Los niños del comunismo

Publicado el 27 octubre 2019 por Carlosgu82

Cuando la II Guerra Mundial estaba por terminar y los rusos llegaron a Berlín, sabían que el Nazismo estaba en sus últimas horas y pensaron que todo les sería fácil, pero se encontraron con un ejército que les hizo frente, conformado por miles de niños que creían ciegamente en el Führer. y no les importaba dar su vida por él.

Salomón Perel también fue uno de ellos. Niño de origen judío que sobrevivió a la guerra haciéndose pasar por alemán y cuyos padres y hermana fueron asesinados en un campo de concentración.

Fue tal su fanatismo, que incluso de viejo, cuando escuchaba himnos alemanes, se paraba de su silla y alzaba su brazo derecho en conmemoración al Führer. Debían transcurrir algunos minutos para reaccionar que él no era alemán y recordar que  su familia había sido asesinada por los Nazis.

Como un ser tan despreciable pudo ser amado, respetado y venerado por millones de niños?

Hace tiempo vengo observando el comportamiento juvenil de mi país, Chile, viendo cómo los jóvenes que asisten a la educación pública, han ido perdiendo paulatinamente el respeto, no sólo hacia la autoridad civil, sino también la de sus progenitores.

Podríamos pensar que la vertiginosidad de los tiempos en que vivimos podría ser la causante y además sumarle la poca presencia de sus padres en casa, pero si esto fuera la razón, no coincidiría con el nivel de odio y violencia que ellos sienten hacia la autoridad civil. Porque una cosa es hacer caso omiso y otra diferente es atacar a ese alguién,verbal y/o físicamente.

Si consideramos que desde hace 30 años Chile vive en democracia, es claro que ninguno de ellos ha vivido en un régimen de dictadura, pero sí pudieron haberlo vivido sus padres, tíos o abuelos. Por otro lado tenemos a los niños de la educación privada, quienes tampoco vivieron una dictadura, pero que en muchos casos, sus familias sí.

Entonces te preguntas, porque los de la educación pública actúan con tanto odio y los otros no. La respuesta más barata es decir, porque los primeros tienen menos oportunidades que los segundos, pero no podemos olvidar que ambos tipos de educación siempre han coexistido, no solo en Chile, sino que en el mundo entero, pero sin embargo no ocurre el mismo fenómeno en otras partes.

Llevando esto, a lo que está ocurriendo en Chile hoy, no podemos pasar por alto el hecho de que todo el revolute partió justamente con los jóvenes, evadiendo el metro, pero ya venían aconteciendo hechos extremadamente violentos también de parte de los estudiantes, desde el 2014, quienes han destruido una y otra vez sus propios centros de estudios, en donde pareciera que no tienen ni siquiera la claridad meridiana del porqué lo hacen, excepto odio y de paso, más de 5 millones de dólares en pérdidas.sin mencionar las pérdidas de horas de clases..

Así también es importante  mencionar, que varios de los diputados que hoy tienen un lugar en el parlamento, hace pocos años, también eran parte de las revueltas juveniles en sus liceos, luego  presidentes de la federación de estudiantes de sus respectivas universidades, posteriormente ocuparon cargos en el partido comunista y de ahí brincaron al parlamento, sin mayor expectativas de vida que la de revolver  a las juventudes desde lo alto.

Todo esto claramente da para pensar, que tal vez se está utilizando una forma de adoctrinación política subliminal en los niños, inyectandoles odios y resentimientos que no les corresponden llevar a cuestas, para luego ser utilizados en objetivos políticos, como meros peones de su juego..

Y por supuesto, intentando así, destruir a una Nación entera

«Tú no piensas como yo, pero tus hijos me pertenecen»

Adolf Hitler