Los médicos cristianos no pueden ser obligados a realizar cirugías transgénero, reglas de jueces

Un juez federal otorgó a los médicos cristianos y partidarios de la libertad religiosa una gran victoria el martes, dictaminando que no pueden ser obligados a ayudar con los procedimientos de cambio de género, como las cirugías de cambio de sexo.

El caso se remonta a la administración de Obama, cuando el Departamento de Salud y Servicios Humanos emitió una regla que requiere que prácticamente todos los médicos ayuden con los procedimientos de transición de género como parte de ObamaCare,  informa Becket Law .
El juez de distrito Reed O'Connor emitió un mandato contra la regla en 2016, y la administración Trump siguió emitiendo una nueva regla propuesta que protege los derechos de conciencia de los médicos cristianos y otros profesionales médicos.

El martes, O'Connor finalizó su decisión de 2016,  dictaminando que  la regla de la era Obama "carga sustancialmente" los derechos de ejercicio religioso en violación de la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa, una ley federal. O'Connor fue nominado por el presidente George W. Bush.
El Fondo Becket para la Libertad Religiosa había demandado al gobierno en nombre de la Alianza Franciscana, una red de hospitales religiosos patrocinada por las Hermanas de San Francisco de la Adoración Perpetua, y las Asociaciones Cristianas de Medicina y Odontología.
"Es de vital importancia que los médicos puedan continuar atendiendo a los pacientes de acuerdo con sus conciencias y su criterio médico profesional, especialmente cuando se trata de las opciones de salud personal de familias y niños", dijo Luke Goodrich, vicepresidente y asesor principal de Becket . "Los médicos no pueden hacer su trabajo si los burócratas del gobierno están tratando de obligarlos a realizar procedimientos potencialmente dañinos que violan su juicio médico y moral".

La regla de la era Obama, argumentó Becket, les habría exigido que realizaran procedimientos de transición de género en cualquier paciente, incluso si "el médico creía que el tratamiento podría dañar al paciente". Los médicos que se negaron podrían haber perdido su trabajo.
Goodrich lo calificó como "una gran victoria para la compasión, la conciencia y el buen juicio médico".
"Nuestros clientes esperan con alegría continuar atendiendo a todos los pacientes, independientemente de su identidad sexual o de género, y continuar brindando atención de primer nivel a pacientes transgénero para todo, desde cáncer hasta resfriado común", dijo Goodrich.