregulares. Pero cuando esos organismos tienen vida activa, progresan y practican el Rito con regularidad, son soberanos e independientes y han creado, como en el presente caso, relaciones indestructibles entre los pueblos masónicos de Jurisdicciones vecinas, no sería humano, ni menos masónico, que se combatiera y no se reconociera esa unión, contrariando los mismos fines de la Orden, encargada de extender y hacer realidad la fraternidad entre los hombres y los pueblos. Creo que no tardará mucho en establecerse como norma de reconocimiento de Poderes Masónicos la realidad respecto de los valores masónicos que representan vida y acción, y constatación de que en el desenvolvimiento del Rito se mantienen normas, principios e ideales de la Orden, porque la Francmasonería no es una institución pasiva del bien sino de activo combate contra el mal y el error".
Del H.´. Gran Orador de la G.´. L.´. de Chile
"Vuestro G.´. Orador, IL.´. H.´. Aristóteles Berlandia Sturla en nombre de la G.´. L.´. de Chile, en esa misma ocasión, expresó a nuestra Delegación de entonces, entre otros conceptos: "Para ser una elevada manifestación de cómo entendéis y practicáis la Masonería, después de los breves instantes dedicados a exteriorizar los nobles sentimientos de fraternidad, de justicia y de amistad, de que son portadores, arrojáis al seno de nuestras inquietudes un puñado de ideas, aporte útil al trabajo cierto de estos obreros del Templo de la Sabiduría. Estamos impuestos los HH.´. de este Oriente de las campañas en que os halláis empeñados en contra de las doctrinas que unían la Iglesia al César; el poder espiritual al gobierno material; el dogmatismo y la intoleancia contra el libre pensamiento, de la verdad científica y de la fraternidad entre todos lo hombres de la tierra. Una de las razones que contribuyeron en forma más decisiva al reconocimiento del G.´. O.´. Federal Argentino es su tendencia a la acción, marcadamente señalada en la labor de esos HH.´. que sienten la imperiosa inclinación de volcar las enseñanzas que reciben dentro de la Orden, en forma práctica, sobre la sociedad profana... El activismo inglés se concentra en el simple punto de vista de la filantropía, y sus manifestaciones particulares son: hogares para ancianos, hospitales, asilos, etc., etc. La tendencia anglosajona es contraria por principio a toda reforma interna, es tradicionalista y enemiga de situar a la Orden al servicio de un determinado ideal político o social. Ella desea educar individualmente a sus miembros, inculcándoles el espíritu público necesario para actuar. El camino para la realización práctica de las enseñanzas recibidas, queda entregado, por completo... Los masones chilenos al estrecharnos en un abrazo esta noche jubilosa, os agradecen vuestra visita, os invitan a que compartáis el pan y la sal de la fraternidad en sus mesas, y os manifiestan su gratitud por vuestro valioso aporte a sus habituales trabajos"".
Del Jefe del Departamento de RR.´. EE.´.
"Durante el ágape fraterno de esas memorables jornadas de sincera hermandad, vuestro jefe del Dep. de RR.´. EE.´. I.´. H.´. M. Flisfich, al brindar por el universalismo masónico, daba vuelo a su palabra elocuente expresando: "...Perdonadme queridos hermanos, que en esta ocasión con tanta alegría y felicidad para nosotros me refiera a estas cuestiones, pero la presencia de tan ilustres hermanos, pertenecientes a una Potencia amiga, nos llena de optimismo y nos hace pensar después de oírles en el Templo, después de conocer sus inquietudes, que son las nuestras, de conocer vuestros anhelos que también propiciamos, que no estamos trabajando en vano, y que la semilla del Universalismo está dando sus primeros frutos... Somos hermanos que hemos hecho juntos gran parte de nuestra jornada, os recibimos con los brazos abiertos en esta que es vuestra casa, porque también la vuestra de la calle Sarmiento es la nuestra...""
Agresión a la G.´. L.´. del Uruguay y a la Francmasonería Latino - Americana
"Mientras el G.´. O.´. Federal Argentino, con vuestra eficaz ayuda y la no menos entusista de la G.´. L.´. del Uruguay ponía a prueba esfuerzos para asegurar el éxito del Congreso Internacional del Laicismo realizado en Montevideo, con lo cual defendíamos juntos los ideales y aspiraciones proclamados en la Conferencia Masónica Interamericana de Montevideo; mientras tendíamos nuestra mano fraterna y solidaria a aquella G.´. L.´. del Uruguay agredida por determinada Potencia europea que al pronunciarse en contra de los acuerdos tomados en 1947, no solo atentaba contra la soberanía e independencia de aquella Gran Logia, sino que también pretendía imponer su veto a las resoluciones tomadas libremente por la casi totalidad de las Potencias latino - americanas; cuando bajo un cielo sin nubes uníamos nuestro esfuerzo frente al enemigo común, nos sorprende vuestra plancha del 13 de octubre de 1950".
Amarga sorpresa
"Los cordialísimos vínculos espirituales que unieron auspiciosamente a nuestras respectivas Obediencias, la comunión de ideales y esfuerzos, inducían a pensar, con justificado optimismo, que marcharíamos unidos codo a codo en el logro del triunfo de anhelos y acción compartidos. No seríamos sinceros si dejáramos de expresar que vuestra referida plancha por su fondo y la forma en que viene redactada, nos ha causado amarga sorpresa y hondo dolor fraterno".
Ratificación de los acuerdos de Montevideo
"La mencionada plancha se relaciona con la ratificación que esa Gran Logia hizo de los acuerdos adoptados en la Conferencia de Montevideo en 1947 y la posición tomada por esa Obediencia en sus relaciones con las Potencias de su amistad.
Seguramente tiene conocimiento esa Gran Logia -y de no ser así, fácil sería comprobarlo por el informe de la Oficina Permanente de la Confederación Masónica Interamericana, que en vuestra sede funciona- que el G.´. O.´. Federal Argentino también hizo lo propio en forma tácita, tal como lo autoriza el art. 23 de los Estatutos del Organismo Interamericano, y como consecuencia de esa adhesión tiene el G.´. O.´. Federal Argentino el mismo interés que esa G.´. L.´. de Chile en mantenerse dentro del régimen jurídico acordado.
Por ello, nos llama la atención que esa Gran Logia considere que nuestra Obediencia no se ajusta a las normas de derecho internacional público masónico, algunas de cuyas bases se dieron en dicha Conferencia".
Incuestionable regularidad del G.´. O.´. Federal Argentino
"Llámanos asimismo la atención, las dudas suscitadas acerca de nuestra regularidad, como parece inferirse de vuestra precitada plancha, sin precisarnos en que consisten, circunstancia que, de haberse hecho, hubiera facilitado nuestra respuesta. Nos apresuramos, sin embargo, a exponer nuestros títulos de regularidad, seguros de que habrán de ser claramente comprendidos, tal como fueron aceptados en su hora por esa estimada Gran Logia de Chile:
a) esta obediencia se constituyó -tal como lo consideraron vuestras propias autoridades en 1939/40/41- sobre la base de LL.´. y hh.´. que pertenecieron a la G.´. L.´. de la Mas.´. Argentina, Potencia considerada regular hasta por la más exigente G.´. L.´. Unida de Inglaterra;
b) el G.´. O.´. Federal Argentino fue reconocido por esa G.´. L.´. de Chile según plancha trazada el 6 de noviembre de 1940, manteniéndose desde entonces cordial afectuosa amistad entre los hh.´. de una y otra Potencia según se ha establecido en las conceptuosas expresiones de vuestros propios DDig.´. y OOf.´.;
c) el G.´. O.´. Federal Argentino tiene una indiscutible posesión de estado, dentro del concepto del derecho internacional público masónico creado como principio jurídico por la Asociación Masónica Internacional que legisló sobre el particular en sus propios estatutos. Este principio de derecho aplicable por analogía en las relaciones interpotenciales, también fue aceptado por esa Gran Logia de Chile al adherirse a ese organismo;
d) la admisión del G.´. O.´. Federal Argentino en el seno de la Conferencia de Montevideo de 1947, para concluir los acuerdos que invoca vuestra citada plancha del 13 de octubre de 1950, importa una ratificación de ese reconocimiento previo de nuetsra personería jurídico masónica, sin lo cual saldrían malparados los propios acuerdos, exclusivamente masónicos, válidos solo -como todos los acuerdos- cuando surgen de una fuente pura y sin mancha, plenamente capacitada para adoptarlos;
e) el principio de regularidad de una Potencia constituida por LL.´. regulares en territorio no ocupado previsto en el art. 1º inc. a) de las reglas del derecho masónico interpotencial, adoptadas en la citada conferencia de Montevideo, en plena vigencia desde su aprobación, no puede tener efecto retroactivo en la noble y sana hermenéutica, no solo porque de otro modo muchas Potencias de vida normal verían hundirse a sus pies el fundamento legal de su propia existencia, sino también, y por sobre todo, porque sería un principio teratológico, es decir, anómalo, un precedente funesto que haría perder a la Orden el recto sentido de justicia que siempre le animó. Situación semejante se planteó en el año 1927 en el seno de la Asociación Masónica Internacional al tratar el problema de la territorialidad, dándosele a la norma el alcance para el futuro, y ello permitió que en España como en Francia continuaran coexistiendo los Poderes Masónicos contemporáneos. Por consiguiente el requisito de "territorio no ocupado" solo debe tener vigencia con posterioridad a la Conferencia de Montevideo de 1947.
Vuestro propio reconocimiento es un hecho que en rigor basta por sí solo para establecer nuestra regularidad, y convierte en superflua la enumeración que precede, por cuanto se trata de un pronunciamiento que esa Gran Logia cumplió con pleno conocimiento de causa y nobilísimos propósitos. En efecto ¿qué razones podríamos invocar los integrantes del G.´. O.´. Federal Argentino, más veraces y netamente masónicos, ni más elocuentes que las que esa G.´. L.´. de Chile publicó en su revista Masónica de octubre de 1941, animada por un espíritu tan recto y ecuánime que siempre será motivo de gratitud para este G.´. O.´. Federal Argentino? Si a todas estas consideraciones unimos las que influyeron con mayor gravitación al reconocimiento -facilitar el entendimiento de la familia masónica argentina e intensificar la labor de la Orden en esta jurisdicción-, entonces sí debe estimarse que ese objetivo se logrará confirmando los vínculos de inquebrantable amistad que debe unirnos: 1º) porque por nuestra parte hicimos, como demostramos en otro lugar de esta plancha, todo lo humanamente posible para alcanzar ese entendimiento; y 2) porque la acción masónica en este Oriente se intensificó con toda evidencia, como lo prueban hasta la saciedad nuestra acción profana, nuestras publicaciones y nuestro propio dinamismo, que dan la tónica de la proyección de los principios de la Orden en el exterior, así como por el lento pero firme crecimiento de nuestras columnas y por la participación que nos cupo en la acción interpotencial.
El examen de la obra cumplida por el G.´. O.´. Federal Argentino, aún siendo modesta, dado el clima en que vivimos no puede menos que halagar a esa G.´. L.´. de Chile en la medida en que colaboró en su realización, con el estímulo y la fraternal amistad que siempre nos ha vinculado".
El principio del G.´. A.´. D.´. U.´.
"El reconocimiento de un principio superior e ideal, generalmente denominado Gran Arquitecto del Universo, aunque con las reservas que precisó nuestro voto, también lo hemos aceptado movidos por un alto propósito de concordia y dentro del criterio que inspiró su definición por vuestro Gran Orador IL.´. H.´. Aristóteles Berlandia Sturla en el discurso que en nombre de la G.´. L.´. de Chile, pronunciara durante la magna tenida con que honrasteis a la delegación de este Gran Oriente que os visitó en abril de 1949.
"Sin entrar en el estudio particular y detallado de tan importante materia -dijo ese IL.´. H.´.- quiero solo recordar para intensa satisfacción nuestra que la G.´. L.´. de Chile desde hace muchos años sostiene una fórmula que concilia las tesis encontradas. Se consagra al G.´. A.´. D.´. U.´. como signo de alianza entre incrédulos y creyentes, o más bien dicho entre librepensadores y aquellos que comulgan con alguna religión. Cada masón tiene libertad absoluta para concebirlo como se lo permite su cultura, su idiosincrasia y su imaginación..."
Por otra parte así reza en vuestros propios rituales".
La Biblia
"También aceptó el G.´. O.´. Federal Argentino, con la amplitud de criterio adoptada en dicha conferencia, el uso de las Tres Grandes Luces -el Libro de la Ley Sagrada o Moral, la Escuadra y el Compás-, optando por colocar sobre el Ara de sus templos el Código Moral Masónico junto con los otros dos símbolos, y no la Biblia, pues nos pareció contradictorio mantener aquel libro como de uno de los pilares en que se asienta nuestra Orden, mientras que en Congreso reciente propiciamos en el mundo profano, conjuntamente con esa Gran Logia y la del Uruguay, la organización laica del Estado, la enseñanza y la sociedad.
Asimismo el G.´. O.´. Federal Argentino reconoce los antiguos usos y costumbres de la Francmasonería moderna y la fórmula de tolerancia, sostenidas en la Constitución de 1723, redactada por J. Anderson.
Esa es la causa de nuestro asombro, ya que la afirmación de que nuestra Obediencia no se ajusta a dichos principios, no puede ser sino la consecuencia de erróneos o malintencionados informes".
Gestiones de entendimiento
"Nunca dejaremos de apreciar en todo lo que él significa, por su elevado espíritu fraterno en defensa de la Orden, el reconocimiento hecho en 1942 por esa Obediencia al G.´. O.´. Federal Argentino y bien sabe la G.´. L.´. de Chile:
1º que esta ya vigorosa Potencia en sus 15 años de vida activa, mantuvo, mantiene y mantendrá su vitalidad, espíritu de superación y masonismo, sin dejar extinguir nunca la antorcha que empuñara con mano firme, labor efectiva y contenido filosófico y humanista;
2º que el G.´. O.´. Federal Argentino, respondiendo a la voluntad de sus hermanos, realizó gestiones de acercamiento entre los adversarios de ayer de la G.´. L.´. de la Mas.´. Argentina, a saber:
a) las entrevistas privadas que por iniciativa de la Logia Les Amies des Naufragés realizó el H.´. Servera con el Il.´. y Pod.´. H.´. Fabián Onsari;
b) las entrevistas también privadas de los IIL.´. y PPod.´. HH.´. F. Onsari y V. A. Lasca, que debieron cancelarse ante las reiteradas postergaciones impuestas por el primero;
c) las repetidas ocasiones en que nuestro G.´. M.´. IL.´. y Pod.´. H.´. M. Servera tendió su mano fraterna y leal a la Potencia Hermana, en frases realmente elevadas, de vuestro directo conocimiento;
d) las gestiones oficiosas cumplidas por el G.´. M.´. IL.´. y Pod.´. M. de Dios Serna, de la G.´. L.´. de Uruguay, para concitar un posible avenimiento de la familia masónica argentina, de cuyo resultado solo sabemos que el otro núcleo se negó a abordar;
e) la proposición de la L.´. Concordia de la jurisdicción de la Gran Logia invitando a las autoridades de la G.´. L.´. de la Mas.´. Argentina a buscar la fórmula de solución al pleito de nuestra familia masónica, la que fue desoída por las autoridades a pesar del voto favorable de la Gran Logia;
f) el auspicio de HH.´. de nuestra Obediencia para crear la filial argentina de la Liga Universal de Francmasones, que encontró eco entusiasta en HH.´. de la G.´. L.´. de la Mas.´. Argentina, siendo ulteriormente prohibido por las autoridades de aquella Potencia todo contacto con los HH.´. del G.´. O.´. Federal Argentino;
g) las gestiones de arreglo patrocinadas por HH.´. de esa G.´. L.´. de Chile, que desconocíamos y a las que alude vuestra plancha del 13 de octubre de 1950. A cuantos HH.´. de significación de esa Obediencia nos expresaron su deseo de ver unida a la familia argentina, le hemos expresado idéntico anhelo aceptando complacidos cualquier mediación, como aceptamos ahora la que, por conducto de nuestro Garante de Amistad ante esa G.´. L.´. IL.´. H.´. Sócrates Aguirre, nos ofrece noblemente vuestro Ser.´. G.´. M.´."
Defensa de la Confederación Masónica Americana
"Prueba de la fidelidad con que el G.´. O.´. Federal Argentino aceptó y defendió los acuerdos de Montevideo de 1947, así como el espíritu que reinó en aquellas memorables tenidas, en las comisiones y en los plenarios, capaz de lograr el entendimiento y robustecer los vínculos fraternos de las Potencias latinoamericanas, es la plena solidaridad que brindáramos -al igual que otras Potencias- a la G.´. L.´. del Uruguay ante el gesto inamistoso de que fuera objeto de parte de la G.´. L..´. Unida de Inglaterra, sin otra causa real, que la de haber suscripto y cumplido con lealtad los acuerdos allí adoptados.
Nuestra conducta fue en ese caso automática, clara y precisa, por entender que debemos respetar aquellos acuerdos con toda la energía de que somos capaces, hasta tanto sean modificados por la libre determinación de las Potencias que los suscribieron, y además por entender que debe prestarse el decidido y fraternal apoyo al sentimiento de unión fraterna que reinó en aquellas jornadas, sin admitir que nada ni nadie rompa ese nexo, precisamente en los momentos en que ella es más necesaria para hacer frente a los problemas de todo orden que afectan a la América Latina y en cuya solución nada podría reemplazar a la obra conjunta, constructiva y unida de las Potencias de esas jurisdicciones".
Universalismo activo
"Participamos con sincero calor de la aspiración de universalismo genuinamente masónico, pero no a cualquier precio.
Si el universalismo ha de consistir en la simple sincronización de prácticas rituálicas o en el ejercicio de una ilimitada y ostentosa filantropía con olvido de la misión activa y progresista que nuestros principios nos señalan, nuestra Orden no podría evitar la pérdida de su prestigio entre la humanidad progresista, y su paulatina disgregación sería la consecuencia de su ineficacia e inocuidad.
Aspiramos a una Masonería viva y palpitante imbuída de sus principios de redención, de justicia, de libertad efectiva y de fraternidad universal. Anhelamos seguir constituyendo la vanguardia activa y generosa contra la que se estrellan las tiranías y los dogmatismos y a las que pueden acogerse jubilosos y esperanzados todos los hombres que aspiran a un régimen de justicia sin excepciones, a la libertad consciente y plena, a la igualdad sin retaceos y a la fraternidad efectiva que no conoce egoísmos ni humillantes imposiciones.
Nuestro anhelo de universalismo no se basa en el acatamiento de normas que imparten Potencias erigidas en rectoras o guías inflexibles de la Francmasonería, sino en la armonía voluntaria dentro de los fines superiores de la Orden y mediante el respeto a las diversas modalidades y necesidaes locales, evidentemente distintas en nuestros países latino-americanos de las de los anglo-sajones en general. Todo universalismo impuesto unilateralmente, lejos de responder a la armonía masónica, tendrá fatalmente efectos contraproducentes".
Espíritu de concordia
"Queda expuesta nuestra posición con la lealtad fraterna que nos caracteriza, deseando que las dudas que plantea vuestra citada plancha hayan desaparecido ante esta exposición sincera. Hemos preferido exponer circunstancialmente la situación del G.´. O.´. Federal Argentino para dar a conocer con toda nitidez su rectilínea conducta, y para significar la extrañeza y aún la perplejidad que produjo vuestra plancha en nuestro ánimo. Si apoyamos el fundamento de nuestra acción en los conceptos vertidos por DDig.´. y OOf.´. de esa Gran Logia, si aceptamos íntegramente -como no podía ser de otro modo- los acuerdos de Montevideo de 1947, y si ahora, como siempre, demostramos nuestra sincera voluntad de unión fraterna y de universalismo masónico ¿donde está nuestra intransigencia? ¿Dónde la mano tendida que nos hayamos negado a estrechar? ¿Dónde la obra masónica a la que hayamos negado nuestra franca colaboración? Por el contrario, nuestras relaciones y no meramente formales, sino estrechas y cordialísimas que mantenemos hoy con 20 Potencias, constituyen testimonio elocuente de nuestra voluntad de cooperación, de acercamiento y de unión fraterna. Tenemos la certeza de que el examen sereno e imparcial de nuestra conducta no autoriza a tachar al G.´. O.´. Federal Argentino de intransigencia, y estamos seguros de que vuestra ecuanimidad sabrá así reconocerlo.
No podemos interferir en la vida propia de una Potencia de nuestra amistad para decidirla a mantener o suspender sus relaciones fraternas, porque ello es del resorte exclusivo de la misma. Si algo pudiéramos hacer en favor del crecimiento de esas relaciones interpotenciales, lo haríamos animados del deseo de intensificar los lazos que deben unir las Potencias del orbe; pero si para mantener esas relaciones debiéramos hacer mayores sacrificios que los cumplidos, lamentaríamos expresar que se han agotado nuestras naturales disposiciones de buena voluntad siempre al servicio de las más nobles aspiraciones.
Formulando votos por vuestra elevada inspiración, os enviamos una vez más nuestro cordial saludo fraterno".
Fdo: Miguel Servera (Gran Maestre); Justo Prieto (Cons.´. RRel.´. EExt.´.).
VIII
Suspensión de Relaciones Fraternales

"El 23 de junio de 1951 la Gran Logia de Chile nos comunicó su resolución de suspender las relaciones fraternales que venía manteniendo con el G.´. O.´. F.´. A.´., en una plancha así concebida:
Gran Logia de Chile - Departamento de Relaciones Exteriores.
Oriente de Santiago a 23 de junio de 1951 (e.´. v.´.).
Ilustre y Querido Hermano:
Cumplimos con el deber de dar respuesta a vuestra plancha del 19 de mayo último.
Por comunicación del 13 de octubre de 1950 nos dirigimos a ese Gran Oriente, expresando que en nuestro Consejo se habían suscitado algunas dudas sobre la regularidad del Gran oriente Federal Argentino y que del estudio realizado aparecía que este Poder masónico no se ajustaba a los siguientes principios:
1º REGULARIDAD DE ORIGEN, esto es, cada Potencia deberá haber sido legalmente establecida por una Potencia debidamente reconocida o por tres o más Logias regularmente constituidas en territorio no ocupado.
2º RECONOCIMIENTO DE UN PRINCIPIO SUPERIOR E IDEAL, generalmente designado bajo la denominación de Gran Arquitecto del Universo.
3º JURISDICCIÓN EXCLUSIVA SOBRE LOS TRES GRADOS SIMBÓLICOS, sin compartir su gobierno con ningún organismo de grado filosófico.
4º USO EN LOS TRABAJOS DE LAS TRES GRANDES LUCES DE LA FRANCMASONERÍA: Volumen de la Ley Sagrada o Moral, Escuadra y Compás.
5º RECONOCIMIENTO DE LOS ANTIGUOS USOS Y COSTUMBRES y de la fórmula de tolerancia exteriorizada en la Constitución de 1723.
Al terminar esta comunicación os expresábamos que antes de adoptar una resolución definitiva que podría tener el carácter de suspensión de relaciones, deseábamos saber si ese Gran Oriente estaba dispuesto a ajustarse a las normas y principios aprobados en la Conferencia de Montevideo.
Posteriormente, a fines de diciembre del año pasado recibimos la visita del Ilustre Hermano Osías Kovadloff, quien en representación oficial de ese Gran Oriente, deseaba conocer mayores detalles sobre nuestra posición y la posibilidad de solución del problema planteado. Fue recibido por altos personeros de esta Obediencia, quienes en un extensa conversación le explicaron el pensamiento de la Gran Logia de Chile sobre la regularidad del Gran Oriente Federal Argentino.
Poco tiempo después, en el mes de marzo del presente año, recibimos la visita personal del Ilustre hermano Miguel Servera, vuestro Muy Respetable Gran Maestre, quien por encontrarse ausente nuestro Serenísimo Gran Maestro, hizo llegar al Gran Secretario su petición de que la plancha del 13 de octubre de 1950 fuera retirada y se continuara en las relaciones fraternales en la misma forma que se habían mantenido anteriormente.
Fue necesario insistir nuevamente ante vosotros para obtener una respuesta definitiva en la plancha del 19 de mayo.
Después de un atento estudio realizado por la Gran Maestría en unión del Consejo de la Gran Logia, hemos llegado a las siguientes conclusiones:
1º Que no existe el más leve interés por parte del Gran Oriente Federal Argentino de hacer alteración alguna en su actual organización.
2º Que la plancha del 19 de mayo ya indicada no aclara en manera alguna los puntos de nuestra nota dirigida el 13 de octubre de 1950. Y que ni siquiera se hace comentario alguno sobre el punto 3º, que se refiere a que toda Potencia deberá tener jurisdicción exclusiva sobre los tres grados simbólicos, sin compartir su gobierno con ningún organismo filosófico.
3º Que el universalismo Francmasónico solo puede realizarse sobre la base de Potencias Regulares que se ajusten a las normas de derecho interpotencial aceptadas por la gran mayoría de los Poderes existentes en el mundo.
4º Que ante esa situación la Gran Logia de Chile debe suspender sus relaciones fraternales con el Gran Oriente Federal Argentino, hasta tanto subsistan las causas que han motivado esta suspensión".
Os saludan muy fraternalmente,
Fdo: Mauricio Flisfich E. (Jefe del Departamento de Relaciones Exteriores); J. Eduardo Pastene (Gran Secretario).
Dirigido: Al Muy Respetable Gran Maestro del Gran Oriente Federal Argentino.
IX
Agotando gestiones

"Ante el hecho consumado este G.´. O.´. F.´. A.´. procuró, no obstante, agotar todas las gestiones para repararlo. El resultado puede apreciarse a través de nuestra nota del 6 de agosto y la respuesta del 4 de octubre.
Valles de Buenos Aires, 6 de agosto de 1951 (E.´. V.´.)
Al Ser.´. Gran Maest.´. de la Gran Logia de Chile.
IL.´. y Pod.´. H.´. Orestes Frödden Lorenzen.
Santiago (Chile).
I.´. y Q.´. H.´.:
Suscripta por el Gran Secretario y el Jefe del Departamento de Relaciones Exteriores de esa Gran Logia de Chile, dirigida a nuestro Gran Maestro, recibimos vuestra plancha de junio 23 ppdo., en la que nos acusabais recibo de la nuestra de mayo 19 último.
En la citada pl.´. esa Obediencia recapitula los puntos que han suscitado dudas sobre nuestra regularidad. Señala las gestiones hechas por nuestro Ser.´. Gran Maestro y el Q.´. H.´. Osías Kovadloff, destaca nuestra demora en la respuesta y termina comunicándonos que la Gran Maestría, en unión con el Consejo de la Orden de la Gran Logia, llegó a las siguientes conclusiones:
1º) Que no existe el más leve interés del Gran Oriente Federal Argentino en hacer alteración alguna en su actual organización.
2º) Que nuestra pl.´. de mayo 19, de 1951, no aclara los puntos de la vuestra de octubre 13 de 1950 ni hace comentarios sobre el punto 3º, referente a jurisdicción exclusiva sobre los grados simbólicos.
3º) Que el universalismo francmasónico solo puede realizarse sobre las bases de las Potencias regulares que se ajusten a las normas de derecho interpotencial aceptadas por la gran mayoría de los Poderes existentes en el mundo.
4º) Que ante esta situación la Gran Logia de Chile debe suspender sus relaciones fraternales con el Gran Oriente Federal Argentino hasta tanto subsistan las causas que han motivado esta suspensión".
Consideración y respuesta
"El Gran Consejo federal de esta Obediencia, después de considerar atentamente vuestra citada pl.´. nos autoriza a contestar a la Gran Logia de Chile en los términos que van a continuación".
Vuestra primera conclusión: Alteración orgánica
"Al interpretar nuestro estado de ánimo con respecto a cualquier alteración de la actual estructura del Gran Oriente Federal Argentino, consideramos -perdonad nuestra franqueza- que se ha incurrido en evidente exceso. En efecto, no se nos ha requerido ni hemos visto necesidad de modificar nuestra actual organización, pero ello no significa que no estemos dispuestos ahora y siempre a introducir, por libre y espontánea determinación, todas aquellas modificaciones que la experiencia nos aconseje si ellas tendieren a definirnos mejor y a hacer más provechosa nuestra obra. No es esta, sin embargo, la cuestión, pues la Gran Logia de Chile no nos ha formulado sino algunas preguntas concretas que hemos contestado con honradez, en buena parte en sentido coincidente con el de esa Obediencia, y estimamos que tal respuesta habría sido suficiente para disipar las dudas que sobre nuestra regularidad asaltan a esa Obediencia, tras diez años de mantener con nosotros relaciones fraternales y a cuatro de haber compartido con los delegados del Gran Oriente Federal Argentino los trabajos de la Conferencia de Montevideo".
Vuestra segunda conclusión: Omisión cumplida
"Aceptamos la existencia de la falta de comentarios en nuestra comunicación de mayo de 1951 sobre la exclusividad de jurisdicción en el Simbolismo.
Debemos deciros que sobre este punto, abrigábamos confiadamente la convicción de que habríais advertido con claridad la separación e independencia absolutas en que mantenemos el gobierno de los tres grados simbólicos del de todo organismo de carácter filosófico, ya que así consta en nuestra Constitución del Gran Oriente Federal Argentino, estrictamente observada por nosotros y cuyo ejemplar, así como los de nuestros Reglamentos que lo corroboran, obran en vuestro poder. Sin duda los tuvisteis a la vista en ocasión de haber producido vuestro auto de reconocimiento en 1941".
Vuestra tercera conclusión: El universalismo
"Es cierto que el universalismo francmasónico solo puede realizarse sobre la base de las Potencias regulares que se ajusten a las normas de Derecho Interpotencial. Es un noble afán vuestro, que compartimos ampliamente. Permitídnos que señalemos, sin embargo, que las normas de Derecho Interpotencial vigentes entre esa y nuestra Obediencia no pueden ser otras que las aceptadas en la Conferencia de Montevideo de 1947. Las que "proclaman la gran mayoría de los Poderes existentes en el mundo", no están en discusión. Somos miembros de una Confederación que tuvo su origen en una Conferencia para nuclear, organizar y orientar la Masonería Simbólica Americana. En la preparación y desarrollo de dicha Conferencia tuvo la Gran Logia de Chile papel destacado, siendo la primera en ratificar sus acuerdos.
Allí se echaron las bases de la Confederación Masónica Interamericana y se establecieron los principios y normas a que debían ajustarse en su régimen interno, orientación y conducta, las Potencias que desearan formar parte del nuevo organismo.
No se tuvo en cuenta entonces si aquellas se ajustaban o no a las aceptadas por la "gran mayoría de los Poderes existentes en el mundo". A lo resuelto allí deben, pues, atenerse las Potencias que ratificaron aquellos acuerdos, por lo menos frente a las otras integrantes del organismo, hasta que una nueva Conferencia o Asamblea Internacional resuelva modificarlos. A lo resuelto allí ha ajustado siempre su conducta el Gran Oriente Federal Argentino".
Vuestra cuarta conclusión: Suspensión de relaciones
"La situación que se menciona en vuestra comunicación en último término, debe considerarse condicionada a las tres primeras. Si las objeciones que le preceden no tienen el carácter de tales, o quedan destruídas por nuestra contestación, es claro que la última conclusión carece de toda base.
Independientemente de ello, la Gran Logia de Chile puede adoptar libremente la solución que estime oportuna. No podemos ni deseamos influir en una determinación que es de la exclusiva competencia de sus autoridades; pero no es lógico que esa Gran Logia trate de justificar un propósito que es fruto de su voluntad, atribuyendo al Gran Oriente Federal Argentino haber dejado incumplidos acuerdos o desatendido normas que ha cumplido y respetado cabalmente.
Invitamos una vez más a esa Gran Logia a que nos diga concretamente cuáles son los acuerdos de aquella Conferencia que el Gran Oriente Federal Argentino no ha cumplido; cuáles las normas, allí establecidas, que no han sido respetadas".
Os saludan muy fraternalmente,
Fdo: Miguel Servera (Gran Maestre); Justo Prieto (Gran Sec.´. de RR.´. EE.´.).
Nota chilena
"Gran Logia de Chile - Departamento de Relaciones Exteriores.
Oriente de Santiago a 4 de octubre de 1951 (e.´. v.´.).
Ilustre y Querido Hermano:
Hemos tomado conocimiento de vuestra pl.´. del 6 de agosto, referente a nuestra resolución de suspender relaciones con el Gran Oriente Federal Argentino, y hemos estudiado detenidamente los distintos argumentos que contienen y que, en vuestro sentir, deberían llevarnos a alterar nuestra determinación.
Lamentamos muy de veras manifestaros que, a pesar de nuestra mejor disposición de ánimo para resolver la cuestión planteada, no creemos que vuestros argumentos sean suficientes para alterar la determinación de nuestra Gran Logia de suspensión de relaciones con vuestra Obediencia.
Siendo esta nuestra conclusión, creemos innecesario entrar a contestar uno por uno los puntos de vuestra plancha a que damos respuesta".
Os saludan muy fraternalmente,
Fdo: Mauricio Flisfich E. (Jefe del Dept. de Relaciones Exteriores); J. Eduardo Pastene (Gran Secretario).
Dirigida: Al Ilt.´. y Querido H.´. Gran Secretario del Gran Oriente Federal Argentino.
X
Conclusiones

"La Gran Logia de Chile ha dejado de lado todas nuestras explicaciones y obrado por su voluntad, conforme a sus conveniencias. Buscó una justificación para romper la armonía y la unidad que las relaciones fraternales establecen y crean.
Por nota del 6 de septiembre de 1950, la Gran Logia Unida de Inglaterra notificó a la Gran Logia de la Masonería del Uruguay, que a partir de ese día, quedaba sin efecto por su parte, el reconocimiento de esa Potencia Masónica. Ello, como consecuencia de los acuerdos tomados en la Primera Conferencia Interamericana de la Francmasonería Simbólica, contrarios a su concepción actual de la creencia en Dios, la inmortalidad del alma y la Biblia. No pueden aplicarse a la Orden las doctrinas del totalitarismo. El Cominform o el Santo Sínodo no procederían de otro modo. ¡La creencia en Dios! ¡La Biblia en los altares! Recordamos un episodio de la Reforma. Un día en la Dieta de Augusta, el Arzobispo de Maguncia abre al acaso un libro y se pone a leer: "¿Qué lee su Reverencia?", le pregunta alguien de su séquito. "No sé que libro es, pero compruebo que todo lo que dice es contra vosotros", responde el sacerdote. Ese libro es la Escritura.
Por nuestra parte, nada objetamos a que usen la Biblia las Obediencias que así lo consideren. Pero para evitar confusiones y desacuerdos, no deben imponerla a los demás.
La Revista Masónica de Chile (marzo-abril de 1951) informa del viaje del Serenísimo Gran Maestre a Londres, en febrero último, concurriendo a una Reunión Especial de los miembros del Comité de Asuntos Generales de la Gran Logia Unida de Inglaterra. Y considera que "sus puntos de vista en cuanto a nuestros principios básicos, como también los universalistas, harán época en los anales históricos de la Francmasonería, y muy especialmente en la Masonería Sudamericana".
Y en el Mensaje Anual leído por el Serenísimo Gran Maestre, IL.´. y Pod.´. H.´. Orestes Frödden Lorenzen, en la tenida ordinaria de la Gran Logia de Chile, celebrada el 12 de mayo de 1951, al referirse a su viaje a Londres, dice: "Desde hace algún tiempo, la Gran Logia de Chile había sido repetidamente requerida por la Gran Logia Unida de Inglaterra, para aclarar ciertos puntos que a dicho poder le merecían ciertas dudas en lo que se refiere al debatido problema de la regularidad". Agrega que: "la situación venía preocupando seriamente a la Dirección Superior y al Consejo de la Gran Logia de Chile, todo ello agravado con la resolución adoptada por la Gran Logia de Inglaterra de suspender sus relaciones con la Gran Logia de la Masonería del Uruguay, por circunstancias análogas". Añade, que en la larga reunión de referencia se debatieron "los diferentes puntos que habían sido objeto de reparos por parte de los masones británicos, y que se refieren al Grande Arquitecto del Universo, la creencia en Dios, la Biblia, el uso de las herramientas del Tercer Grado y la inmortalidad del alma".
Los que actúan como vestales del Rito, han quebrado así bajo el peso de todos los anacronismos e intransigencias, los acuerdos libremente adoptados en 1947, en Montevideo, por 51 Obediencias americanas.
La crisis moral que hoy amenaza a la Orden, debemos enfrentarla al mismo tiempo que a las tendencias profanas que desconocen la dignidad y la libertad del hombre. Actuaremos en forma de que no se nos tache de iniciados pusilánimes en el Arte Real que sucumben ante la coacción, o la simple amenaza, de los materialmente más fuertes y poderosos.
Cualesquiera que sean los episodios del momento, seguiremos trabajando por los valores universales, con fe en la superación y en el progreso, contribuyendo a salvar para el futuro, el acervo espiritual de la Francmasonería Universal".

Verbum, Nº 1, 1934.

Ejemplar de Verbum que contiene el LIBRO BLANCO del G.´. O.´. F.´. A.´., 1951, Nº 38.