Ya hace años que los productores de aceite de oliva virgen extra pensaron en captar a un público que aunque no tiene la posibilidad de comprar, en algunos casos si tiene la posibilidad de elegir y sobre todo de influenciar a los adultos a la hora de comprar, hablamos de los niños. Hay que decir que el aceite de oliva virgen extra es un excelente alimento y además se recomienda introducir en la alimentación de los bebés en el momento en el que empiezan con la alimentación mixta, es decir, a partir de los seis meses.
Cuando se empiezan a preparar papillas de verduras, con pescado, con carne… también hay que empezar a introducir el aceite de oliva virgen extra. Lo que nunca han recomendado los pediatras es que se escoja un aceite de oliva virgen extra en particular, y mucho menos uno que se haya lanzado al mercado con un público objetivo concreto como son los bebés o los niños, pues no es necesario.
Lo que sí es importante es que el aceite sea virgen extra, no es lo mismo el aceite de oliva ni el aceite de oliva virgen. Si no tenéis muy claras las diferencias, en otro momento podemos abordar el tema para que tengáis y elijáis el que realmente aporta los beneficios que se le otorgan al denominado ‘oro líquido’, de momento ya sabéis que debe ser aceite de oliva virgen extra, es más caro, pero no sale caro porque el consumo no es elevado.
También es importante tener en cuenta que para para aprovechar al máximo las virtudes nutricionales del aceite de oliva virgen extra debe incorporarse a la papilla cuando se va a triturar o cuando ya está triturada, es decir, las propiedades del zumo de aceituna se aprovechan si se toma en crudo. Lo mismo cuando los niños ya comen como toda la familia, la verdura, las ensaladas, e incluso un plato de lentejas se puede aderezar a última hora con una cucharadita de aceite de oliva virgen extra.
Quizá muchas personas pensarán que el aceite de oliva virgen extra tiene un sabor muy fuerte y que es posible que algunos bebés y niños no lo acepten, pero lo cierto es que hay distintas variedades de aceituna y cada una tiene sus características, algunas son más suaves y otras son más fuertes. Entre las suaves podemos mencionar el aceite monovarietal (hechos con una sola variedad de aceituna) arbequina, mientras que la variedad hojiblanca, que tampoco es de los más fuertes, es ligeramente dulce y con aromas a hierba fresca y frutas verdes.
Si queréis conocer más características sobre el aceite de oliva virgen extra, que variedades son más apropiadas para tomar crudo o para cocinar, y desterrar la necesidad de comprar un aceite de oliva virgen extra que en su etiqueta indique que especialmente elaborado para los niños, podéis acceder a esta web de promoción del AOVE español.
Foto | USDA
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Los niños no tienen que tomar un aceite de oliva virgen extra que se etiquete con dibujos infantiles