Según avanza el verano ya vemos como nuestra solanáceas comienzan a producir melones,sin embargo es cuando mas cuidado debemos tener, tanto con el sol como con el riego. El sol suele dañar los melones asolanandolos y haciendo que se estropeen, para ello debemos de alinear las matas en hileras y colocar los melones de forma central, de manera que la mata tape el melón y evitando que el sol lo reciba de forma directa. En cuento al riego debemos de tener mas cuidado de que los melones no se mojen durante esta actividad, ya que esto hará que nuestros frutos se ablanden y estropeen. Para ello debemos de programar el riego de forma que la planta reciba la suficiente agua pero sin encharcarla para evitar estos daños. Según las variedades que tengamos y lo abundante del abonado o riego que hayamos hecho asi serán nuestras plantas, por lo que cuanto mayor sera la cobertura mayor numero de melones puede albergar. Sin embargo un numero recomendado es entre dos y tres descartando los que están deformados o son mas pequeños favoreciendo asi la formación de un fruto mas grande y de mejor calidad.