El presente, de una manera u otra no puede obviar los errores del pasado, pero sí puede lograr hacer realidad los sueños que se vieron truncados. Tres generaciones de mujeres vivieron con valentía y determinación el tiempo que les tocó vivir. La abuela Basilisa sacrificó el amor, sufrió la marginación social en su condición de madre soltera y lidió contra la miseria. Su hija Conchita se casó con un oficial del Ejército, cargando con un matrimonio de infelicidad, se ha entregado en cuerpo y alma a su pequeña empresa olivarera. Ambas conocieron el esfuerzo y el sacrificio, María en cambio, se ha labrado un futuro profesional lejos de su pueblo y tiene la oportunidad de luchar por ese amor verdadero que ha irrumpido en su vida. La homosexualidad femenina de la protagonista es otro tema a destacar en la obra, materia literaria aún poco frecuentada en nuestra literatura. No sin pocas dificultades, la joven, hará todo lo posible para llevarse por delante los convencionalismos, la falsa moral y las creencias religiosas que existen en nuestra sociedad, en pos del amor que le ofrece la mujer de sus sueños.
El amor sigue ganando batallas allí donde la guerra las pierde.