No hay mucha información sobre la infancia y juventud de Mills pero, según nos confiesa en esta entrevista, parece que llegó al mundillo de casualidad. Aunque le gustaba escribir desde siempre, la culpa la tuvo la editorial escocesa DC Thompson, donde fue subeditor. Entre otras publicaciones, la casa albergaba títulos de cómics tan importantes para los británicos como Dandy o Beano. Allí conoció a John Wagner, ayudante de editor, un joven de su edad nacido en Pensilvania de madre escocesa que regresó a casa cuando John tenía doce años. En esta otra entrevista, Wagner nos cuenta que aún siendo jefe adjunto del semanario femenino Romeo, no se le había ocurrido escribir nada para dicho tebeo, hasta que vio a Pat intentarlo. DC Thompson pagaba poco, así que, en 1971, ambos se armaron de valor y comenzaron a colaborar como freelances con historietas breves de una página en la competencia, IPC, que había absorbido Fleetway (la casa del Eagle) en 1963. No llegaron mucho más lejos, pero pocos años después, cuando D.C. Thomson lanzó la bélica Warlord (1974), IPC se acordó de la pareja y les encargó una revista similar: Battle (1975). El resultado satisfizo las expectativas de la editora, así que Wagner dirigió un tiempo Valiant y Mills lanzó la popular Action (1976), cuyo contenido gore provocó su desaparición por la presión mediática. Pero pronto Mills encontró un subterfugio para justificar sus violentos guiones: la ciencia–ficción.
2000 AD vio la luz el 26 de febrero de 1977 con la excusa de resucitar al viejo héroe del Eagle, Dan Dare, para el que Mills escribirá varias historias con dinosauroides [2]. Pero los tiempos habían cambiado y, en plena explosión del punk (ese mismo mes se publica el primer álbum de The Damned y Syd Vicious entra en los Sex Pistols), los jóvenes Mills y Wagner supieron dar a la revista el enfoque necesario para convertirla en el mayor éxito del cómic británico de los últimos cuarenta años, hasta el punto de que logró sobrevivir a la crisis que extinguió el comic–book europeo con el cambio de siglo y aún se publica.
Pat se inspiró en parte en Hook Jaw, serie que había escrito para el dibujante español Ramón Solá en Action tras el éxito del Tiburón de Spielberg, y en parte en Westworld [3] (Michael Crichton, 1973). Pero, agobiado por sus múltiples compromisos y series, tuvo que delegar los guiones desde el segundo número en Ken Armstrong, el Giolitti Studio [4] o Kelvin Gosnell. Sin embargo, no se resistió a retomarlos en persona para las dos últimas entregas, ya que tenía preparado algo muy especial de lo que aún hoy manifiesta que se siente especialmente orgulloso, como cuenta en su página web. No quería que sucediera lo que en King Kong, donde la tecnología vence a la naturaleza salvaje. Así que Old One Eye no muere a manos humanas, sino de vieja y, aún después de ser reducido a un montón de huesos, se venga de un paleontólogo prepotente que pretende cenar dentro de su esqueleto, cuando es expuesto en un museo.
En cuanto al dibujo, Pat confió Flesh a los lápices españoles, que llevaban toda la década asombrando al mundillo en los cómic-books de Jim Warren (Vampirella, Creepy, Eerie) y en Europa eran conocidos y admirados desde mucho antes, gracias a la mediación de agencias como Selecciones Ilustradas o Bardon Art. Joan Boix se encargó de ilustrar las dos primeras entregas, tomando el relevo Ramón Solá los cinco siguientes, para volver a los lápices de Boix en los números #8-10 y #14, mientras Solá dibujó las entregas números #11-12, #15-16 y #19. Los restantes capítulos (números #13 y #17-18) fueron ilustrados por Félix Carrión. Por cierto, en España, las primeras entregas de Flesh fueron traducidas al castellano en la monografía de Ediciones Actuales S.A. «Guerra en las galaxias» (1978).
-----[1] Markham, Caroline (2016) Geosuffolk Times #30.[2] «Return of the Mekon», «The Dare Report» y «Fireflight» (Eagle #19-26 y #34-83, con Ian Kennedy, 1982).[3] Según la novela Six-Gun Planet (John Jakes, 1970), cuyo éxito motivó la secuela Future World (1976) y la serie de televisión Beyond Westworld (1980). En 2016, HBO la actualiza con elementos de todas ellas.[4] Formado por Alberto Giolitti (Turok, King Kong), incluía a medio centenar de autores, muchos de los cuales han introducido dinosaurios en sus obras, como Angelo Todaro (Turok), Enrico Bagnoli (Jann of the Jungle), Renato Polese (Viaggio al centro della Terra), Giancarlo Alessandrini (Martin Mystère), Giovanni Ticci (Turok), Massimo Belardinelli (Flesh II), Nevio Zeccara (Il mondo perduto), Franco Caprioli (Viaggio attraverso la preistoria) o Massimo Rotundo (portadas de Brendon #82 ó Il piccolo ranger #7).[5] Liston, J.J. (2010) «2000 A.D. and the new ‘Flesh’: first to report the dinosaur reanissance in ‘moving’ pictures», en Dinosaurs and Other Extinct Saurians: A Historical Perspective. Geological Society, London, Special Publications (343), 335-360.[6] Walt Williams («The Thing with Feathers» en el blog Prehistoric Pulp) sostiene que aunque en el cómic se les llama «peludos», gráficamente parecen dinosaurios emplumados.