Los medicis, el sacro Imperio romano y los tulipanes

Publicado el 25 mayo 2017 por Monpalentina @FFroi
Existe un enfoque que percibe el cambio social no como una línea ascendente de continuo progreso que culmina con la modernidad, sino como una sucesión de ciclos en la que lo moderno es visto como una etapa más en la rueda de la historia de la humanidad, en la que se aprecia la aparición, desarrollo y caída de diversas sociedades y culturas. No existe un cambio lineal, sino circular. La teoría de los ciclos económicos se incluye en este enfoque y, como ya vemos que nada es nuevo, citaremos tres crisis que sacudieron a nuestros antepasados:


La familia Medici
Fue una de las principales familias de la Italia del Renacimiento. Controlaban la política de Florencia, tenían cierta ascendencia con los Papas y ayudaron al ascenso de Leonardo Da Vinci entre otros gracias a su mecenazgo -aunque en interés propio-. La fuente de su riqueza tenía sus raíces en el sistema bancario que habían fundado a finales del siglo XIV. Bajo la dirección de Cosme de Medici el Banco subió como la espuma; pero había un problema…se caracterizaban por tener una reserva de efectivo peligrosamente baja, apenas el 10% del activo. Naturalmente el banco se derrumbó, y con él los ahorros de miles de personas que habían confiado a ciegas en ellos. Hasta Carlos VIII también salió malparado. Naturalmente, acabaron siendo “corridos a gorrazos”. No consta en ningún archivo histórico que acabaran devolviendo el dinero. ¿Les suena?
Sacro Imperio Romano
Cuando los países aumentan rápidamente su deuda pública para “tapar agujeros” -o en este caso para financiar las guerras-, el resultado nunca es bueno. En el siglo XVII no había manera de sostener la Guerra de los 30 años, por lo que los Estados del Imperio comenzaron a acuñar nueva moneda a fin de pagar a proveedores y soldados. Había un problema, al fundir las nuevas monedas se mezclaban con metales de menor valor. Estas monedas devaluadas fueron pasadas en territorios extranjeros para limitar el daño económico que pudiera ocurrir al Imperio. Pero como un boomerang, las monedas regresaron… y a medida que la gente se dio cuenta comenzaron los disturbios, los soldados se negaron a aceptar la moneda “envilecida” como pago y panfletos sediciosos fueron distribuidos. La inflación elevó tanto los precios que el dinero acabó siendo un juguete para los niños.
Los Países Bajos y la Tulip-Manía
Tiene el dudoso honor de ser la primera “burbuja” económica moderna registrada. Cuando la flor del tulipán se introdujo en losPaíses Bajos a principios del siglo XVII se hizo inmediatamente muy popular. Se desató una verdadera locura consumista hacia esta flor entre los ciudadanos. Dado que esta planta solo crece en ciertas épocas del año (gracias Padre Mundina) los holandeses establecieron un mercado de futuro. Cuando no había tulipanes, los consumidores podían comprar los derechos de los bulbos cuando estuvieran disponibles. Los especuladores pronto empezaron a explotar el mercado y subieron los precios de los bulbos a niveles alarmantes, llegándose a vender un puñado de ellos por el equivalente a 10 años de salario medio de un trabajador. En 1637estalló la burbuja y los precios retrocedieron a los valores iniciales; los inversores vieron su dinero “borrado del mapa” y el colapso financiero trajo la ruina a más de uno.
Tenemos ordenadores y satélites, pero que poco hemos cambiado...
Imagen vista en "canalviajes".

© Una sección de Félix Casanova para Curiosón, 2016